MURCIA .- El presidente de Castilla-La Mancha pide que se reformen las Confederaciones Hidrográficas y el Estatuto de Autonomía
Mié, 20/10/2004
El presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, pidió que las reformas que se están planteando en la Constitución y los estatutos de Autonomía se materialicen en el caso de Castilla-La Mancha de manera que contemplen las reformas jurídicas precisas para que la región tenga más apoyo en relación a los actuales órganos gestores del agua y exigió una modificación "de arriba a abajo" de las Confederaciones Hidrográficas para que las comunidades autónomas dejen de estar subordinadas a estos órganos.
En su discurso sobre el Estado de la Región, Barreda indicó que no era comprensible que una región que tiene competencias exclusivas en numerosas materias como agricultura, medio ambiente, vivienda, y otras para cuyo desarrollo la gestión del agua es muy importante, esté supeditada a decisiones en materia hidraúlica que se toman de manera centralizada.
Así, éxigió que las comunidades autónomas "tengan un protagonismo decisivo y determinante" en las decisiones que adoptan las confederaciones hidrográficas y pidió también la incorporación de Castilla-La Mancha en la comisión gestora del trasvase Tajo-Segura.
"Castilla-La Mancha no está representada en la Comisión de Trasvases,
--dijo--, y pediremos que las comunidades autónomas afectadas tengan un papel determinante en ella".
Para José María Barreda "es inaceptable que Castilla-La Mancha no pueda decir nada sobre el agua que discurre por su territorio", y pidió a todos los partidos políticos de la región, --con y sin representación parlamentaria--, que hagan un esfuerzo de unidad en la defensa de los intereses de la región. "Igual que hay asuntos 'de nación', este se un asunto 'de región'", afirmó.
El jefe del Ejecutivo castellano-manchego aseguró que en Castilla-La Mancha "necesitamos el agua" y dijo que no se trata de una reivindicación caprichosa, sino una necesidad imperiosa de garantizar el agua a una población que está experimentando un crecimiento importante, como en algunas zonas de La Sagra, en Toledo o en el Corredor del Henares, en Guadalajara, donde es necesario garantizar el abastecimiento ante un crecimiento demográfico "espectacular".
En este sentido, señaló que Castilla-La Mancha heredó del centralismo un sistema hidraúlico "demasiado vulnerable, desconectado entre sí y con poco caudal" no garantizaba que al abrir los grifos saliera agua, como han venido comprobando muchos municipios de la región.
C-LM DECIDE POR SI MISMA
En otro momento de su discurso, que se prolongó por espacio de casi dos horas, Barreda recordó que en los años sesenta y setenta casi un millón de castellano-manchegos tuvo que salir de la región y señaló también que desde la creación del Trasvase Tajo-Segura, en 1971, "más de 8.000 metros cúbicos de agua han salido de Castilla-La Mancha", datos que utilizó para afirmar que "Castilla-La Mancha se estaba convirtiendo literalmente en un desierto", un espacio que se define como una zona en la que no hay hombres ni agua, hasta que en los años ochenta se recuperó la autonomía.
Para el presidente resulta sorprendente y propio de una "mentalidad pobre" que aún hoy haya castellano-manchegos con responsabilidades políticas capaces de decir que "les da igual dónde vaya agua si a Castilla-La Mancha o a otra región, cuando sale de su comarca", --en referencia a las recientes declaraciones de un senador del PP por Guadalajara.
Barreda aseguró que "una comunidad autónoma fuerte será capaz de defender cada pueblo de la región" y recordó que "antes todo se decidía en Madrid", desde las comunicaciones, --diseñadas de forma radial con origen en la Puerta del Sol-- a las decisiones políticas,
--desde el Ministerio de la Gobernación también en la Puerta del Sol--, mientras que todo lo que había alrededor de Madrid era zona de paso para ir a otros sitios, como ocurría con Castilla-La Mancha.
La situación ha cambiado, y "en Castilla-La Mancha está ocurriendo una transformación histórica", dijo, una transformación que también se está notando en las infraestructuras de la región, las cuales el Ministerio de Fomento "no sólo respeta", sino que aumenta y complementa, como se podrá comprobar en el Plan de Infraestructuras del Ministerio, anunció Barreda, quien señaló que añadirá otras infraestructuras "interesantes".
