Agua de El Picazo para Albacete y Cuenca
Lun, 27/06/2005
Obras Públicas empieza a gestionar el proyecto de abastecimiento desde el Júcar Prevé que una red de 216 kilómetros la lleve hasta los grifos de 27 municipios LA VERDAD/ALBACETE DEL JÚCAR. Presa del embalse de Alarcón, la reserva de agua que garantizará el abastecimiento al norte de Albacete. / LA VERDAD LOS 27 DESTINOS En Albacete:
Alborea, Barrax, Casas de Ves, Casas Ibáñez, Fuentealbilla, Golosalvo, Madrigueras, Mahora, La Roda, Tarazona de La Mancha y Villamalea.
En Cuenca :
Alarcón, Tébar, Casas de Guijarro, El Peral, El Herrumblar, Iniesta, El Picazo, Pozoamargo, Rubielos Altos, Rubielos Bajos, Quintanar del Rey, San Clemente, Sisante, Vara de Rey, Villanueva de la Jara y Villarta. La Consejería de Obras Públicas ha comenzado a tramitar el proyecto de abastecimiento de agua potable para 27 municipios del sur de Cuenca y el norte de Albacete con aguas del embalse de El Picazo, en el río Júcar. El objetivo es crear una red que garantice el suministro de agua de calidad, en sustitución del actual uso de aguas subterráneas. Se trata de una obra que, con variantes, se viene planteando desde hace años, pero que hasta ahora no había tenido ningún avance efectivo.
El pasado 12 de mayo, la consejería envió el proyecto a la Dirección General de Calidad Ambiental, para que ésta decida si las obras requieren abrir un procedimiento de impacto ambiental. El 22 de junio, el director general, Mariano Martínez, publicaba en el Diario Oficial de Castilla-La Mancha su resolución, en la que considera que ese trámite no es necesario.
En síntesis, el proyecto consiste en tomar algo más de mil litros por segundo junto a Alarcón, y llevarla, mediante más de 215 kilómetros de tuberías, a 16 pueblos de Cuenca y 11 de Albacete.
En esta provincia, la red llegaría hasta Barrax, por el suroeste, y Casas de Ves por el este.
La justificación de la obra, y de la necesidad urgente de sustituir las aguas subterráneas por las superficiales, se explica por parte de Obras Públicas por «la situación actual de sobreexplotación de los acuíferos, el descenso paulatino de los mismos unido a la escasez pluviométrica propia de la zona, junto con la degradación de la calidad de las aguas por uso de abonos, pesticidas y vertidos industriales»
La toma de aguja será de 1.080 litros por segundo, y se hará en el actual azud de Henchideros; de allí irá a una estación de bombeo hasta los depósitos y una estación de tratamiento, cerca de Alarcón.Desde esa zona, las tuberías llevarán el agua hasta las inmediaciones de El Picazo, donde se bifurca la conducción. La llamada Conducción Oeste saldrá de El Picazo hacia Sisante, Pozoamargo, La Roda y Barrax.
La Conducción Este va hacia Villanueva de la Jara. Allí se divide de nuevo en dos. La noroeste va a Villamalea, con ramales para Iniesta, Villarta y El Herrumblar. La sureste va hasta Casas de Ves, con ramales para Quintanar del Rey, Tarazona de La Mancha, Madrigueras, Mahora, Golosalvo, Fuentealbilla, Casas Ibáñez y Alborea.
En total, esta red tendrá casi 216 kilómetros de tuberías, que en su mayor parte discurrirán por terrenos paralelos a carreteras y caminos, con lo que afectarán mínimamente otras propiedades.
Se pretende que todos los municipios que recibirán el agua de este proyecto, en las dos provincias, constituyan una mancomunidad para gestionar este abastecimiento.
Alborea, Barrax, Casas de Ves, Casas Ibáñez, Fuentealbilla, Golosalvo, Madrigueras, Mahora, La Roda, Tarazona de La Mancha y Villamalea.
En Cuenca :
Alarcón, Tébar, Casas de Guijarro, El Peral, El Herrumblar, Iniesta, El Picazo, Pozoamargo, Rubielos Altos, Rubielos Bajos, Quintanar del Rey, San Clemente, Sisante, Vara de Rey, Villanueva de la Jara y Villarta. La Consejería de Obras Públicas ha comenzado a tramitar el proyecto de abastecimiento de agua potable para 27 municipios del sur de Cuenca y el norte de Albacete con aguas del embalse de El Picazo, en el río Júcar. El objetivo es crear una red que garantice el suministro de agua de calidad, en sustitución del actual uso de aguas subterráneas. Se trata de una obra que, con variantes, se viene planteando desde hace años, pero que hasta ahora no había tenido ningún avance efectivo.
El pasado 12 de mayo, la consejería envió el proyecto a la Dirección General de Calidad Ambiental, para que ésta decida si las obras requieren abrir un procedimiento de impacto ambiental. El 22 de junio, el director general, Mariano Martínez, publicaba en el Diario Oficial de Castilla-La Mancha su resolución, en la que considera que ese trámite no es necesario.
En síntesis, el proyecto consiste en tomar algo más de mil litros por segundo junto a Alarcón, y llevarla, mediante más de 215 kilómetros de tuberías, a 16 pueblos de Cuenca y 11 de Albacete.
En esta provincia, la red llegaría hasta Barrax, por el suroeste, y Casas de Ves por el este.
La justificación de la obra, y de la necesidad urgente de sustituir las aguas subterráneas por las superficiales, se explica por parte de Obras Públicas por «la situación actual de sobreexplotación de los acuíferos, el descenso paulatino de los mismos unido a la escasez pluviométrica propia de la zona, junto con la degradación de la calidad de las aguas por uso de abonos, pesticidas y vertidos industriales»
La toma de aguja será de 1.080 litros por segundo, y se hará en el actual azud de Henchideros; de allí irá a una estación de bombeo hasta los depósitos y una estación de tratamiento, cerca de Alarcón.Desde esa zona, las tuberías llevarán el agua hasta las inmediaciones de El Picazo, donde se bifurca la conducción. La llamada Conducción Oeste saldrá de El Picazo hacia Sisante, Pozoamargo, La Roda y Barrax.
La Conducción Este va hacia Villanueva de la Jara. Allí se divide de nuevo en dos. La noroeste va a Villamalea, con ramales para Iniesta, Villarta y El Herrumblar. La sureste va hasta Casas de Ves, con ramales para Quintanar del Rey, Tarazona de La Mancha, Madrigueras, Mahora, Golosalvo, Fuentealbilla, Casas Ibáñez y Alborea.
En total, esta red tendrá casi 216 kilómetros de tuberías, que en su mayor parte discurrirán por terrenos paralelos a carreteras y caminos, con lo que afectarán mínimamente otras propiedades.
Se pretende que todos los municipios que recibirán el agua de este proyecto, en las dos provincias, constituyan una mancomunidad para gestionar este abastecimiento.