Los ecologistas rechazan la ubicación de la nueva desaladora de Torrevieja
Mié, 12/10/2005
J. Sierra, Valencia
La asociación ecologista Amigos de los Humedales del Sur de Alicante (AHSA) rechaza la construcción de la desaladora de Torrevieja, la de mayor capacidad de cuantas se van a construir en la Comunidad Valenciana, dentro de la Zona Periférica de Protección del Parque natural de las Lagunas de la Mata y Torrevieja.
El fondo de la alegación coincide en este caso con el escrito presentado por la conselleria de Territorio y Vivienda que dirige Rafael Blasco, aunque los ecologistas refuerzan sus argumentos en contra de esta ubicación señalando que el entorno sur de la laguna de la Mata está ya «suficientemente castigado» por dos infraestructuras publicas como son la depuradora y el hospital de Torrevieja, autorizado en términos urbanísticos por Blasco cuando ya existía la misma regulación de la ZPP que ahora usa para rechazar la desaladora.
Buscar alternativas
Aunque el decreto autonómico que regula la ZPP de las lagunas de la Mata y Torrevieja contempla la parcela elegida por Acuamed como de predominio agrícola A, donde cabe el uso educativo, el agrícola , la regeneración asistida de ecosistemas naturales y «aquellas infraestructuras y equipamientos de interés general cuyo trazado deba discurrir inexcusablemente por dichas áreas», los ecologistas entienden que la desaladora puede ubicarse fuera de esta zona sin que eso suponga costes añadidos.
«La ubicación propuesta para la desaladora -indican fuentes de AHSA- supone un impacto visual negativo sobre el entorno de la laguna de Torrevieja (las edificaciones se elevarán hasta 12 metros de altura), un entorno ya suficientemente castigado en esta zona de la laguna como consecuencia de la proximidad de la EDAR de Torrevieja y del nueva hospital, dos construcciones también desafortunadamente ubicadas dentro de la ZPP del Parque Natural».
Cabe recordar que las obras de este hospital, construido con fondos públicos pero que tendrá gestión privada, comenzaron antes de contar con declaración de impacto ambiental amparadas dudosamente por una licencia para movimiento de tierras sin que entonces interviniera la conselleria
La asociación ecologista Amigos de los Humedales del Sur de Alicante (AHSA) rechaza la construcción de la desaladora de Torrevieja, la de mayor capacidad de cuantas se van a construir en la Comunidad Valenciana, dentro de la Zona Periférica de Protección del Parque natural de las Lagunas de la Mata y Torrevieja.
El fondo de la alegación coincide en este caso con el escrito presentado por la conselleria de Territorio y Vivienda que dirige Rafael Blasco, aunque los ecologistas refuerzan sus argumentos en contra de esta ubicación señalando que el entorno sur de la laguna de la Mata está ya «suficientemente castigado» por dos infraestructuras publicas como son la depuradora y el hospital de Torrevieja, autorizado en términos urbanísticos por Blasco cuando ya existía la misma regulación de la ZPP que ahora usa para rechazar la desaladora.
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Aunque el decreto autonómico que regula la ZPP de las lagunas de la Mata y Torrevieja contempla la parcela elegida por Acuamed como de predominio agrícola A, donde cabe el uso educativo, el agrícola , la regeneración asistida de ecosistemas naturales y «aquellas infraestructuras y equipamientos de interés general cuyo trazado deba discurrir inexcusablemente por dichas áreas», los ecologistas entienden que la desaladora puede ubicarse fuera de esta zona sin que eso suponga costes añadidos.
«La ubicación propuesta para la desaladora -indican fuentes de AHSA- supone un impacto visual negativo sobre el entorno de la laguna de Torrevieja (las edificaciones se elevarán hasta 12 metros de altura), un entorno ya suficientemente castigado en esta zona de la laguna como consecuencia de la proximidad de la EDAR de Torrevieja y del nueva hospital, dos construcciones también desafortunadamente ubicadas dentro de la ZPP del Parque Natural».
Cabe recordar que las obras de este hospital, construido con fondos públicos pero que tendrá gestión privada, comenzaron antes de contar con declaración de impacto ambiental amparadas dudosamente por una licencia para movimiento de tierras sin que entonces interviniera la conselleria