La Consejería de Infraestructuras y Transporte y la sociedad estatal Acuamed, encargada del Programa AGUA, cerrarán un protocolo de actuación por el que se ejecutarán un total de 40 obras previstas en el programa estatal, la mayor parte de las cuales estarán licitadas a finales de 2006, informa Efe.
El consejero José Ramón García Antón se reunió ayer con el director general de Acuamed, Adrián Baltanás, en la Comisión de Seguimiento del Programa AGUA para para analizar las actuaciones que la sociedad estatal acometerá en la autonomía. Si bien Baltanás dijo que el objetivo de la Comisión era hallar un punto de encuentro entre ambas administraciones, los dos responsables dejaron patentes sus discrepancias respecto a las fórmula de proporcionar más agua a la autonomía.
Baltanás y García Antón sentaron las bases de un protocolo, que se firmará más adelante, y que servirá para coordinar las actuaciones de ambas administraciones y asegurar la información recíproca, la conformidad mutua y el apoyo en la tramitación de procedimientos administrativos. El calendario de obras de la consejería y Acuamed vendrá fijado en los anexos que incorporará el convenio, y en el mismo se reflejará la fecha prevista de licitación de las obras, una vez los proyectos se hayan redactado.
Del total de las 40 actuaciones previstas, las ejecutadas por Acuadmed serán licitadas entre 2005 y 2006, excepto alguna de gran envergadura como la presa de Villamarxant, que se licitaría en 2007. Baltanás recordó que, según lo pactado, la ejecución de las obras urgentes supondrá una inversión de 1.200 millones de euros, entre las cuencas del Júcar y del Segura, de los que este año se invertirán 140.
García Antón se mostró satisfecho de que haya 'un 80% de las actuaciones en que no sólo estamos totalmente de acuerdo, sino que queremos impulsar de forma rápida'. El titular autonómicó puntualizó que existen un par de desaladoras no previstas en el Plan Hidrológico Nacional (PHN) sobre las que han surgido discrepancias y que 'tenemos que estudiar'. Además recalcó que, a pesar de que 'queremos colaborar con el programa, no estamos de acuerdo con que este plan vaya a resolver la falta de agua'. Por ello, insistió en la vigencia del trasvase del Ebro, 'que es la solución definitiva y lo que se tiene que hacer', y anunció que el Consell aprobó ayer un plan de acción territorial en el que reserva una plataforma de 150 kilómetros cuadrados de suelo, coincidentes con la superficie del recorrido de la conducción del trasvase derogado, para que 'en el momento oportuno se puedan realizar estas obras'.
García Antón añadió que 'ya hace un año que ganó el PSOE y todavía no hemos puesto en marcha ninguna obra de este plan. Baltanás replicó que si los socialistas no han licitado ninguna obra es porque la administración anterior 'no redactó los proyectos correspondientes'. El consejero agregó que para los populares el trasvase del Ebro era la solución que había que abordar rápidamente, sin dejar las otras', mientras que el PSOE 'ha decidido suspenderlo por razones políticas fundamentalmente'