Biólogos de Andalucía piden la prohibición de herbicidas residuales para evitar casos como el de Iznájar
Jue, 18/08/2005
El Colegio Oficial de Biólogos de Andalucía sugirió hoy "en relación a la contaminación por Terbutilazina del pantano de Iznájar", en Córdoba, una serie de recomendaciones con el fin de que "asuntos tan controvertidos como son el uso de herbicidas residuales sean analizados por los agentes sociales con el adecuado criterio científico y técnico".
A través de un comunicado remitido a Europa Press, estos biólogos pidieron que por parte de las administraciones competentes ha de prohibirse el uso de herbicidas residuales y se aconseja establecer un plan de vigilancia en el uso de estos, con sanciones graves para el incumplimiento de la legislación vigente en este sentido.
De igual modo, solicitaron respetar escrupulosamente los periodos de seguridad y el uso obligado de cubiertas vegetales en el cultivo de olivar para evitar la contaminación difusa y la colmatación de embalses.
Asimismo, consideraron necesario cambiar la política del agua de incremento de los recursos hídricos a una política de contención de la demanda, "una mayor sensibilización en materia ambiental y la restauración hidrológica de las cabeceras de los cursos fluviales".
Los biólogos calificaron lo sucedido en Iznájar como "una noticia más que preocupante desde el punto de vista del medio natural y social andaluz", ya que este pantano supone la masa de agua de abastecimiento más grande de Andalucía, con una capacidad de 981 hm3 y que abastece a 250.000 personas y 25 municipios.
A través de un comunicado remitido a Europa Press, estos biólogos pidieron que por parte de las administraciones competentes ha de prohibirse el uso de herbicidas residuales y se aconseja establecer un plan de vigilancia en el uso de estos, con sanciones graves para el incumplimiento de la legislación vigente en este sentido.
De igual modo, solicitaron respetar escrupulosamente los periodos de seguridad y el uso obligado de cubiertas vegetales en el cultivo de olivar para evitar la contaminación difusa y la colmatación de embalses.
Asimismo, consideraron necesario cambiar la política del agua de incremento de los recursos hídricos a una política de contención de la demanda, "una mayor sensibilización en materia ambiental y la restauración hidrológica de las cabeceras de los cursos fluviales".
Los biólogos calificaron lo sucedido en Iznájar como "una noticia más que preocupante desde el punto de vista del medio natural y social andaluz", ya que este pantano supone la masa de agua de abastecimiento más grande de Andalucía, con una capacidad de 981 hm3 y que abastece a 250.000 personas y 25 municipios.