Un emisario submarino podría verter a 3 kilómetros de la costa las aguas residuales de la ría

Dom, 30/05/2004

El Correo Gallego

EL PLAN MÁS AMBICIOSO
Aprobación: En junio de 1979, la asamblea del Consorcio ratificó el Plan Integral de Saneamiento del Gran Bilbao. Las obras, que empezaron en 1984, podrían estar terminadas en 2007. En virtud de las directivas europeas, su principal objetivo es tratar las aguas residuales de los núcleos urbanos con más de 2.000 habitantes.

La piedra angular: La depuradora de Galindo, inaugurada en 1990, es el centro neurálgico del sistema de saneamiento. Recicla las aguas residuales de 800.000 habitantes.

Inversiones: El presupuesto total del plan alcanza los 775 millones de euros. Hasta el momento, ya se han gastado 479 millones.

Último tramo: Para el trienio 2004-2007 el Consorcio tiene previsto invertir 150 millones de euros. Todavía quedaría pendiente la construcción de la depuradora de Lamiako, presupuestada en 65 millones, y otras obras en la red general de colectores.
Casi 25 años después de la aprobación del Plan Integral de Saneamiento del Gran Bilbao, el Consorcio de Aguas perfila el remate final de la obra medioambiental más ambiciosa de Euskadi. Aunque todavía pueden decantarse por otras alternativas como la esterilización de las aguas residuales, el proyecto que más fuerza ha cobrado en el organismo mancomunado consiste en construir un emisario submarino para llevar las aguas de saneamiento a tres kilómetros de la costa. La idea, que ya se ha traducido en varios estudios, permitiría a la entidad vizcaína cerrar la regeneración de la ría con la eliminación de todos los vertidos.

Concebida como la tubería de evacuación submarina más grande del Cantábrico, los especialistas del Consorcio barajan dos ubicaciones para su desembocadura. Por un lado, plantean llevar la conducción hasta Punta Lucero tras comunicar la depuradora de Galindo y la de Lamiako, que todavía no ha empezado a construirse. El segundo trazado sería a la inversa. El emisario se conectaría a la planta de Sestao y, tras pasar por las futuras instalaciones de Leioa, llegaría hasta La Galea.

«Ahora estamos mareando los residuos por toda la ría y tenemos la posibilidad de llevarlos mar adentro sin degradar ninguna zona», asegura a modo de presentación del proyecto Daniel Fernández, director técnico del Consorcio. De hecho, desde que se puso en marcha el Plan Integral de Saneamiento se ha construido una red de tuberías de 170 kilómetros, la mayoría de ellas en el entorno de la ría.

Buena parte de esta madeja de colectores están conectados con la depuradora de Galindo, que regenera las aguas fecales de 800.000 vizcaínos. Desde hace tres años, la planta utiliza un moderno sistema biológico que permite devolver a la ría los flujos tratados con sólo un 5% de contaminación. «El mar tiene una capacidad impresionante de dispersión. Gracias a las corrientes, la salinidad y otros factores podemos conseguir que el porcentaje de suciedad sea todavía más bajo», subraya el especialista de la entidad.

El otro pilar sobre el que pivotan las explicaciones del Consorcio es la carga extra de vertidos que recibirá la ría en los próximos meses. Municipios tan importantes como Basauri, Galdakao o Erandio y el valle del Txorierri enviarán a lo largo de este año sus aguas fecales hasta la depuradora de Galindo. «No sólo hay que tener en cuenta que los aportes aumentarán en poco tiempo, sino que la creación del emisario también mejoraría la calidad del agua en las playas de Las Arenas, Ereaga y Arrigunaga», aclara Fernández.

Aunque el director técnico del organismo mancomunado admite que la idea «está muy trabajada», todavían faltan algunos estudios especificos antes de que puedan entregar a la dirección del Consorcio un informe completo sobre el proyecto. El pasado lunes, por ejemplo, terminó el plazo del concurso convocado para adjudicar la ejecución de investigaciones oceanográficas en el entorno de las dos desembocaduras propuestas para el emisario. «Además, nos quedan cuestiones como las características del fondo marino», recuerda el director técnico.

Una vez finalizadas estas investigaciones, los especialistas añadirán las conclusiones al documento definitivo, que podría ser analizado en tres meses por el comité directivo del Consorcio. La prueba de fuego, sin embargo, podría ser la búsqueda de financiación. Los especialistas confían en que el proyecto sea declarado de interés general y el Ministerio de Medio Ambiente asuma parte del presupuesto. «Todavía no hemos hecho una estimación ajustada, pero estamos hablando de miles de millones de las antiguas pesetas»