Extremadura tiene garantizada la disponibilidad de agua para todos los usos en este año
Mié, 31/08/2005
Los presidentes de las cuencas hidrográficas del Tajo y del Guadiana lo aseguraron ayer en Santander
AGENCIAS/REDACCIÓN
El abastecimiento de agua para todos los usos en las cuencas del Tajo y el Guadiana está asegurado para este año hidrológico, aunque para el próximo la 'clave'serán las lluvias que se registren en otoño, dijeron ayer los presidentes de las Confederaciones Hidrográficas de estas dos cuencas.
José María Macías, presidente de la Confederación Hidrográfica del Tajo, reconoció que si el próximo año hidrológico es 'medio' se podrían garantizar los abastecimientos para la mayoría de los usos, aunque advirtió de que si es 'muy seco', se tendrán que llevar a cabo restricciones 'relativamente importantes'.
El presidente de la Confederación Hidrográfica del Guadiana, José Ignacio Sánchez, explicó que para la zona de Extremadura los usos podrían estar garantizados para el próximo año, a pesar de que no llueva lo necesario, pero dijo que en la cuenca alta (Castilla La Mancha) y en el sur (Huelva) habría que restringir regadíos si las lluvias no llegan.
Macías y Sánchez hicieron estas declaraciones a los periodistas en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo, tras conocerse los últimos datos de la reserva hidráulica de las cuencas españolas que apuntan a una disminución de un 1 por ciento del agua que almacenan los embalses y pantanos en la última semana, lo que les sitúa al 42,6% de su capacidad.
«Podemos hablar del peor año del Tajo, desde el punto de vista hidrológico, de todo un siglo, ya que contamos con registros desde 1912 y nunca ha habido un año tan malo», aseguró el presidente de la Confederación Hidrográfica de esta cuenca, quien aun así destacó las actuaciones llevadas a cabo por el Gobierno para intentar paliar los efectos de la sequía.
Pero, Macías dijo que el consumo «responsable» es la principal solución a la situación que atraviesa la reserva hidráulica española, así como comenzar a implantar medidas para evitar restricciones en el inicio del año hidrológico (el 1 de octubre) porque, a su juicio, «las sequías se previenen en épocas de abundancia».
Sánchez insistió en que las actuaciones para el próximo año dependen de lo que ocurra a partir de octubre, aunque recordó que la Confederación del Guadiana ya ha aprobado los protocolos de sequía que incluyen un ahorro en los usos de un diez por ciento en regadíos, abastecimiento e industriales.
En aguas subterráneas, el presidente de la Confederación Hidrográfica del Guadiana apuntó a la sobreexplotaciones de los acuíferos y señaló que, para buscar una solución en este asunto, se va a redactar el Plan Especial del Guadiana que incluye medidas para la explotación de aguas del Alto Guadiana.
Posibles restricciones
Respecto a las restricciones que tendrían que llevarse a cabo en la cuenca del Tajo, en el caso de que el próximo año fuese muy seco, Macías explicó que estas afectarían «en pequeña medida» al abastecimiento de las ciudades, donde se prohibiría el riego de jardines no tradicionales, por lo que «serían soportables para los ciudadanos».
Macías recordó que la situación de la reserva hidrológica del Tajo es «bastante peor» por los «puntos conflictivos» del trasvase al Segura y el abastecimiento a Madrid, aunque insistió en que para el próximo año «todo depende de la evolución del otoño».
Explicó que este año se han asegurado todos los abastecimientos, excepto en un par de pequeñas zonas regables, pero con restricciones de un 30 por ciento, ya que la capacidad de los embalses del Tajo está en este porcentaje.
Macías consideró que lo que «ha fallado» en este año hidrológico ha sido la falta de previsión ante la posible sequía que al final se ha registrado, así como el incremento de los consumos de «forma extraordinaria».
