El presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, inauguró hoy las nuevas instalaciones de regadíos de la pedanía de Agramón en Hellín (Albacete) donde, acompañado por la consejera de Agricultura, Mercedes Gómez, recordó que en la región se está regando con aguas subterráneas y "los castellano-manchegos demuestran que se puede hacer un uso racional e inteligente del agua, un recurso vital para el progreso de esta tierra".
Barreda, que agradeció a los 150 agricultores beneficiarios de esta nueva zona de regadíos el haber sido capaces de asociarse, dejando de lado los individualismos, y de poner en práctica el trabajo y la tenacidad demostrada para conseguir su sueño, añadió que, "la política hidráulica es siempre fuente de riqueza, esta tierra es seca y vosotros en Agramón habéis sido pioneros en este esfuerzo".
"Si algo estamos demostrando los castellano-manchegos es que somos capaces de hacer los que nos proponemos", subrayó para reiterar que sin el asociacionismo que se ha puesto en práctica en Agramón no hubiese sido posible esta actuación de regadío, informa la Junta.
Asimismo, comentó que el agua es imprescindible para la agricultura y el progreso de la sociedad, por eso, indicó, "en Castilla-La Mancha sabemos el valor del agua, que es un bien escaso, pero necesario y por ello en esta región defendemos y protegemos este recurso que para nosotros es vital". En este sentido, aseveró que no podemos defender sistemáticamente planes que beneficien a otros y a nosotros nos perjudiquen.
Del mismo modo, destacó el esfuerzo de los técnicos de la Consejería de Agricultura al haber tomado este proyecto como algo propio, por lo que agradeció el esfuerzo y la profesionalidad puestos de manifiesto en esta actuación, y felicitó a la comunidad de regantes de Agramón "porque ha demostrado que no tienen metas inalcanzables".
Barreda advirtió que los pueblos viven en un presente continuo y la realidad es la que se vive diariamente sin paréntesis. "Por eso, --añadió-- en Hellín debemos tener una ambición y una perspectiva de futuro lejana para dejar a nuestros hijos una sociedad mejor". En esa dirección, explicó, trabaja el Ejecutivo de Castilla-La Mancha.
El presidente regional puso como ejemplo el trabajo realizado por la Comunidad de Regantes de Agramón porque, a su juicio, es la prueba del nueve de que esta región ha mejorado mucho en el mantenimiento y mejora de sus cultivos, así como en la recuperación y explotación del agua. "Tenemos una tierra muy hermosa y debemos ponerla en valor y defenderla", incidió.
Con ese fin, aseguró, trabaja la Administración regional, aunque añadió que esta labor no conduciría a nada si no fuera por la colaboración de toda la sociedad de Castilla-La Mancha. Por ello recordó que, el Ejecutivo regional es "amigo y aliado" de los hombres y mujeres que con iniciativas ponen en marcha proyectos de desarrollo para la región. "La que hoy inauguramos es una actuación de gran interés social y para la que tendréis la ayuda incondicional del Gobierno regional", concluyó.
OPOSICIÓN AL TALAVE-CENAJO
En otro orden de cosas y en alusión a las obras del túnel Talave-Cenajo, Barreda aseveró que el Gobierno de Castilla-La Mancha se opone con firmeza a esta infraestructura, "porque perjudica los intereses de esta región". Así indicó que cuenta con el compromiso de la ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, de no llevar a cabo, en ningún caso, esta obra proyectada por el anterior Gobierno.
Del mismo modo, el presidente mostró su sorpresa ante las declaraciones del presidente de la Confederación Hidrográfica del Segura, José Salvador Fuentes Zorita, que manifestó que el trasvase Tajo-Segura es intocable, afirmando que "ese señor debería ser más prudente porque ha sido nombrado por una ministra que no es partidaria de los trasvases".
En este mismo sentido dijo que, "no podemos seguir consintiendo que los únicos beneficiarios de una obra faraónica como el trasvase Tajo-Segura sean lugares ajenos a Castilla-La Mancha". Indicó que desde el Levante creyeron que esa agua iba a ser sólo para ellos, aunque "también tiene que ser para los castellano-manchegos", apuntó.
Finalmente, aclaró que hay que ser solidario con el resto de regiones y siempre que el agua sea para consumo humano se cederá, pero "no podemos seguir permitiendo en silencio trasvases sistemáticos para usos y fines distintos