Castilla-La Mancha amenaza con llevar a los tribunales a Narbona si autoriza otro trasvase Tajo-Segura
Jue, 20/10/2005
TOLEDO. El anuncio de la ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, de autorizar próximamente un trasvase de agua para riegos desde el Tajo al Segura, como anticipo de los 60 hectómetros cúbicos que se han fijado como «cantidad prudente» para trasvasar a los regadíos en el nuevo año hidrológico, ha caído como un jarro de agua fría en el Gobierno de Castilla-La Mancha, que hace sólo unas semanas brindaba por al anterior acuerdo del Consejo de Ministros.
El último acuerdo se entendió como un «balón de oxígeno» de Narbona al presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, que recibió con gran satisfacción que el Gobierno, por primera vez en la historia del trasvase, sólo autorizara una derivación de 39 hectómetros cúbicos de agua desde la cabecera del Tajo a la cuenca del Segura para abastecimiento humano.
Ayer, el vicepresidente segundo del Ejecutivo regional, Emiliano García-Page, afirmó que el Gobierno de España «debe ajustarse ahora a la misma prudencia de hace unos días, cuando decidió no conceder un trasvase del Tajo al Segura para regadíos, porque no ha cambiado nada».
García-Page advirtió que «todo acuerdo del Gobierno de España sobre el trasvase Tajo-Segura que no se ajuste a la legalidad será recurrido por el Gobierno de Castilla-La Mancha». Prueba de ello es el recurso que están tramitando los servicios jurídicos de la Junta contra la decisión del pasado 1 de julio. El vicepresidente segundo se refirió también a la reunión que el martes mantuvieron la ministra de Medio Ambiente y el presidente de Murcia y consideró que los planteamientos que realiza Ramón Luis Valcárcel sobre un nuevo trasvase desde el Tajo medio «es simple y llanamente imposible». El portavoz del Gobierno autonómico pidió al presidente murciano que «mire a lo que tiene más cerca, que es el mar, porque es inagotable para poder abastecerse, cosa que no tenemos en Castilla-La Mancha». Además, insistió en que el trasvase Tajo-Segura «está agotado» y dijo que «es absolutamente insostenible y poco inteligente» que desde Murcia se siga pensando «en depender de un hilo» para mantener el futuro de esta región, «no sólo de sus regadíos, sino también de su desarrollo social y económico».
En Castilla-La Mancha se sucedieron ayer las reacciones al anuncio realizado por Narbona. Así, el secretario regional de Asaja, José María Fresneda, afirmó que es «una payasada», porque «un trasvase para contentar a la gente es la tontería más grande que he visto». Y la Asociación de Agricultores y Ganaderos de Guadalajara (APAG) consideró «incomprensible e injusta» la posible aprobación de un nuevo envío de agua para los regantes murcianos, ya que se aún no es «imprescindible» ante la posibilidad de que caigan más lluvias.
El último acuerdo se entendió como un «balón de oxígeno» de Narbona al presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, que recibió con gran satisfacción que el Gobierno, por primera vez en la historia del trasvase, sólo autorizara una derivación de 39 hectómetros cúbicos de agua desde la cabecera del Tajo a la cuenca del Segura para abastecimiento humano.
Ayer, el vicepresidente segundo del Ejecutivo regional, Emiliano García-Page, afirmó que el Gobierno de España «debe ajustarse ahora a la misma prudencia de hace unos días, cuando decidió no conceder un trasvase del Tajo al Segura para regadíos, porque no ha cambiado nada».
García-Page advirtió que «todo acuerdo del Gobierno de España sobre el trasvase Tajo-Segura que no se ajuste a la legalidad será recurrido por el Gobierno de Castilla-La Mancha». Prueba de ello es el recurso que están tramitando los servicios jurídicos de la Junta contra la decisión del pasado 1 de julio. El vicepresidente segundo se refirió también a la reunión que el martes mantuvieron la ministra de Medio Ambiente y el presidente de Murcia y consideró que los planteamientos que realiza Ramón Luis Valcárcel sobre un nuevo trasvase desde el Tajo medio «es simple y llanamente imposible». El portavoz del Gobierno autonómico pidió al presidente murciano que «mire a lo que tiene más cerca, que es el mar, porque es inagotable para poder abastecerse, cosa que no tenemos en Castilla-La Mancha». Además, insistió en que el trasvase Tajo-Segura «está agotado» y dijo que «es absolutamente insostenible y poco inteligente» que desde Murcia se siga pensando «en depender de un hilo» para mantener el futuro de esta región, «no sólo de sus regadíos, sino también de su desarrollo social y económico».
En Castilla-La Mancha se sucedieron ayer las reacciones al anuncio realizado por Narbona. Así, el secretario regional de Asaja, José María Fresneda, afirmó que es «una payasada», porque «un trasvase para contentar a la gente es la tontería más grande que he visto». Y la Asociación de Agricultores y Ganaderos de Guadalajara (APAG) consideró «incomprensible e injusta» la posible aprobación de un nuevo envío de agua para los regantes murcianos, ya que se aún no es «imprescindible» ante la posibilidad de que caigan más lluvias.