REDACCIÓN/VALENCIALa Federación Nacional de Comunidades de Regantes considera “superficiales” y “poco convincentes” los informes técnicos y medioambientales en los que se basa la ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, para derogar el trasvase del Ebro.

A su juicio, estos documentos no justifican la viabilidad de las acciones propuestas por el Gobierno en su programa de actuaciones para la gestión y utilización del agua. Los regantes manifiestan “cierta disconformidad” con los cálculos realizados para determinar el consumo de energía derivado de la desalinización de agua del mar.

La organización nacional de los regantes teme otra posible paralización y demora en la ejecución de las restantes obras contempladas en el Plan Hidrológico como consecuencia de la “incertidumbre” que han generado las soluciones alternativas propuestas por el Ejecutivo.

Según el presidente de los regantes, Andrés del Campo, carece de sentido el esfuerzo económico que están haciendo los regantes para la modernización de sus regadíos, si los regantes ‘‘no tienen el agua garantizada por no haberse ejecutado las actuaciones previstas en el Plan Hidrológico’’.