Crónica Pakistán .- Nestlé, acusada de usar acuíferos de Pakistán para un agua embotellada demasiado cara para este país
Jue, 28/04/2005
El grupo suizo Nestlé está utilizando los recursos hídricos de Pakistán para una marca de agua embotellada, 'Pure Life', que ni siquiera vende en este país ya que la población no puede pagarla, contribuyendo al agotamiento de los acuíferos sin que las comunidades realmente se beneficien de su presencia.
Así lo afirma el abogado especializado en Derechos Humanos Nils Rosemann, que trabaja en Islamabad, Ginebra y Berlín, en un informe avalado por Action Aid Pakistán y la Coalición Suiza de ONG de Desarrollo, en el que analiza la forma en que la empresa cumple los Diez Principios del Pacto Mundial y sus propias políticas de responsabilidad social corporativa.
En 1998, Nestlé eligió Pakistán como primer centro de producción de su agua 'Pure Life', un agua embotellada de precio más asequible destinada a los mercados locales. "Pero 'Pure Life' no es accesible para quienes necesitan agua potable, y de hecho ni siquiera se vende en Pakistán", apunta Rosemann.
Según los cálculos elaborados por este experto, si una familia paquistaní tuviera que cubrir sus necesidades diarias de agua con esta marca, debería gastar unos 38,6 dólares mensuales (unos 30 euros), un tercio de los ingresos de un hogar medio, o un 80% de un salario medio.
En consecuencia, "debido a la inexistencia de un mercado de agua embotellada en Pakistán, Nestlé la exporta a otros mercados emergentes", "presumiblemente Arabia Saudí, a los ejércitos destacados en Afganistán y posiblemente a Irak".
Mientras, recuerda el documento, en Pakistán un 75% de la población no dispone de agua apta para el consumo, tasa que se eleva al 90% en las zonas rurales. Se estima que cada año 200.000 niños mueren de diarrea en este país.
"En nombre de los beneficios, Nestlé contribuye a la reducción de los acuíferos subterráneos", denuncia Rosemann, apuntando que en la provincia de Punjab (norte), donde opera la compañía, la extracción de agua "no está regulada" legalmente.
"El negativo impacto de las políticas de Nestlé en Pakistán contradice sus propios compromisos con los Derechos Humanos y sus principios de uso sostenible de los recursos", y además "socava la credibilidad de su adhesión a Global Compact".
El letrado lamenta también que tanto Suiza (sede de Nestlé) como Francia (sede de Nestlé Waters) "se resistan" a considerar que estas políticas puedan constituir una violación de las directrices para multinacionales desarrolladas por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE).
NESTLE SE DEFIENDE
Por su parte, en una carta pública de tres páginas recogida por la web 'Business and Human Rights', la multinacional suiza asegura que el informe de Rosemann presenta "una imagen enormemente distorsionada" y "tendenciosa" de la situación.
Para empezar, recuerda que Nestlé Waters representa un 0,0009% del consumo mundial de agua, y que por lo tanto no puede considerarse que la empresa sea "un actor significativo" en el debate global sobre el acceso al agua potable, sobre todo cuando se compara su impacto con el de sectores como la agricultura (70% del consumo mundial), la industria (20%) o los usos domésticos (10%).
Nestlé asegura que su política de producción de agua embotellada parte del principio del uso sostenible de los recursos, ya que "sería mal negocio agotar una fuente en la que se han realizado inversiones significativas". En Pakistán, como en los demás países, "el consumo de agua está estrictamente controlado".
La empresa precisa que cuenta con sistemas de seguimiento de los niveles de los acuíferos y de la calidad de sus reservas, y que siempre realiza "explotaciones conservadoras". "De hecho, el pozo utilizado para 'Pure Life' está operando muy por debajo de su capacidad teórica", y a una profundidad mayor que los acuíferos explotados por la mayoría de los consumidores locales.
En este sentido, subraya que los pozos de Punjab son explotados también para la agricultura, y que "el volumen de agua utilizado por Nestlé es tan extremadamente reducido comparado con estos otros usos que el agua extraída para 'Pure Life' no puede afectar al nivel del agua".
