La agricultura consume el 93% del agua captada en la cuenca del Duero
Lun, 30/08/2004
El curso de "Sensibilización, planificación y gestión del agua en el entorno rural", dirigido a agentes sociales del ámbito rural zamorano, tuvo lugar en fechas pasadas en la sede de Cogala de la localidad toresana, tras su paso por Puebla de Sanabria, Fermoselle, Benavente, Villafáfila y Alcañices.
El objetivo principal del curso fue proporcionar formación e información sobre las nuevas tendencias en la gestión del agua y en la difusión de iniciativas relacionadas con el consumo de ésta en el marco de la Educación Ambiental. Se trataron los temas del ciclo del agua y su cuenca hidrográfica; los usos y aprovechamiento de la misma en el entorno rural, agrícola, al servicio del hogar, de la industria, el turismo y el ocio y de nuestra salud; los posibles problemas derivados de una mala gestión y de contaminación; la depuración y reutilización de las aguas residuales urbanas, principalmente. Pero sobre todo se enfatizó la idea de que la circulación continua del agua implica que cualquier alteración puntual de la misma supone una repercusión a nivel general del ciclo; así, resulta obvia la necesidad de desarrollar una gestión integrada de los recursos hídricos de la cuenca a fin de evitar desequilibrios en los usos o en la calidad del agua que discurre por ella. El caso de la cuenca del Duero es especial dada la doble nacionalidad del río; por ello se ha de favorecer la gestión conjunta de ésta, evitando las fronteras administrativas.
Se destacó que la agricultura sigue siendo el principal consumidor del agua captada en la cuenca del Duero (93% de la demanda total) Es en el uso agrícola donde se dan los problemas de contaminación de las reservas de aguas debido al progresivo aumento del uso de fertilizantes y pesticidas, y la baja eficiencia en el uso (derroche de agua) También en ganadería se da de la misma forma una ineficacia de aprovechamiento generada por las malas condiciones de la red de abastecimiento de la que se realiza la captación y de la propia instalación, el método inadecuado de abrevar al ganado y el excesivo gasto en limpieza y otras labores.
En cuanto a la demanda actual de agua de la población de la cuenca del Duero, ésta se estima en 214 hm3/año (6% del total), y la dotación bruta es de aproximadamente 268 litros/habitante/día, encontrándose por debajo de la media nacional (300 litros/habitante/día), aunque las previsiones del Plan Hidrológico de nuestra cuenca prevén un incremento considerable de las dotaciones para el año 2015, pese a la tendencia de descenso de la población. En este ámbito, también se dan los problemas de contaminación de las aguas superficiales o subterráneas en los puntos de captación, el mal estado de la red de suministro o el derroche de la misma, siendo curiosa la actitud del usuario que no tiene clara percepción del precio que paga por el agua, precio que se mantiene artificialmente bajo, en comparación con otros países (87 pts/m3 en Zamora, frente a las 235 pts de Alemania)
En la cuenca hidrográfica del Duero, por último, la demanda de agua por parte del sector industrial supone tan sólo el 1,3% de la demanda total.
El objetivo principal del curso fue proporcionar formación e información sobre las nuevas tendencias en la gestión del agua y en la difusión de iniciativas relacionadas con el consumo de ésta en el marco de la Educación Ambiental. Se trataron los temas del ciclo del agua y su cuenca hidrográfica; los usos y aprovechamiento de la misma en el entorno rural, agrícola, al servicio del hogar, de la industria, el turismo y el ocio y de nuestra salud; los posibles problemas derivados de una mala gestión y de contaminación; la depuración y reutilización de las aguas residuales urbanas, principalmente. Pero sobre todo se enfatizó la idea de que la circulación continua del agua implica que cualquier alteración puntual de la misma supone una repercusión a nivel general del ciclo; así, resulta obvia la necesidad de desarrollar una gestión integrada de los recursos hídricos de la cuenca a fin de evitar desequilibrios en los usos o en la calidad del agua que discurre por ella. El caso de la cuenca del Duero es especial dada la doble nacionalidad del río; por ello se ha de favorecer la gestión conjunta de ésta, evitando las fronteras administrativas.
Se destacó que la agricultura sigue siendo el principal consumidor del agua captada en la cuenca del Duero (93% de la demanda total) Es en el uso agrícola donde se dan los problemas de contaminación de las reservas de aguas debido al progresivo aumento del uso de fertilizantes y pesticidas, y la baja eficiencia en el uso (derroche de agua) También en ganadería se da de la misma forma una ineficacia de aprovechamiento generada por las malas condiciones de la red de abastecimiento de la que se realiza la captación y de la propia instalación, el método inadecuado de abrevar al ganado y el excesivo gasto en limpieza y otras labores.
En cuanto a la demanda actual de agua de la población de la cuenca del Duero, ésta se estima en 214 hm3/año (6% del total), y la dotación bruta es de aproximadamente 268 litros/habitante/día, encontrándose por debajo de la media nacional (300 litros/habitante/día), aunque las previsiones del Plan Hidrológico de nuestra cuenca prevén un incremento considerable de las dotaciones para el año 2015, pese a la tendencia de descenso de la población. En este ámbito, también se dan los problemas de contaminación de las aguas superficiales o subterráneas en los puntos de captación, el mal estado de la red de suministro o el derroche de la misma, siendo curiosa la actitud del usuario que no tiene clara percepción del precio que paga por el agua, precio que se mantiene artificialmente bajo, en comparación con otros países (87 pts/m3 en Zamora, frente a las 235 pts de Alemania)
En la cuenca hidrográfica del Duero, por último, la demanda de agua por parte del sector industrial supone tan sólo el 1,3% de la demanda total.