Los regantes trabajan ya para impulsar el proyecto de sustitución de bombeos
Lun, 12/11/2012
Con solo nueve votos en contra la Junta Central de Regantes de la Mancha Oriental (JCRMO) aprobó ayer sus normas de gestión, coordinación y control de riegos para la campaña agrícola 2012-2013. Una campaña en la que no se producirán restricciones en los riegos.
Situación ésta de la que se congratuló el presidente de los regantes albaceteños, Francisco Belmonte, quien se alegró de que sus predicciones de hace apenas unos meses, cuando alertaba de que la cuenca del Júcar, podía encontrarse ya en pleno ecuador de un periodo seco.
El máximo responsable de la JCRMO esbozó las actuaciones más destacadas llevadas a cabo en los últimos meses y la hoja de ruta a seguir de cara a los próximos. En este sentido, se explicó que se ha retomado el proyecto de la segunda fase de bombeos para la Mancha Oriental que supondría, según el estudio inicial, la eliminación de unos 270 pozos y que supondría llevar a cabo obras en un total de 15 municipios albaceteños y dos más de la provincia de Cuenca.
La segunda fase permitirá que se dejen de extraer 47,15 hectómetros cúbicos anuales del acuífero de la Mancha Oriental para usar aguas superficiales derivadas desde el embalse de Alarcón. Una vez que se ponga en marcha la segunda fase se completaría la sustitución de un total de 80 hectómetros aprobada en su día.
El proyecto de la segunda fase se presupuestó en su momento en 102 millones de euros. Ahora desde la Junta Central de Regantes, junto a la Confederación Hidrográfica del Júcar y a la Junta de Comunidades, quieren impulsar este proyecto que ha sufrido continuos retrasos. Para ello han constituido una comisión que estudie cómo llevar a cabo el proyecto en estos tiempos de crisis, es decir si se pueden abaratar costes, así como quién y de qué manera sufragaría el proyecto. En definitiva, de hacerlo viable para todos los usuarios incluyendo tanto a los que se beneficiarían directamente con la sustitución como a los que lo harían indirectamente.
Desde la Junta Central de Regantes, según indicó el secretario de la misma, Herminio Molina, abogan por analizar y priorizar las zonas de actuación si el proyecto, por su elevado coste, no pudiese acometerse de forma íntegra en estos momentos. El objetivo es que no quede de nuevo relegado en el cajón del olvido.
Sobre la mesa ayer también se volvió a poner una cuestión prioritaria para la JCRMO como son las actuaciones a realizar tras la puesta en marcha del trasvase Júcar-Vinalopó. Los regantes han solicitado a la Confederación que les facilite el expediente administrativo, ya que se trata de una actuación incluida en el Plan Hidrológico, sobre el que se asientan las referidas obras y las derivaciones de agua. Según manifestó Molina, el organismo de cuenca les ha respondido que en breve les facilitará esa información.
Pero desde la Junta Central de Regantes de la Mancha Oriental están dispuestos, como ya han anunciado por activa y por pasiva, a llegar hasta donde sea necesario si el trasvase en cuestión no cumple con la legalidad. De hecho este verano el propio Belmonte advertía nuevamente algo que ya habían dejado muy claro: «demandaremos a quien autorice el trasvase sin cumplir las condiciones legales En la asamblea en la que se ratificó el Plan de Explotación no faltaron momentos de tensión, especialmente cuando varios usuarios expusieron ante el foro de regantes un problema y cuestionaron la gestión realizada.
Situación ésta de la que se congratuló el presidente de los regantes albaceteños, Francisco Belmonte, quien se alegró de que sus predicciones de hace apenas unos meses, cuando alertaba de que la cuenca del Júcar, podía encontrarse ya en pleno ecuador de un periodo seco.
El máximo responsable de la JCRMO esbozó las actuaciones más destacadas llevadas a cabo en los últimos meses y la hoja de ruta a seguir de cara a los próximos. En este sentido, se explicó que se ha retomado el proyecto de la segunda fase de bombeos para la Mancha Oriental que supondría, según el estudio inicial, la eliminación de unos 270 pozos y que supondría llevar a cabo obras en un total de 15 municipios albaceteños y dos más de la provincia de Cuenca.
La segunda fase permitirá que se dejen de extraer 47,15 hectómetros cúbicos anuales del acuífero de la Mancha Oriental para usar aguas superficiales derivadas desde el embalse de Alarcón. Una vez que se ponga en marcha la segunda fase se completaría la sustitución de un total de 80 hectómetros aprobada en su día.
El proyecto de la segunda fase se presupuestó en su momento en 102 millones de euros. Ahora desde la Junta Central de Regantes, junto a la Confederación Hidrográfica del Júcar y a la Junta de Comunidades, quieren impulsar este proyecto que ha sufrido continuos retrasos. Para ello han constituido una comisión que estudie cómo llevar a cabo el proyecto en estos tiempos de crisis, es decir si se pueden abaratar costes, así como quién y de qué manera sufragaría el proyecto. En definitiva, de hacerlo viable para todos los usuarios incluyendo tanto a los que se beneficiarían directamente con la sustitución como a los que lo harían indirectamente.
Desde la Junta Central de Regantes, según indicó el secretario de la misma, Herminio Molina, abogan por analizar y priorizar las zonas de actuación si el proyecto, por su elevado coste, no pudiese acometerse de forma íntegra en estos momentos. El objetivo es que no quede de nuevo relegado en el cajón del olvido.
Sobre la mesa ayer también se volvió a poner una cuestión prioritaria para la JCRMO como son las actuaciones a realizar tras la puesta en marcha del trasvase Júcar-Vinalopó. Los regantes han solicitado a la Confederación que les facilite el expediente administrativo, ya que se trata de una actuación incluida en el Plan Hidrológico, sobre el que se asientan las referidas obras y las derivaciones de agua. Según manifestó Molina, el organismo de cuenca les ha respondido que en breve les facilitará esa información.
Pero desde la Junta Central de Regantes de la Mancha Oriental están dispuestos, como ya han anunciado por activa y por pasiva, a llegar hasta donde sea necesario si el trasvase en cuestión no cumple con la legalidad. De hecho este verano el propio Belmonte advertía nuevamente algo que ya habían dejado muy claro: «demandaremos a quien autorice el trasvase sin cumplir las condiciones legales En la asamblea en la que se ratificó el Plan de Explotación no faltaron momentos de tensión, especialmente cuando varios usuarios expusieron ante el foro de regantes un problema y cuestionaron la gestión realizada.