Riegos del Alto Aragón rechaza almacenar agua en Valcuerna
Vie, 07/10/2005
El presidente de Riegos del Alto Aragón, César Trillo, insistió ayer, durante una jornada informativa sobre el futuro del regadío, en reivindicar el embalse de Biscarrués para garantizar el desarrollo de la superficie regable en su sistema.
"Si queremos llegar a completar 172.000 hectáreas regables es indispensable Biscarrués, obra de infraestructura que nos permitirá contener las aportaciones del río Gállego en las riadas. Pero si no se construye, el futuro de Riegos del Alto Aragón es muy negro, porque la agricultura competitiva es la que puede garantizar los riegos", dijo.
Tras advertir que las poblaciones "se están abasteciendo actualmente por el agua de los embalses y no por la que aportan los ríos", se mostró partidario de combinar Biscarrués con pequeños embalses de regulación interna de 5 a 25 hectómetros de capacidad, pero rechazó la propuesta de ubicación de uno de mayores dimensiones en Valcuerna al exigir su funcionamiento el bombeo de caudales.
En la jornada participó Pedro Arrojo, presidente de la Fundación Nueva Cultura del Agua, única voz discordante en medio del colectivo de regantes y del que se elogió su disposición a actuar en campo contrario
. Sus argumentos, no obstante, fueron seguidos con toda atención.
La regulación del Gállego se encuentra desde hace meses sobre la mesa de la Ponencia de Obras Conflictivas de la Mesa del Agua de Aragón. Mientras los miembros del organismo esperan recibir los informes sobre todas las alternativas para aprovechar el río, han comenzado a organizarse movimientos de oposición. Los vecinos de la Galliguera efectúan esta semana una marcha de protesta contra el pantano de Biscarrués, que anegaría un tramo del río del que viven 300 familias, mientras alcaldes de Monegros, donde irían las reservas de la balsa de Valcuerna han mostrado su oposición.
Trillo, explicó que el sistema podría no iniciar la próxima campaña de riegos si las lluvias no permiten recuperar los embalses a lo largo de los próximos meses. Si este otoño no llueve más que el anterior, únicamente podrán cubrir el abastecimiento de núcleos, polígonos industriales y explotaciones ganaderas.
ALONSO, POR EL CONSENSO El presidente de la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE), José Luis Alonso, que se mostró confiado en la consecución de "consenso mayoritario" en el seno de la Comisión del Agua en torno al embalse de Biscarrués, explicó que la recuperación de los acuíferos y embalses dependerá, en cualquier caso, de un incremento "por encima de lo normal" de las lluvias previstas para este otoño.
Por otro lado, la comunidad de regantes solicitará detener la turbinación de las centrales hidroeléctricas del Cinca para garantizar los caudales mínimos para abastecer a los núcleos de población. La Comisión de Desembalse Cinca-Gállego debatirá este asunto el lunes.
Trillo solicitará instalar un sistema de bombeo en El Grado para aprovechar los 150 hectómetros del embalse muerto
y colocar "una o dos bombas de emergencia" en el pantano para garantizar el abastecimiento de poblaciones y polígonos.
"Si queremos llegar a completar 172.000 hectáreas regables es indispensable Biscarrués, obra de infraestructura que nos permitirá contener las aportaciones del río Gállego en las riadas. Pero si no se construye, el futuro de Riegos del Alto Aragón es muy negro, porque la agricultura competitiva es la que puede garantizar los riegos", dijo.
Tras advertir que las poblaciones "se están abasteciendo actualmente por el agua de los embalses y no por la que aportan los ríos", se mostró partidario de combinar Biscarrués con pequeños embalses de regulación interna de 5 a 25 hectómetros de capacidad, pero rechazó la propuesta de ubicación de uno de mayores dimensiones en Valcuerna al exigir su funcionamiento el bombeo de caudales.
En la jornada participó Pedro Arrojo, presidente de la Fundación Nueva Cultura del Agua, única voz discordante en medio del colectivo de regantes y del que se elogió su disposición a actuar en campo contrario
. Sus argumentos, no obstante, fueron seguidos con toda atención.
La regulación del Gállego se encuentra desde hace meses sobre la mesa de la Ponencia de Obras Conflictivas de la Mesa del Agua de Aragón. Mientras los miembros del organismo esperan recibir los informes sobre todas las alternativas para aprovechar el río, han comenzado a organizarse movimientos de oposición. Los vecinos de la Galliguera efectúan esta semana una marcha de protesta contra el pantano de Biscarrués, que anegaría un tramo del río del que viven 300 familias, mientras alcaldes de Monegros, donde irían las reservas de la balsa de Valcuerna han mostrado su oposición.
Trillo, explicó que el sistema podría no iniciar la próxima campaña de riegos si las lluvias no permiten recuperar los embalses a lo largo de los próximos meses. Si este otoño no llueve más que el anterior, únicamente podrán cubrir el abastecimiento de núcleos, polígonos industriales y explotaciones ganaderas.
ALONSO, POR EL CONSENSO El presidente de la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE), José Luis Alonso, que se mostró confiado en la consecución de "consenso mayoritario" en el seno de la Comisión del Agua en torno al embalse de Biscarrués, explicó que la recuperación de los acuíferos y embalses dependerá, en cualquier caso, de un incremento "por encima de lo normal" de las lluvias previstas para este otoño.
Por otro lado, la comunidad de regantes solicitará detener la turbinación de las centrales hidroeléctricas del Cinca para garantizar los caudales mínimos para abastecer a los núcleos de población. La Comisión de Desembalse Cinca-Gállego debatirá este asunto el lunes.
Trillo solicitará instalar un sistema de bombeo en El Grado para aprovechar los 150 hectómetros del embalse muerto
y colocar "una o dos bombas de emergencia" en el pantano para garantizar el abastecimiento de poblaciones y polígonos.