El plan contra avenidas se cae de la alternativa al trasvase del Ebro
Vie, 03/09/2004
Varias obras anunciadas por el Gobierno socialista al derogar el proyecto han desaparecido del programa AGUA, que ayer presentó la ministra de Medio Ambiente
Cristina Narbona quiere tomar la iniciativa en torno a la estrategia sobre el agua al comienzo del nuevo curso político y presentó ayer a los medios de comunicación el denominado Programa A.G.U.A. (Actuaciones para la Gestión y Utilización del Agua), una iniciativa que, en realidad, es una reiteración del conjunto de medidas adoptadas por el Gobierno socialista como alternativa al trasvase del Ebro, derogado el pasado mes de junio. Sin embargo, algunos de los proyectos incluidos inicialmente en el plan de actuaciones urgentes no aparecen en el documento presentado ayer.
Entre las obras que se han caído del Programa de Actuaciones para la Gestión y la Utilización del Agua figura la terminación del plan de defensa contra avenidas, dotado con 80 millones de euros en el tramo del Segura que atraviesa la Región y con otros 60 en la provincia de Alicante, lo que suma en total 140 millones de euros. Tampoco aparece el proyecto denominado "recirculación de caudales en el tramo urbano de Murcia", que permitiría embalsar las aguas depuradas del Segura en el cauce del río a su paso por la capital, con un presupuesto de 5 millones de euros, ni la conexión Talave-Cenajo. Sin embargo, el programa AGUA mantiene el recrecimiento del canal del Trasvase del Tajo en la Margen Derecha, una obra ya iniciada que fue inaugurada por el anterior presidente del Gobierno, José María Aznar, en febrero de este año.
La ministra no supo cifrar la cuantía de inversión que figurará en los presupuestos generales del Estado para el próximo año -el proyecto debe presentarse al Parlamento antes del día 30- para ejecutar los proyectos fijados. "No vamos a hacer catedrales en el desierto ni vamos a dedicarnos a poner primeras piedras, ni segundas, ni sucesivas. Cuando esté definida una actuación la presentaremos y la explicaremos", afirmó. Narbona defendió la apuesta por las desaladoras "porque puede aportar más calidad y a un precio más barato". También abogó por abandonar las tensiones sociales entre comunidades y defendió "solucionar los problemas dentro de cada cuenca hidrográfica".
Ante la tramitación parlamentaria del proyecto de ley que debe sustituir al real decreto-ley que derogó el trasvase del Ebro, Narbona invitó a los presidentes de Murcia y de Valenciana, Ramón Luis Valcárcel y Francisco Camps, a que se sumen a los presidentes de Andalucía y Cataluña en su compromiso de realizar aportaciones al proyecto de ley. "Personalmente ya he formulado esa petición y espero que respondan de forma positiva", dijo ayer Narbona.
Cristina Narbona quiere tomar la iniciativa en torno a la estrategia sobre el agua al comienzo del nuevo curso político y presentó ayer a los medios de comunicación el denominado Programa A.G.U.A. (Actuaciones para la Gestión y Utilización del Agua), una iniciativa que, en realidad, es una reiteración del conjunto de medidas adoptadas por el Gobierno socialista como alternativa al trasvase del Ebro, derogado el pasado mes de junio. Sin embargo, algunos de los proyectos incluidos inicialmente en el plan de actuaciones urgentes no aparecen en el documento presentado ayer.
Entre las obras que se han caído del Programa de Actuaciones para la Gestión y la Utilización del Agua figura la terminación del plan de defensa contra avenidas, dotado con 80 millones de euros en el tramo del Segura que atraviesa la Región y con otros 60 en la provincia de Alicante, lo que suma en total 140 millones de euros. Tampoco aparece el proyecto denominado "recirculación de caudales en el tramo urbano de Murcia", que permitiría embalsar las aguas depuradas del Segura en el cauce del río a su paso por la capital, con un presupuesto de 5 millones de euros, ni la conexión Talave-Cenajo. Sin embargo, el programa AGUA mantiene el recrecimiento del canal del Trasvase del Tajo en la Margen Derecha, una obra ya iniciada que fue inaugurada por el anterior presidente del Gobierno, José María Aznar, en febrero de este año.
La ministra no supo cifrar la cuantía de inversión que figurará en los presupuestos generales del Estado para el próximo año -el proyecto debe presentarse al Parlamento antes del día 30- para ejecutar los proyectos fijados. "No vamos a hacer catedrales en el desierto ni vamos a dedicarnos a poner primeras piedras, ni segundas, ni sucesivas. Cuando esté definida una actuación la presentaremos y la explicaremos", afirmó. Narbona defendió la apuesta por las desaladoras "porque puede aportar más calidad y a un precio más barato". También abogó por abandonar las tensiones sociales entre comunidades y defendió "solucionar los problemas dentro de cada cuenca hidrográfica".
Ante la tramitación parlamentaria del proyecto de ley que debe sustituir al real decreto-ley que derogó el trasvase del Ebro, Narbona invitó a los presidentes de Murcia y de Valenciana, Ramón Luis Valcárcel y Francisco Camps, a que se sumen a los presidentes de Andalucía y Cataluña en su compromiso de realizar aportaciones al proyecto de ley. "Personalmente ya he formulado esa petición y espero que respondan de forma positiva", dijo ayer Narbona.