CHE y Generalitat quieren aumentar la colaboración para preservar el Delta
Vie, 21/09/2012
El presidente de la Confederación Hidrográfica del Ebro, Xavier de Pedro, y el consejero de Territorio y Sostenibilidad de la Generalitat de Cataluña, Lluís Recoder, han reconocido la necesidad de aumentar la colaboración entre ambas administraciones para preservar la integridad del Delta del Ebro.
Ambos dirigentes se han reunido hoy en Barcelona en el marco de la ronda de contactos que el presidente de la CHE está realizando con todos los miembros del Consejo del Agua, máximo órgano responsable de la aprobación del Plan de Demarcación con el objetivo de alcanzar el máximo consenso posible sobre su contenido.
De Pedro ha trasladado al conseller catalán las medidas que recoge el plan, actualmente en periodo de exposición públicas, referidas a Cataluña, donde se definen acciones que implican a todas las administraciones para una gestión equilibrada entre las demandas del territorio y la mejora de las masas de agua, informan fuentes de la CHE en una nota de prensa.
Uno de los fines del encuentro ha sido analizar de forma conjunta los criterios técnicos utilizados para definir los caudales ecológicos en la desembocadura del Ebro.
En un encuentro anterior, también celebrado en Barcelona el pasado mes de junio, Xavier de Pedro entregó al conseller Recoder un documento con toda la información sobre el proceso técnico desarrollado para obtener estos caudales, en una apuesta "clara" por la cooperación y la transparencia en toda la tramitación del Plan.
Desde la CHE se quieren mantener todas las vías de debate para que la propuesta final sea un texto mejorado que apueste más por la participación de las Comunidades Autónomas y fije las fórmulas de una colaboración continua para conseguir preservar la integridad del Delta del Ebro, para lo que los caudales ecológicos son sólo una de las herramientas con las que contará el Plan.
Los caudales ecológicos se han fijado en los puntos estratégicos donde es posible el seguimiento para controlar su cumplimiento posterior.
Los caudales ambientales no se expresan con un único número, ya que son los mínimos caudales a respetar para cada uno de los meses del año, y se han obtenido mediante la aplicación de la metodología establecida en la Instrucción de Planificación y teniendo en cuenta la información aportada por las Comunidades Autónomas y los usuarios y se han mantenido reuniones de coordinación sobre este punto.
El Plan recoge los objetivos comunes de las nueve comunidades autónomas, bajo el criterio de gestión integral de la cuenca, para alcanzar una gestión más eficiente y sostenible del agua que oriente las decisiones de las administraciones y de los ciudadanos.
Por ello, su contenido normativo y su programa de medidas están dirigidos a alcanzar el equilibrio entre el buen estado ecológico y las demandas actuales y futuras.
En la reunión también se ha tratado sobre las medidas generales que recoge la propuesta del Plan para todos los ámbitos de gestión del agua, que, recuerda la CHE, no sólo son acciones e inversiones de la Administración Central del Estado, si no de todas las administraciones, usuarios y sociedades como AcuaEbro y AcuaMed.
Uno de los datos incluidos en Plan ahora en información publica es de la previsión de nuevas zonas de regadío en Cataluña definidas por la Generalitat y que aparecen en la propuesta de Plan.
En este sentido, hasta 2020 se prevé la puesta en regadío de 125.000 hectáreas, a lo que se suman 175.000 hectáreas de modernización de regadíos, lo que supone una demanda de agua para Cataluña que se incluye en el Plan.
En la propuesta están presentes también de forma íntegra, igual que ocurre con el Plan de Regadíos de la Generalitat de Cataluña, el plan Integral de Protección del Delta del Ebro, el plan para la eliminación de la contaminación química del embalse de Flix, el de restitución de la descontaminación de Flix.
Así como otros paquetes de medidas que se refieren a garantías de abastecimiento, mejoras ambientales, planes de restitución, plan de choque contra las sequías o el plan de medidas para la prevención, control y erradicación de especies invasoras en la parte Catalana de la Demarcación del Ebro.
Además se ha debatido sobre competencias en el Dominio Público Hidráulico y la apuesta por la colaboración y máxima coordinación administrativa.
Entre otros aspectos, el Plan de Demarcación fija como horizonte que más del 85 % de las masas de agua de la Cuenca alcance su buen estado ecológico.
