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SANTIAGO. El Parlamento gallego fue el protagonista indiscutible de la jornada de ayer, no sólo por la sesión constitutiva de la VII legislatura sino por ser el lugar elegido por un grupo de promotores de la iniciativa popular en defensa de los ríos. Tras pancartas en las que expresaban su oposición a las presas de aprovechamiento hidroeléctrico, demandaron de los grupos parlamentarios prontitud en la gestión de la iniciativa.

En el escrito depositan su confianza en que el cambio político producido en las recientes elecciones autonómicas, del que esperan signifique una vuelta de tuerca en la política hidrológica, poniendo al frente de esta responsabilidad a las personas que más se han destacado por su sensibilidad ambiental.

Los promotores de la iniciativa consideran que los ríos están actualmente en una situación de emergencia y los ecosistemas fluviales a punto de rebasar los límites de sostenibilidad. Por este motivo, los allí presentes denunciaron la situación de las cuencas fluviales, tanto por los aprovechamientos hidroeléctricos como por los vertidos contaminantes que reciben. Aseguran que tanto el Parlamento como el nuevo Gobierno debe tomar medidas urgentes para solventar la situación.