Regional VIZCAYA
MULTIPLE
EL CORREO Pág.   Domingo, 22/06/2003

Autor: J. M. REVIRIEGO/BILBAO
 
       
 
El principal depósito de agua de Bilbao se vaciará por primera vez en 70 años  
 
  VIZCAYA   
  Pie de foto:COMO UN TÚNEL. Un técnico revisa los planos en el interior del depósito. / MITXEL ATRIO    
 

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Técnicos municipales y submarinistas trabajarán en la revisión del aljibe, un túnel de medio kilómetro que se extiende bajo un monte de Rekalde Una tubería alternativa garantizará el abastecimiento mientras duren las obras
J. M. REVIRIEGO/BILBAO
COMO UN TÚNEL. Un técnico revisa los planos en el interior del depósito. / MITXEL ATRIO
DEPÓSITOS PRINCIPALES
Elejabarri: 13.842 metros cúbicos de capacidad.

Larraskitu: 24.000.

Castrejana: 7.000.

Cobetas: 3.500.

Miramar: 11.000.

Zabalbide: 7.000.

Begoña: 4.500.

Otxarkoaga (2): 16.000.

Monte Avril: 1.000.
El Ayuntamiento de Bilbao someterá este año a una profunda reforma al depósito de Elejabarri, el principal distribuidor de agua de la ciudad, con el fin de mejorar el servicio y reforzar sus garantías sanitarias tras el episodio contaminante registrado en la red de gestión municipal en marzo. El acuífero, situado bajo un monte en el barrio de Rekalde, tiene medio kilómetro de longitud y se asemeja a un túnel. Tiene diez metros de anchura por otros tantos de altura. La profundidad es de casi cinco metros. Para realizar la renovación de este extraordinario canal fluvial subterráneo, el Consistorio se ayudará de un equipo de submarinistas y de operarios a bordo de pequeñas embarcaciones. La remodelación obligará a vaciar por primera vez el aljibe, construido en 1930.

Los técnicos municipales detectaron el 26 de marzo en este depósito la presencia de la bacteria 'escherichia coli' y pusieron en cuarentena el sistema de abastecimiento, que bebe del embalse burgalés de Ordunte. Finalmente se comprobó que el microorganismo coliforme no estaba asentado en el canal, sino que había desembocado tras colarse en la red a través de una arqueta forzada en Güeñes. A día de hoy, ésta sigue siendo la causa oficial de la alerta sanitaria, que obligó a dejar sin agua potable a la mayor parte de Bilbao durante tres días.

Revisar y purgar la red

El servicio se restableció gracias a la llegada de agua del Consorcio, procedente del Zadorra, que permitió renovar el caudal. El Ayuntamiento aprovechó el incidente para revisar los sifones, purgar la red y limpiar de sedimentos las tuberías que habían permanecido secas tras el cierre del grifo burgalés, según explica el director de la concejalía de Obras y Servicios, Manuel Asua.

A raíz de esta alerta, sin precedentes en Bilbao, el Consistorio ha optado por prevenirse. Si el principal aguador de la ciudad hubiera sufrido una avería seria, como una contaminación o una fuga, el suministro hubiera quedado comprometido. Elejabarri no sólo es un regulador del caudal, sino que es el canal de paso.

Las obras de reforma dividirán la cubeta subterránea. «Haremos como dos depósitos en uno. Así podremos trabajar con uno y tener el otro en caso de necesidad o emergencia», indica Asua. Para ello, el depósito tendrá que ser vaciado por primera vez en su historia. De esta forma, la subárea de aguas y saneamiento podrá también revisar el estado de la cavidad, su grado de impermeabilización y conservación, y retirar los lodos y fangos de su fondo.

Para mantener el suministro durante la operación, la primera tarea consistirá en la colocación de una tubería que atravesará los cerca de 500 metros del túnel. La instalación de este 'bypass' revela las interioridades de Elejabarri. Ayudados por submarinistas, los operarios deberán trabajar en botes dentro de la galería para colocar los andamios que sujetarán los tubos. Los mecanotubos contarán con un sistema de rodillos para facilitar el deslizamiento de la nueva infraestructura, de 60 centímetros de diámetro y constituida en una sola pieza. Por la boca de entrada, situada en Masustegi, «irá entrando el tubo» mientras «se va soldando fuera». El arrastre se producirá desde el otro lado del túnel, en Betolaza.

Agua muy clorada

La tubería se nutrirá del sistema del Consorcio, que cuenta con un depósito en las cercanías, hasta que Elejabarri se llene de nuevo. El Ayuntamiento se apoyará en el aljibe de Larraskitu para compensar una eventual bajada de presión. Asua descarta que la actividad acuática afecte a la calidad de las aguas. «Estará muy clorada y se trabajará despacio y limpiamente», afirma el director. Los submarinistas, habituales en los trabajos que se desarrollan en el Puerto, trabajarán sin aletas para no remover el fondo. Las zodiacs no tendrán motor para evitar un eventual vertido al caudal. La tubería podría estar lista en julio.

Para extremar el control, el Ayuntamiento estudia conectar por vía informática el depósito y la central de aguas, ubicada en el edificio Aznar, en pleno centro de Bilbao. Aunque el canal está vigilado las 24 horas del día, los responsables locales podrían tener información al momento sobre los niveles de cloro y del caudal.