Según la CHE, el punto de partida es positivo ya que en la fase de evaluación previa al Plan se ha concluido que cerca del 70 % de las masas de la Cuenca del Ebro se encuentran en muy buen o buen estado
Ambos dirigentes se han reunido hoy en Barcelona en el marco de la ronda de contactos que el presidente de la CHE está realizando con todos los miembros del Consejo del Agua, máximo órgano responsable de la aprobación del Plan de Demarcación con el objetivo de alcanzar el máximo consenso posible sobre su contenido.
De Pedro ha trasladado al conseller catalán las medidas que recoge el plan, actualmente en periodo de exposición públicas, referidas a Cataluña, donde se definen acciones que implican a todas las administraciones para una gestión equilibrada entre las demandas del territorio y la mejora de las masas de agua, informan fuentes de la CHE en una nota de prensa.
Uno de los fines del encuentro ha sido analizar de forma conjunta los criterios técnicos utilizados para definir los caudales ecológicos en la desembocadura del Ebro.
En un encuentro anterior, también celebrado en Barcelona el pasado mes de junio, Xavier de Pedro entregó al conseller Recoder un documento con toda la información sobre el proceso técnico desarrollado para obtener estos caudales, en una apuesta "clara" por la cooperación y la transparencia en toda la tramitación del Plan.
Desde la CHE se quieren mantener todas las vías de debate para que la propuesta final sea un texto mejorado que apueste más por la participación de las Comunidades Autónomas y fije las fórmulas de una colaboración continua para conseguir preservar la integridad del Delta del Ebro, para lo que los caudales ecológicos son sólo una de las herramientas con las que contará el Plan.
Los caudales ecológicos se han fijado en los puntos estratégicos donde es posible el seguimiento para controlar su cumplimiento posterior.
Los caudales ambientales no se expresan con un único número, ya que son los mínimos caudales a respetar para cada uno de los meses del año, y se han obtenido mediante la aplicación de la metodología establecida en la Instrucción de Planificación y teniendo en cuenta la información aportada por las Comunidades Autónomas y los usuarios y se han mantenido reuniones de coordinación sobre este punto.
El Plan recoge los objetivos comunes de las nueve comunidades autónomas, bajo el criterio de gestión integral de la cuenca, para alcanzar una gestión más eficiente y sostenible del agua que oriente las decisiones de las administraciones y de los ciudadanos.
Por ello, su contenido normativo y su programa de medidas están dirigidos a alcanzar el equilibrio entre el buen estado ecológico y las demandas actuales y futuras.
En la reunión también se ha tratado sobre las medidas generales que recoge la propuesta del Plan para todos los ámbitos de gestión del agua, que, recuerda la CHE, no sólo son acciones e inversiones de la Administración Central del Estado, si no de todas las administraciones, usuarios y sociedades como AcuaEbro y AcuaMed.
Uno de los datos incluidos en Plan ahora en información publica es de la previsión de nuevas zonas de regadío en Cataluña definidas por la Generalitat y que aparecen en la propuesta de Plan.
En este sentido, hasta 2020 se prevé la puesta en regadío de 125.000 hectáreas, a lo que se suman 175.000 hectáreas de modernización de regadíos, lo que supone una demanda de agua para Cataluña que se incluye en el Plan.
En la propuesta están presentes también de forma íntegra, igual que ocurre con el Plan de Regadíos de la Generalitat de Cataluña, el plan Integral de Protección del Delta del Ebro, el plan para la eliminación de la contaminación química del embalse de Flix, el de restitución de la descontaminación de Flix.
Así como otros paquetes de medidas que se refieren a garantías de abastecimiento, mejoras ambientales, planes de restitución, plan de choque contra las sequías o el plan de medidas para la prevención, control y erradicación de especies invasoras en la parte Catalana de la Demarcación del Ebro.
Además se ha debatido sobre competencias en el Dominio Público Hidráulico y la apuesta por la colaboración y máxima coordinación administrativa.
Entre otros aspectos, el Plan de Demarcación fija como horizonte que más del 85 % de las masas de agua de la Cuenca alcance su buen estado ecológico.
Según la CHE, el punto de partida es positivo ya que en la fase de evaluación previa al Plan se ha concluido que cerca del 70 % de las masas de la Cuenca del Ebro se encuentran en muy buen o buen estado