Las tres diputaciones de la Comunidad están diseñando una profunda revisión de su mapa competencial para eliminar duplicidades y reducir estructuras y costes de mantenimiento. La propuesta, en la que vienen trabajando desde su primera reunión con la Generalitat, a principios de año, se pondrá sobre la mesa en la cumbre de diputaciones que se celebra este miércoles en Valencia.

Al margen de abordar la fusión de municipios menores de 1.000 habitantes, como pretende el Gobierno, la cumbre -convocada por el valenciano Alfonso Rus en tanto que presidente de la comisión de diputaciones de la FEMP- servirá también para redefinir el papel de las instituciones provinciales. Un futuro en el que las diputaciones de la Comunidad apuestan por desprenderse de numerosas competencias impropias que tienen asumidas, en algunos casos, desde hace décadas. Pero en el que también se ofrecen a aliviar de competencias al Estado y las autonomías.

El borrador en el que han trabajado técnicos de las tres instituciones provinciales contempla ceder a la Generalitat todas las competencias en materias tan sensibles como el Turismo, el Medio Ambiente o la gestión de residuos, además de las prestaciones asistenciales (en sanidad y servicios sociales). Pero a cambio propone asumir en exclusiva la gestión del ciclo hídrico -una cuestión que interesa especialmente al presidente de la Diputación de Castellón, Javier Moliner- o la de las carreteras locales -como propone la de Alicante-. También piden gestionar las infraestructuras y ayudas culturales y deportivas, y proponen convertirse en «ventanilla única».

Las tres instituciones han preparado distintos documentos con propuestaspara eliminar duplicidades y ahorrar costes que se fijan como objetivo la reducción de la estructura burocrática.

Las diputaciones consideran que las competencias en Turismo deberían corresponder exclusivamente a la Generalitat, que es quien legisla y regula el sector. La cesión supondría simplificar los Patronatos, algo que podría generar controversia con los empresarios, dado que son los encargados de promocionar las marcas provinciales. En cualquier caso, el documento destaca que los patronatos se han suprimido ya en varias provincias, incluso en Mallorca.

Las diputaciones sostienen todavía la prestación de servicios asistenciales que nunca fueron su competencia. En el caso de Alicante, mantiene el centro psiquiátrico del Doctor Esquerdo o el Hogar Provincial, por ejemplo.La devolución a la Generalitat estaba ya prevista, pero se paró por la crisis.

El documento sobre el que trabajan las tres instituciones provinciales también propone ceder la gestión de los residuos sólidos y del Medio Ambiente a la Generalitat. Algo que supondría desmantelar la compleja organización comarcal para la gestión de residuos tejida en los últimos años -y que todavía está en desarrollo- y permitiría adelgazar las agencias medioambientales de ámbito provincial.

A cambio de las citadas cesiones a la Generalitat, las diputaciones proponen asumir en exclusiva, entre otros, la gestión del Ciclo Hídrico. Una propuesta inspirada por el presidente de Castellón, Javier Moliner, tras la reunión con alcaldes mantenida hace unos meses. Las diputaciones se encargarían así del abastecimiento y la depuración de aguas residuales, además de la limpieza de cauces de ríos.

En la actualidad, algunas carreteras locales son competencia de la Generalitat, y otras de las diputaciones. Las instituciones provinciales se ofrecen a asumir la totalidad de la red.