CASTILLA Y LEON .- Medio Ambiente destinará este año más de 150 millones de euros a actuaciones en la cuenca del Duero

Vie, 11/03/2005

Europa Press

Más de ciento cincuenta millones de euros invertirá este año en la cuenca del Duero el Ministerio de Medio Ambiente, a través de la Confederación Hidrográfica y de la Sociedad Estatal Aguas del Duero.
Según los datos del Ministerio recogidos por Europa Press, esta cantidad supone un fuerte incremento en el esfuerzo inversor del Gobierno central, que ha aumentado en 51 millones la cantidad global dedicada en el pasado ejercicio por la Administración anterior.
Conservación y mantenimiento de cauces, construcción de la presa de Castrovido y defensa contra las inundaciones, son algunos de los trabajos que se tiene previsto acometer durante 2005, cuidando muy especialmente los aspectos medioambientales para ajustar todas las actuaciones al programa A.G.U.A, que pretende impulsar “una nueva política del agua conforme a los criterios y normas de la Unión Europea”.
Entre las inversiones de mayor cuantía previstas para este ejercicio, destacan en la provincia de Ávila 4.798.000 euros destinados al azud de derivación y conducción principal de la zona regable del Adaja y en Burgos, más de 30 millones para la presa de Castrovido, el parque lineal del río Vena, acondicionamiento de varios ríos en Aranda o el abastecimiento mancomunado del Bajo Arlanza y Vecindad de Burgos.
Asimismo, la inversión más fuerte es para León, que tiene asignado un presupuesto superior a los 45 millones de euros. De ellos, 41 millones irán destinados a los ramales principales del Canal Alto de los Payuelos, y 2.150.000 a la presa de Casares. En Palencia se invertirán más de 4 millones de euros para modernizar canales de regadío y acondicionar las riberas del Carrión a su paso por la capital.
La inversión prevista para Salamanca es de más de 7 millones, destinados a sustituir elementos de seguridad en el azud de Villagonzalo, modernizar órganos de desagüe de la presa del Águeda o acondicionar el río Águeda a su paso por Ciudad Rodrigo y en la provincia de Segovia se invertirán 8 millones de euros, de ellos 3.730.000 en mejorar el entorno de los ríos Eresma y Ciguiñuela, 3.600.000 para el abastecimiento comarcal de la Comunidad de Villa y Tierra y otras cantidades entre las que destaca el medio millón para construir un depósito de agua contra incendios del Palacio de Riofrío.
Para Soria se han presupuestado más de 5 millones de euros, de los cuales 3.651.000 se destinan a diversas actuaciones en el entorno del río Duero a su paso por la capital, así como 1.200.000 para el abastecimiento comarcal de Araviana-Rituerto y otras cantidades para adecuar las márgenes del Duero en Almazán y en la provincia de Valladolid, el Ministerio de Medio Ambiente invertirá más de cinco millones de euros en el abastecimiento comarcal de Villalón de Campos y en el de las poblaciones del Valle del Esgueva.
En Zamora, donde se invertirán unos 6 millones de euros, el grueso de las intervenciones programadas para este año será de cuatro millones para el abastecimiento a Benavente y 1.261.000 más para diversas actuaciones en el tramo urbano del Tera en Puebla de Sanabria.
Una de las actuaciones que mayor interés despiertan son las de conservación y mejora de cauces, de las que se han recibido hasta el momento más de 600 peticiones de ayuntamientos de la cuenca. De manera provincializada, las solicitudes recibidas en la CHD proceden de Palencia, 124 solicitudes; de Ávila, 37; de Burgos, 104; de León, 109; de Salamanca, 52; de Segovia, 24; de Soria, 41; de Valladolid, 67 y de Zamora, 61 actuaciones.
La Confederación ha destinado a estas operaciones 5.500.000 euros, y antes de iniciar las mismas ajustará, con criterios eminentemente medioambientales y novedosos, las tres vías de actuación en las que basará sus criterios a la hora de seleccionar una u otra obra.
Hasta el momento, la Confederación ya ha elaborado informes sobre 215 obras pedidas, y continúa definiendo nuevas actuaciones que, incluso estando fuera del río, proporcionan unos valores especialmente destacables para las aves, tal y como sucede con la recuperación de zonas húmedas.