Así aludió a las autovías o las líneas de alta velocidad en las que se está trabajando y señaló que ese desarrollo de infraestructuras debe hacerse extensivo a las infraestructuras de comunicación y autopistas de la información, que permitirán a la región incorporarse a las nuevas tecnologías, de manera que pueda "dar saltos hacia adelante" alguien que la defienda y apueste por ella
En su discurso sobre el Estado de la Región, Barreda indicó que no era comprensible que una región que tiene competencias exclusivas en numerosas materias como agricultura, medio ambiente, vivienda, y otras para cuyo desarrollo la gestión del agua es muy importante, esté supeditada a decisiones en materia hidraúlica que se toman de manera centralizada.
Así, éxigió que las comunidades autónomas "tengan un protagonismo decisivo y determinante" en las decisiones que adoptan las confederaciones hidrográficas y pidió también la incorporación de Castilla-La Mancha en la comisión gestora del trasvase Tajo-Segura.
"Castilla-La Mancha no está representada en la Comisión de Trasvases,
--dijo--, y pediremos que las comunidades autónomas afectadas tengan un papel determinante en ella".
Para José María Barreda "es inaceptable que Castilla-La Mancha no pueda decir nada sobre el agua que discurre por su territorio", y pidió a todos los partidos políticos de la región, --con y sin representación parlamentaria--, que hagan un esfuerzo de unidad en la defensa de los intereses de la región. "Igual que hay asuntos 'de nación', este se un asunto 'de región'", afirmó.
El jefe del Ejecutivo castellano-manchego aseguró que en Castilla-La Mancha "necesitamos el agua" y dijo que no se trata de una reivindicación caprichosa, sino una necesidad imperiosa de garantizar el agua a una población que está experimentando un crecimiento importante, como en algunas zonas de La Sagra, en Toledo o en el Corredor del Henares, en Guadalajara, donde es necesario garantizar el abastecimiento ante un crecimiento demográfico "espectacular".
En este sentido, señaló que Castilla-La Mancha heredó del centralismo un sistema hidraúlico "demasiado vulnerable, desconectado entre sí y con poco caudal" no garantizaba que al abrir los grifos saliera agua, como han venido comprobando muchos municipios de la región.
C-LM DECIDE POR SI MISMA
En otro momento de su discurso, que se prolongó por espacio de casi dos horas, Barreda recordó que en los años sesenta y setenta casi un millón de castellano-manchegos tuvo que salir de la región y señaló también que desde la creación del Trasvase Tajo-Segura, en 1971, "más de 8.000 metros cúbicos de agua han salido de Castilla-La Mancha", datos que utilizó para afirmar que "Castilla-La Mancha se estaba convirtiendo literalmente en un desierto", un espacio que se define como una zona en la que no hay hombres ni agua, hasta que en los años ochenta se recuperó la autonomía.
Para el presidente resulta sorprendente y propio de una "mentalidad pobre" que aún hoy haya castellano-manchegos con responsabilidades políticas capaces de decir que "les da igual dónde vaya agua si a Castilla-La Mancha o a otra región, cuando sale de su comarca", --en referencia a las recientes declaraciones de un senador del PP por Guadalajara.
Barreda aseguró que "una comunidad autónoma fuerte será capaz de defender cada pueblo de la región" y recordó que "antes todo se decidía en Madrid", desde las comunicaciones, --diseñadas de forma radial con origen en la Puerta del Sol-- a las decisiones políticas,
--desde el Ministerio de la Gobernación también en la Puerta del Sol--, mientras que todo lo que había alrededor de Madrid era zona de paso para ir a otros sitios, como ocurría con Castilla-La Mancha.
La situación ha cambiado, y "en Castilla-La Mancha está ocurriendo una transformación histórica", dijo, una transformación que también se está notando en las infraestructuras de la región, las cuales el Ministerio de Fomento "no sólo respeta", sino que aumenta y complementa, como se podrá comprobar en el Plan de Infraestructuras del Ministerio, anunció Barreda, quien señaló que añadirá otras infraestructuras "interesantes".
Así aludió a las autovías o las líneas de alta velocidad en las que se está trabajando y señaló que ese desarrollo de infraestructuras debe hacerse extensivo a las infraestructuras de comunicación y autopistas de la información, que permitirán a la región incorporarse a las nuevas tecnologías, de manera que pueda "dar saltos hacia adelante" alguien que la defienda y apueste por ella