La UE aprueba una Directiva de prevención y control de aguas subterráneas
Sáb, 25/06/2005
El Consejo de ministros de Medioambiente de la Unión Europea logró hoy un acuerdo sobre la Directiva de aguas subterráneas que obligará a los Estados miembros a prever medidas específicas de prevención, control y recuperación de la contaminación de este recurso.
Esta normativa, que especifica criterios claros para asegurarse de que todas las aguas subterráneas alcanzan un buen estado químico, está íntimamente relacionada con la Directiva de aguas, piedra angular de la política de protección medioambiental fijada para 2015.
Las aguas subterráneas son una reserva para el suministro de agua potable, así como para las actividades industriales y agrícolas, especialmente en periodos de sequía, y contribuyen a preservar las zonas húmedas y las cuencas fluviales. Son difíciles a descontaminar, incluso cuando la fuente de contaminación se ha eliminado, lo que hace esencial la prevención.
La Directiva establece así criterios para la evaluación del buen estado químico de este tipo de aguas, la identificación indicadores al alza, significativos y duraderos, de la concentración de contaminantes en las aguas subterráneas, así como para la definición de puntos de partida para invertir la tendencia.
Esta normativa, que especifica criterios claros para asegurarse de que todas las aguas subterráneas alcanzan un buen estado químico, está íntimamente relacionada con la Directiva de aguas, piedra angular de la política de protección medioambiental fijada para 2015.
Las aguas subterráneas son una reserva para el suministro de agua potable, así como para las actividades industriales y agrícolas, especialmente en periodos de sequía, y contribuyen a preservar las zonas húmedas y las cuencas fluviales. Son difíciles a descontaminar, incluso cuando la fuente de contaminación se ha eliminado, lo que hace esencial la prevención.
La Directiva establece así criterios para la evaluación del buen estado químico de este tipo de aguas, la identificación indicadores al alza, significativos y duraderos, de la concentración de contaminantes en las aguas subterráneas, así como para la definición de puntos de partida para invertir la tendencia.