La sequía amenaza a casi toda la cuenca aragonesa del río Ebro La CHE recomienda el ahorro y apuesta por los embalses como garantía de futuro

Mar, 19/07/2005

El Periódico de Aragón


La sequía amenaza a prácticamente toda la cuenca aragonesa del Ebro, salvándose tan sólo la margen derecha gracias a que los embalses se encuentran a plena capacidad. Los problemas de agua afectan de manera muy grave al Gállego y Cinca, fundamentalmente, a los Riegos del Alto Aragón y al abastecimiento de la ciudad de Huesca. Pero también se encuentran en alerta máxima las cuencas del río Aragón y Arbas (Bardenas) y el Canal de Aragón y Cataluña en su zona alta. Este es el panorama actual que ayer mostró la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) en la presentación del primer documento de actuación por la sequía, aprobado por su Junta de Gobierno.
Este protocolo no sólo se refiere a la denominada sequía climática por falta de precipitaciones --de la que la cuenca del Ebro adolece a partir de Navarra--, sino que valora los datos de las reservas de los embalses y la aportación de las aguas de los ríos.
"Si no fuera por los embalses, los caudales serían muy inferiores. Por ello, recomiendo desarrollar sistemas de ahorro en aquellas zonas que no sufran problemas pero que los tendrán si no llueve en otoño e invierno. Hay que asegurar el futuro y la mejor manera es mantener el agua embalsada", afirmó el presidente de la CHE, José Luis Alonso .
De ahí que entre las medidas propuestas en este documento, que deberán aprobar las Juntas de Regantes, destaquen los embalses. El recrecimiento de Yesa, la ejecución de Biscarrués y Montbrun, así como la construcción de toda una serie de pequeños embalses o la finalización del pantano de Montearagón.
En cuanto a la marcha de la campaña de riegos, el director técnico de la CHE, Fermín Molina, explicó el "duro" panorama que vive Riegos del Alto Aragón "con dotaciones medias menores al 50% respecto a años anteriores", mientras que en el Canal de Aragón y Cataluña se ha realizado una obra de emergencia para permitir regar 17.000 hectáreas de frutales "que se pondrá en marcha esta misma semana".

Sobre Bardenas, comentó que "a base de restricciones aguantarán", al igual que lo harán en la zona de los riegos del Canal de Urgel. No obstante, insistió en que los abastecimientos están todos asegurados.

Este primer protocolo de la sequía, abierto a futuras actualizaciones, sirve para calificar por niveles las zona de riesgo y como base del futuro plan especial de actuación que el PHN establecía como necesario, y que lleva un retraso de años. El Ministerio de Medio Ambiente ya ha sacado a licitación el concurso de consultoría, aunque el plan no estará hasta el 2006 o 2007.