Se ha construido una red de colectores tras la devastadora riada de 1996 La estampa de las calles valleras anegadas por el agua pertenece al pasado. Las redes centrífugas de colectores y los muros de defensa hacen que Tavernes de la Valldigna sea prácticamente inmune a las riadas por fuertes lluvias. La canalización del río Vaca se frenó pero el proyecto ha sido relanzado por el nuevo gobierno central. CARLES GIMENO/TAVERNES
Con la llegada de la estación otoñal se acentúan las posibilidades de fuertes precipitaciones y gotas frías. Este es un problema que para Tavernes de la Valldigna ya está prácticamente solucionado.

El edil de Agricultura, Pepe Langa, aseguró que actualmente “nuestro término municipal no tendría problemas para asimilar lluvias de hasta 200 litros por metro cuadrado”. Esta cantidad todavía se incrementa más en el casco urbano vallero donde las lluvias de mayor pluviometría serían asimiladas sin problemas por la red de colectores que se ha construido en los últimos años.

Esta concienciación para evitar riadas en la Vall se ha producido por las numerosas ocasiones en las que en un pasado el agua ha inundado buena parte de Tavernes. La riada más desastrosa tuvo lugar en el año 1996.

El casco urbano vallero está protegido por el muro de defensa que recoge el agua que baja de la montaña de Les Creus y por la red de colectores dispuestos como varias anillas por todo el municipio.

En el término municipal de Tavernes de la Valldigna la existencia de acequias y los canales de defensa ayudan a evitar riadas y a controlar el nivel freático de la población. El único punto que se escapaba a este control era el río Vaca. La canalización de este río estaba prevista en el Plan Hidrológico Nacional, pero con la paralización de este también quedó en el aire su ejecución. El nuevo gobierno ahora pretende relanzar el proyecto.

Inversión para el río VacaEl presidente de la Confederación Hidrográfica del Júcar, Juan José Moragues, anunció el pasado mes de julio que el Ministerio de Medio Ambiente invertirá 50 millones de euros “en los próximos dos o tres años” en las obras de defensa contra avenidas de los ríos Gallinera y Vaca, así como en el cauce medio del Serpis.

Las tres obras valoradas en 19, 20 y 16 millones de euros han sido incluidas por el Gobierno en el decreto de sustitución del trasvase del Ebro y tienen una consignación presupuestaria en los 1.200 millones de euros que prevé destinar para las obras alternativas al Plan Hidrológico Nacional.

Moragues explicó que las obras que tienen que ver con cauces de dominio público “tienen siempre un proceso de tramitación muy lento porque necesitan declaraciones de impacto ambiental, autorizaciones del Ministerio en Madrid, y muchas de ellas, incluso de la Unión Europea”.

Las actuaciones se centran, al igual que el resto de las iniciativas, en la recuperación de barrancos, restauración de riberas, canalización y regularización de los fondos.

“El Ministerio de Medio Ambiente ha aprovechado el decreto de modificación del Plan Hidrológico Nacional para incluir algunas medidas urgentes y mejoras”, dijo hace varios meses Juan José Moragues.

Entre las propuestas también se incluyen la mejora del entorno de la zona húmeda de la Safor y restauraciones medioambientales integradas en el programa europeo Feder.

Limpieza del río VacaDesde el Consistorio Municipal vallero se limpia cada temporada el lecho de este río y se reparan constantemente los márgenes por los que se podrían producir desbordamientos.

Y es que el Vaca, pese a ser un río de corto recorrido, tiene una gran cuenca pluvial, dado que además del agua de la Valldigna, también desaloja zonas como Carcaixent o Alzira, por lo que en épocas de fuertes lluvias incrementa su caudal y la bravura de sus aguas que proceden de zonas de montañas.

Todo esto da cierta tranquilidad a los habitantes de Tavernes de la Valldigna que padecieron la última inundación en el año 96 en plenas fiestas patronales.

Desde el gobierno se mantiene que el peligro por inundación en el casco urbano es plenamente nulo y sólo se produciría en caso de lluvias extremadamente fuertes.

De hecho, la red de colectores ya ha dado resultados puesto que en los últimos temporales que han azotado la Valldigna, no se han apreciado estancamientos de agua en la parte baja de Tavernes.

InundacionesEn el Paseo Colón, la zona donde se producían mayores inundaciones, los colectores desalojaron el agua hasta el punto que no se produjeron ni charcos.

El municipio deTavernes de la Valldigna dispone de una red de colectores pluviales en la zona centro de la plaza Mayor y el Passeig del País Valencià.

También hay que destacar la presencia de otros anillos por la zona de Mitja Galta y carrer Barranc a los que se suman otra red concéntrica de colectores que transcurre por tres áreas relevantes: Marjaletes, el Passeig Colón y la zona del Portalet.

La zona menos preparada de la población es la playa. El casco urbano de la costa se inunda con mucha facilidad. El área de la Marina presenta estancamientos de agua que en muchos casos llegan a inundar los bajos y los comercios.

A nivel del marEsto se debe a que la playa vallera está a la altura del nivel del mar y cuando hay temporal, los depósitos no desalojan el agua por estar el mar más bravo y situarse por encima del nivel de los colectores.

Recientemente, el Consistorio Municipal de esta población ha solicitado la canalización del barranco del Massalari, que aseguraría desalojar las aguas que llegasen por el norte.

Tavernes, al igual que el resto de poblaciones de la Safor afectadas, exigen rapidez en la tramitación para evitar nuevas inundaciones tanto en viviendas como en campos