El Consejo de Gobierno de la Junta de Andalucía aprobó hoy un decreto para complementar las ayudas estatales para proyectos de modernización de zonas regables declaradas de interés general por el Plan Nacional de Regadíos (PNR), merced al cual las comunidades de regantes podrán obtener una financiación pública adicional de hasta el 15 por ciento del gasto total en sus inversiones acogidas al PNR.
El portavoz del Ejecutivo andaluz, Enrique Cervera, explicó en rueda de prensa que estas nuevas ayudas complementarias de la Junta se sumarán al apoyo económico a estas iniciativas que canaliza el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) a través de la Sociedad Estatal de Infraestructuras Agraria del Sur y Este (Seisa), con un tope de financiación situado actualmente en el 24 por ciento respecto a la inversión total subvencionable de las obras.
Según Cervera, la aportación de la Junta se modulará de acuerdo con el tamaño de las explotaciones, de forma que los regantes de tierras de menos de cinco hectáreas tendrán derecho a percibir la cuantía máxima del 15 por ciento, porcentaje que decrece a razón de un tres por ciento para las explotaciones de entre 5 y 15, 15 y 25 y 25 y 50 hectáreas.
PROYECTOS DE DESALACIÓN
Las ayudas aprobadas se destinarán tanto a modernización y consolidación de regadíos, incluyendo los proyectos de desalación, como a obras para reutilizar las aguas residuales depuradas y desalinizadas. En función de la disponibilidad presupuestaria, el decreto fija, entre otras prioridades, que al menos el 75 por ciento de los cultivos de la zona regable sean hortofrutícolas y que las explotaciones se ubiquen en zonas afectadas por altos índices de desempleo agrario y bajo nivel de rentas.
Actualmente hay en Andalucía cuatro comunidades de regantes y usuarios que han solicitado las ayudas estatales del PNR y que, por tanto, podrán también beneficiarse de la financiación complementaria de la Junta. Estas comunidades, que agrupan a 6.888 usuarios y 38.590 hectáreas, son las de la Comarca de Níjar (Almería); Pantano de Guadalcacín, en Jerez de la Frontera (Cádiz); Valle Inferior del Guadalquivir, en Sevilla, y Sierra Mágina-El Caz, en Torres (Jaén).
Junto a ello, Cervera recordó que, además de la financiación proveniente de la Administración central, los regantes andaluces cuentan con la línea de apoyo gestionada en exclusiva por la Junta, cuyas subvenciones alcanzan hasta un 60 por ciento del gasto total en obras de modernización, consolidación y transformación de regadíos.
LÍNEA DE APOYO DE LA JUNTAEstas ayudas, que se destinan preferentemente a proyectos de carácter social y que conllevan diversificación de cultivos, también valoran de forma especial la eficiencia en el uso de los recursos, la mejora de la calidad del agua, el ahorro energético y la reducción de las pérdidas en las redes de distribución.
Durante el periodo 2000-2003, las ayudas autonómicas al regadío han permitido desarrollar proyectos de modernización en 162.103 hectáreas, con una inversión total movilizada de 351,6 millones de euros. La aportación pública ha sido de 175,8 millones de euros, a los que se suman otros 94,2 correspondientes al primer trimestre de este año.
La agricultura de regadío representa en Andalucía el 22 por ciento de su superficie cultivada. Aporta del 57 por ciento de la producción final agraria regional y cerca del 60 por ciento del empleo en este sector. Las comunidades de regantes aglutinan en torno al 70 por ciento de la superficie total de las zonas regables andaluzas