La ausencia de la depuradora de Navia y Coaña se hace notar. Las conducciones de vertidos que desembocan en la ría necesitan reparaciones periódicas y los residuos que llegan al estuario generan de vez en cuando desagradables olores que se extienden por el centro de la villa naviega. Esto suscita el malestar de vecinos y refuerza la necesidad de concluir la obra.

El alcalde de Navia, el socialista Ignacio García Palacios, es consciente de la urgencia de poner en marcha la infraestructura. Y es que el vertido a la ría de los residuos urbanos de Navia y los núcleos costeros de Coaña representa, a su juicio, «una de las mayores agresiones medioambientales de la comarca». Pero este convencimiento no es suficiente para acelerar una inversión lastrada por la polémica sobre su ubicación y ahora también por los recortes del Principado.

El presupuesto prorrogado de 2011 incluía una partida cercana a los 5,7 millones de euros para la construcción de la depuradora. La obra se adjudicó ese mismo año bajo mandato socialista y los trabajos comenzaron en las inmediaciones del pueblo coañés de Foxos. Sin embargo, el Ayuntamiento y los vecinos mostraron su desacuerdo con la ubicación, advirtiendo de su impacto sobre el paisaje y los ruidos que ocasionará su funcionamiento. Ante estas quejas, el Ejecutivo de Foro Asturias suspendió la actuación y se comprometió a buscar un nuevo emplazamiento para la infraestructura, pero no hubo avances.

Esta situación, advierte García Palacios, puede suscitar problemas, como una reclamación de daños y perjuicios por parte de la empresa adjudicataria de los trabajos. Pero el proyecto continúa bloqueado y la situación económica supone un nuevo obstáculo.

A pesar de que la Consejería de Fomento es la que más financiación recibirá de los 423 millones del crédito extraordinario (en concreto, 107 millones de euros), algunas de las obras recogidas en el presupuesto tendrán que ser aplazadas y la depuradora de la ría de Navia es una de ellas. Frente a los 5,7 millones autorizados en 2011 para la ejecución de la obra, el nuevo documento financiero le reserva poco más de 361.000 euros. Así, al menos habrá que esperar a la aprobación de las cuentas regionales del próximo año para situar la finalización de la infraestructura.

La disponibilidad de fondos suficientes desatascaría el proyecto siempre que el Ejecutivo socialista no atienda las demandas de Coaña respecto a la ubicación para la depuradora. En su anterior etapa como responsable de las obras de saneamiento, la consejera, Belén Fernández, descartó esta posibilidad, lo que llevó al Ayuntamiento a plantear un contencioso contra el Principado aún sin resolver.