Los pozos del 94-95 están preparados para su uso y se planea bombear agua desde San Roque a la Costa Occidental. Las denuncias por tomas ilegales se elevan ya a setenta

CHUS HEREDIA. MÁLAGA

El verano se está desarrollando sin demasiadas sorpresas en lo que a abastecimiento de agua respecta. El escenario y las reservas estaban perfectamente marcadas al inicio de la temporada alta. Pese a todo, a juzgar por las opiniones de los expertos en la materia y de los datos de los embalses, el consumo del líquido elemento no ha conseguido contenerse. Desde que comenzó el verano, los pantanos han perdido 51,6 hectómetros cúbicos, 8,6 más que en el mismo período de 2004.
Una de las explicaciones que se ofrecen es que determinados municipios de la Costa Occidental están recurriendo menos de lo habitual a los esquilmados acuíferos, cuyo nivel general ha descendido un 12%, según comentó el presidente de Cuenca Mediterránea Andaluza (CMA), Antonio Rodríguez Leal, que detalló todo un abanico de actuaciones que se están ultimando para afrontar con garantías el período decisivo del otoño.
Agua de Cádiz. En este sentido, todas las obras en los pozos de emergencia que se practicaron durante la sequía del 94-95. De hecho, los de Aljaima, Fuengirola y Guadiaro ya están ofreciendo rendimiento. "La clave es que van a estar a punto para otoño, que es cuando, previsiblemente, los podremos necesitar. También estamos trabajando para bombear agua desde la provincia de Cádiz hacia la Costa Occidental", explicó. El proyecto consiste en aprovechar la estación de bombeo de El Toril, en San Roque, para aportar a la red entre 150 y 300 litros de agua por segundo.
La mayor puesta en carga de la desaladora de Marbella es otra de las actuaciones importantes. Ahora, las instalaciones utilizan tres de sus ocho bastidores y la empresa de aguas Acosol está ultimando con Endesa la posibilidad de elevarlos a seis en septiembre.
El amplio paquete de pequeñas medidas para garantizar el suministro tiene un complemento fundamental en la colaboración que están prestando los agricultores de la zona del Guadalhorce, que han renunciado voluntariamente a unos 12 hectómetros cúbicos del suministro habitual.
La mayor venta de agua reciclada tras su tratamiento en depuradora es otro hecho que está poniendo su granito de arena en contener el despilfarro. Este verano se llegará a seis hectómetros de agua reutilizada para campos de golf, cuando el máximo estaba en unos 3,5.
El esfuerzo para detectar la extracción ilegal se ha intensificado. En lo que va de verano, se han tramitado ya 70 expedientes en este sentido y Rodríguez Leal avanzó que se podría alcanzar el centenar.
Avances en proyectos. Según los datos de que dispone Emasa, la capital está consumiendo alrededor de un 3% más de agua que la curva medida anual; es decir, que el suministro en Málaga se mueve en los límites razonables. Ahora mismo, se está obteniendo agua de los embalses del Guadalhorce (1.950 litros por segundo), los pozos de Aljaima (200) y de La Viñuela (350).
La situación es menos comprometida que en la Costa Occidental y el Ayuntamiento está cerrando con el Ministerio de Medio Ambiente las características de las obras de reutilización de aguas residuales en la depuradora del Guadalhorce y para desalar el agua de los pantanos de esta zona.