En todo caso, en su informe, Nestlé recuerda que el agua embotellada 'Pure Life', si bien más barata que otras marcas, sigue situándose en el mercado de ingresos medios, y no pretende situarse "en el mercado de acceso básico" a agua potable de la población. "Se trata de una opción más, una alternativa a otras bebidas".
Así lo afirma el abogado especializado en Derechos Humanos Nils Rosemann, que trabaja en Islamabad, Ginebra y Berlín, en un informe avalado por Action Aid Pakistán y la Coalición Suiza de ONG de Desarrollo, en el que analiza la forma en que la empresa cumple los Diez Principios del Pacto Mundial y sus propias políticas de responsabilidad social corporativa.
En 1998, Nestlé eligió Pakistán como primer centro de producción de su agua 'Pure Life', un agua embotellada de precio más asequible destinada a los mercados locales. "Pero 'Pure Life' no es accesible para quienes necesitan agua potable, y de hecho ni siquiera se vende en Pakistán", apunta Rosemann.
Según los cálculos elaborados por este experto, si una familia paquistaní tuviera que cubrir sus necesidades diarias de agua con esta marca, debería gastar unos 38,6 dólares mensuales (unos 30 euros), un tercio de los ingresos de un hogar medio, o un 80% de un salario medio.
En consecuencia, "debido a la inexistencia de un mercado de agua embotellada en Pakistán, Nestlé la exporta a otros mercados emergentes", "presumiblemente Arabia Saudí, a los ejércitos destacados en Afganistán y posiblemente a Irak".
Mientras, recuerda el documento, en Pakistán un 75% de la población no dispone de agua apta para el consumo, tasa que se eleva al 90% en las zonas rurales. Se estima que cada año 200.000 niños mueren de diarrea en este país.
"En nombre de los beneficios, Nestlé contribuye a la reducción de los acuíferos subterráneos", denuncia Rosemann, apuntando que en la provincia de Punjab (norte), donde opera la compañía, la extracción de agua "no está regulada" legalmente.
"El negativo impacto de las políticas de Nestlé en Pakistán contradice sus propios compromisos con los Derechos Humanos y sus principios de uso sostenible de los recursos", y además "socava la credibilidad de su adhesión a Global Compact".
El letrado lamenta también que tanto Suiza (sede de Nestlé) como Francia (sede de Nestlé Waters) "se resistan" a considerar que estas políticas puedan constituir una violación de las directrices para multinacionales desarrolladas por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE).
NESTLE SE DEFIENDE
Por su parte, en una carta pública de tres páginas recogida por la web 'Business and Human Rights', la multinacional suiza asegura que el informe de Rosemann presenta "una imagen enormemente distorsionada" y "tendenciosa" de la situación.
Para empezar, recuerda que Nestlé Waters representa un 0,0009% del consumo mundial de agua, y que por lo tanto no puede considerarse que la empresa sea "un actor significativo" en el debate global sobre el acceso al agua potable, sobre todo cuando se compara su impacto con el de sectores como la agricultura (70% del consumo mundial), la industria (20%) o los usos domésticos (10%).
Nestlé asegura que su política de producción de agua embotellada parte del principio del uso sostenible de los recursos, ya que "sería mal negocio agotar una fuente en la que se han realizado inversiones significativas". En Pakistán, como en los demás países, "el consumo de agua está estrictamente controlado".
La empresa precisa que cuenta con sistemas de seguimiento de los niveles de los acuíferos y de la calidad de sus reservas, y que siempre realiza "explotaciones conservadoras". "De hecho, el pozo utilizado para 'Pure Life' está operando muy por debajo de su capacidad teórica", y a una profundidad mayor que los acuíferos explotados por la mayoría de los consumidores locales.
En este sentido, subraya que los pozos de Punjab son explotados también para la agricultura, y que "el volumen de agua utilizado por Nestlé es tan extremadamente reducido comparado con estos otros usos que el agua extraída para 'Pure Life' no puede afectar al nivel del agua".
En todo caso, en su informe, Nestlé recuerda que el agua embotellada 'Pure Life', si bien más barata que otras marcas, sigue situándose en el mercado de ingresos medios, y no pretende situarse "en el mercado de acceso básico" a agua potable de la población. "Se trata de una opción más, una alternativa a otras bebidas".