CHINA-ESPAÑA/AGRICULTURA Expertos españoles asesoran a China en uso agua para agricultura
Jue, 16/06/2005
Expertos españoles y chinos abrieron hoy en Pekín un seminario sobre uso eficiente del agua en agricultura, en el que España ofrece sus siglos de experiencia en la lucha contra la sequía para ayudar al desarrollo de un sector que en China da trabajo a 700 millones de personas.
En el seminario, organizado por la Agencia Española de Cooperación Internacional (AECI) y el Ministerio de Ciencia y Tecnología chino, expertos españoles explicarán a sus colegas chinos desde el funcionamiento de las comunidades de regantes (que en China no existen) al uso de plásticos en la agricultura almeriense.
El caso de Almería, que pese a ser la zona más árida de España es una de las principales zonas de producción hortofrutícola de Europa, puede ser especialmente interesante para China, que quiere conseguir algo parecido en su región noroccidental de Xinjiang (con grandes desiertos pero célebre en el país por su uva y su sandía).
En el seminario, expertos de la China seca del norte (provincias y regiones de Xinjiang, Ningxia, Shaanxi, Hebei y Gansu) exponen sus problemas "y España presenta su tecnología y ofrece soluciones", señaló a EFE el coordinador de la AECI en Pekín, José Lorenzo García-Baltasar.
Uno de los ponentes, Santos Frontela (del Centro Nacional de Riegos de España) destacó a EFE que las empresas españolas son "líderes mundiales y con cada vez más presencia en el extranjero", y pueden tener gran futuro en China "ya que pese a las diferencias de desarrollo o clima, el riego acaba siendo más o menos similar".
Tras el seminario de tres días, varios de los expertos, pertenecientes a la empresa española de capital público Tragsa, viajarán a Xinjiang y Gansu para analizar las necesidades de esas regiones, azotadas continuamente por sequías y en las que la agricultura está muy subdesarrollada.
China es, según señaló a EFE el subdirector de la sección internacional de Tragsa, Daniel Cazorla, un país que tiene "la mejor tecnología de regadíos, procedente de países punteros como España, Israel y EEUU", pero que no sabe muy bien cómo usarla, por lo que necesita urgentemente más asesoramiento, expertos e ingenieros.
El objetivo final de China no es sólo sacar de la pobreza a sus cientos de millones de campesinos, sino también convertirse a largo plazo en líder mundial de la exportación de productos agrícolas.
Aunque China es eminentemente importador en la actualidad (debido a la superpoblación y la escasez de campos de cultivo), el país aspira a irrumpir en el futuro en mercados con productos como la fruta (el mencionado caso de Xinjiang) y la carne de porcino.
Para ello, el país deberá adaptarse a las normas de seguridad alimentaria de la Organización Mundial del Comercio (por ejemplo, prohibiendo el uso de ciertos fertilizantes y pesticidas), que todavía no cumple.
El hándicap para el país es su inadecuada distribución del agua, ya que mientras el campo en el norte es seco y pobre, el sur sufre fuertes inundaciones que destruyen miles de hectáreas de campos de cultivo cada año, y donde el enorme agua caída en escasos días apenas puede ser utilizada.
El seminario iniciado hoy es la segunda muestra de cooperación chino-española en materia agrícola, después del proyecto piloto de ahorro de agua en las afueras de Pekín iniciado en enero de este año, dirigido por el experto Carlos Ramos (también coordinador del foro de esta semana).
En el último trimestre de este año, se celebrará una segunda edición del seminario, esta vez en España, en el que habrá proyectos más concretos de cooperación, destacaron los organizadores
En el seminario, organizado por la Agencia Española de Cooperación Internacional (AECI) y el Ministerio de Ciencia y Tecnología chino, expertos españoles explicarán a sus colegas chinos desde el funcionamiento de las comunidades de regantes (que en China no existen) al uso de plásticos en la agricultura almeriense.
El caso de Almería, que pese a ser la zona más árida de España es una de las principales zonas de producción hortofrutícola de Europa, puede ser especialmente interesante para China, que quiere conseguir algo parecido en su región noroccidental de Xinjiang (con grandes desiertos pero célebre en el país por su uva y su sandía).
En el seminario, expertos de la China seca del norte (provincias y regiones de Xinjiang, Ningxia, Shaanxi, Hebei y Gansu) exponen sus problemas "y España presenta su tecnología y ofrece soluciones", señaló a EFE el coordinador de la AECI en Pekín, José Lorenzo García-Baltasar.
Uno de los ponentes, Santos Frontela (del Centro Nacional de Riegos de España) destacó a EFE que las empresas españolas son "líderes mundiales y con cada vez más presencia en el extranjero", y pueden tener gran futuro en China "ya que pese a las diferencias de desarrollo o clima, el riego acaba siendo más o menos similar".
Tras el seminario de tres días, varios de los expertos, pertenecientes a la empresa española de capital público Tragsa, viajarán a Xinjiang y Gansu para analizar las necesidades de esas regiones, azotadas continuamente por sequías y en las que la agricultura está muy subdesarrollada.
China es, según señaló a EFE el subdirector de la sección internacional de Tragsa, Daniel Cazorla, un país que tiene "la mejor tecnología de regadíos, procedente de países punteros como España, Israel y EEUU", pero que no sabe muy bien cómo usarla, por lo que necesita urgentemente más asesoramiento, expertos e ingenieros.
El objetivo final de China no es sólo sacar de la pobreza a sus cientos de millones de campesinos, sino también convertirse a largo plazo en líder mundial de la exportación de productos agrícolas.
Aunque China es eminentemente importador en la actualidad (debido a la superpoblación y la escasez de campos de cultivo), el país aspira a irrumpir en el futuro en mercados con productos como la fruta (el mencionado caso de Xinjiang) y la carne de porcino.
Para ello, el país deberá adaptarse a las normas de seguridad alimentaria de la Organización Mundial del Comercio (por ejemplo, prohibiendo el uso de ciertos fertilizantes y pesticidas), que todavía no cumple.
El hándicap para el país es su inadecuada distribución del agua, ya que mientras el campo en el norte es seco y pobre, el sur sufre fuertes inundaciones que destruyen miles de hectáreas de campos de cultivo cada año, y donde el enorme agua caída en escasos días apenas puede ser utilizada.
El seminario iniciado hoy es la segunda muestra de cooperación chino-española en materia agrícola, después del proyecto piloto de ahorro de agua en las afueras de Pekín iniciado en enero de este año, dirigido por el experto Carlos Ramos (también coordinador del foro de esta semana).
En el último trimestre de este año, se celebrará una segunda edición del seminario, esta vez en España, en el que habrá proyectos más concretos de cooperación, destacaron los organizadores