Por ello, consideró que con los instrumentos que ha movilizado el Gobierno, «que antes no se había hecho», y las políticas de limitación y vigilancia se notará la mejora de la situación «a corto plazo».
AGENCIAS/REDACCIÓN
El abastecimiento de agua para todos los usos en las cuencas del Tajo y el Guadiana está asegurado para este año hidrológico, aunque para el próximo la 'clave'serán las lluvias que se registren en otoño, dijeron ayer los presidentes de las Confederaciones Hidrográficas de estas dos cuencas.
José María Macías, presidente de la Confederación Hidrográfica del Tajo, reconoció que si el próximo año hidrológico es 'medio' se podrían garantizar los abastecimientos para la mayoría de los usos, aunque advirtió de que si es 'muy seco', se tendrán que llevar a cabo restricciones 'relativamente importantes'.
El presidente de la Confederación Hidrográfica del Guadiana, José Ignacio Sánchez, explicó que para la zona de Extremadura los usos podrían estar garantizados para el próximo año, a pesar de que no llueva lo necesario, pero dijo que en la cuenca alta (Castilla La Mancha) y en el sur (Huelva) habría que restringir regadíos si las lluvias no llegan.
Macías y Sánchez hicieron estas declaraciones a los periodistas en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo, tras conocerse los últimos datos de la reserva hidráulica de las cuencas españolas que apuntan a una disminución de un 1 por ciento del agua que almacenan los embalses y pantanos en la última semana, lo que les sitúa al 42,6% de su capacidad.
«Podemos hablar del peor año del Tajo, desde el punto de vista hidrológico, de todo un siglo, ya que contamos con registros desde 1912 y nunca ha habido un año tan malo», aseguró el presidente de la Confederación Hidrográfica de esta cuenca, quien aun así destacó las actuaciones llevadas a cabo por el Gobierno para intentar paliar los efectos de la sequía.
Pero, Macías dijo que el consumo «responsable» es la principal solución a la situación que atraviesa la reserva hidráulica española, así como comenzar a implantar medidas para evitar restricciones en el inicio del año hidrológico (el 1 de octubre) porque, a su juicio, «las sequías se previenen en épocas de abundancia».
Sánchez insistió en que las actuaciones para el próximo año dependen de lo que ocurra a partir de octubre, aunque recordó que la Confederación del Guadiana ya ha aprobado los protocolos de sequía que incluyen un ahorro en los usos de un diez por ciento en regadíos, abastecimiento e industriales.
En aguas subterráneas, el presidente de la Confederación Hidrográfica del Guadiana apuntó a la sobreexplotaciones de los acuíferos y señaló que, para buscar una solución en este asunto, se va a redactar el Plan Especial del Guadiana que incluye medidas para la explotación de aguas del Alto Guadiana.
Posibles restricciones
Respecto a las restricciones que tendrían que llevarse a cabo en la cuenca del Tajo, en el caso de que el próximo año fuese muy seco, Macías explicó que estas afectarían «en pequeña medida» al abastecimiento de las ciudades, donde se prohibiría el riego de jardines no tradicionales, por lo que «serían soportables para los ciudadanos».
Macías recordó que la situación de la reserva hidrológica del Tajo es «bastante peor» por los «puntos conflictivos» del trasvase al Segura y el abastecimiento a Madrid, aunque insistió en que para el próximo año «todo depende de la evolución del otoño».
Explicó que este año se han asegurado todos los abastecimientos, excepto en un par de pequeñas zonas regables, pero con restricciones de un 30 por ciento, ya que la capacidad de los embalses del Tajo está en este porcentaje.
Macías consideró que lo que «ha fallado» en este año hidrológico ha sido la falta de previsión ante la posible sequía que al final se ha registrado, así como el incremento de los consumos de «forma extraordinaria».
Por ello, consideró que con los instrumentos que ha movilizado el Gobierno, «que antes no se había hecho», y las políticas de limitación y vigilancia se notará la mejora de la situación «a corto plazo».