En febrero comenzará la construcción de la presa de Castrovido, con una cota de 1.046 metros y un aliviadero de 1.032
Mar, 20/12/2005
Las obras de construcción de la presa de Castrovido se iniciarán el próximo mes de febrero, según anunciaron hoy los responsables de la Dirección General del Agua del Ministerio de Medio Ambiente y de la Confederación Hidrográfica del Duero (CHD) en Burgos, durante la presentación del modificado del proyecto.
En concreto, el embalse tendrá una altitud máxima sobre el nivel del mar de 1.046 metros, con un desagüe en defensa contra inundaciones, que marcará el nivel normal del agua, a la cota de 1.032 metros. A este nivel la capacidad de la presa será de 44,13 hectómetros cúbicos.
El objetivo básico de esta infraestructura será el de prevenir las inundaciones, sobre todo en las poblaciones de la cuenca baja del Arlanza. Por eso, el aliviadero proyectado en la cota 1.032 metros tendrá limitado su caudal a 30 metros cúbicos por segundo, el límite de agua que debe llevar el río para evitar inundaciones en Salas de los Infantes.
Para crecidas superiores, la presa contará con un aliviadero de superficie en la cota 1.042, que permitirá controlar en un 75 por ciento la crecida de diseño del embalse.
La presidenta de la Confederación Hidrográfica del Duero, Helena Caballero, aseguró que el proyecto definitivo que hoy se presentó es la solución "óptima" para combatir inundaciones consiguiendo garantizar todos los usos que estaban previstos, con el mínimo impacto ambiental, y dentro de las directrices del Programa Agua del Ministerio de Medio Ambiente.
Según detalló, además de mejorar la defensa contra inundaciones, se garantiza el abastecimiento para 30.000 personas, como media de población, se garantiza el regadío para 6.010 hectáreas, y un caudal ambiental durante todos los meses del año, que se mejora "ostensiblemente" en el mes de noviembre, dada la "importancia truchera" del río.
Las poblaciones beneficiadas con el abastecimiento previsto son las situadas en el tramo de la cuenca del río Arlanza comprendido entre Terrazas y Palenzuela, de las provincias de Burgos y Palencia. Se trata de Castrovido, Salas de los Infantes, La Revilla, Barbadillo del Mercado, Cascajares de la Sierra, Hortigüela, Retuerta, Covarrubias, Puentedura, Tordueles, Quintanilla del Agua, Santillán, Santa Inés, Lerma, Puyales del Agua, Santa Cecilia, Tordomar, Torrepadre, Villahoz, Retortillo, Hontoria y Torquemada.
REGADÍO
Por lo que respecta al regadío, la presa tendrá una dotación de 5.000 metros cúbicos por hectárea y año, frente al máximo de 6.700 metros cúbicos por hectárea y año que fijaba el Plan Hidrológico de cuencas.
La directora técnica de la Confederación Hidrográfica del Duero, Liliana Ardiles, explicó que la reducción a 5.000 metros cúbicos se ha decidido en función de las conclusiones de dos estudios, uno procedente de la Consejería de Agricultura de la Junta, y el otro del Centro de Estudios y Experimentación de Obras Públicas.
Aseguró que ambos estudios parten de los mismos cultivos y, aunque aplican metodologías diferentes, coinciden en estimar una dotación del orden de los 5.000 metros cúbicos.
Ardiles consideró que la presa hoy presentada garantiza la satisfacción de las demandas de los habitantes de la zona y otorga una mayor seguridad a los residentes en la cuenca baja.
En cuanto a la posibilidad de que los regantes recurran la dotación que se incluye en el modificado, tal y como anunció el portavoz de la Comisión de Seguimiento de Castrovido, Dositeo Martín, la semana pasada, el director general del Agua, Jaime Palop, apuntó que el Ministerio de Medio Ambiente está acatando la legislación vigente.
"Nuestra obligación es hacer un proyecto definitivo que de respuesta y solución a los problemas que tiene planteada una Comunidad Autónoma y una cuenca. Otros tendrán que asumir la responsabilidad de las consecuencias que se deriven de recurrir un acto administrativo", declaró Palop, al tiempo que afirmó que las infraestructuras del proyecto anterior y las del modificado son "absolutamente similares", salvo algunas diferencias estructurales.
Palop recordó que la presa que inicialmente estaba prevista no llevaba un aliviadero intermedio, pero sí una "limitación legal" por regla de explotación, ya que a partir de la cota 1.37 metros no podía embalsar "ni un mililitro más" para regular agua. "Aquí parece que uno tenga un aliviadero intermedio y el otro tenga posibilidad o permiso de llegar hasta el cielo", recalcó.
Reiteró que el aliviadero que se contempla para la cota de 1.032 metros, "por motivos de seguridad", no puede tener unas compuertas. Explicó que también se resuelven así el resto de cuencas del país, como todo el plan de avenida del Segura, o la cuenca del Júcar.
Palop incidió en que sería "un sinsentido" dotarle de compuertas en un futuro a este aliviadero, y defendió esta infraestructura porque garantiza el abastecimiento de las poblaciones, de regadío y respeta el Medio Ambiente, además de proteger frente a inundaciones.
El presupuesto total de las obras de ejecución de la presa y las actuaciones complementarias para regular el caudal del Arlanza asciende a 104 millones de euros, de los que 70 irán destinados al embalse.
Las obras se iniciarán en febrero, aunque la fecha de conclusión de los trabajos aún está sin definir, a falta de la definición del plan de obra.
Por lo que respecta a la cantera, en la cola de la presa, y que ya no quedará inundada, tal y como se contemplaba en el proyecto anterior, Caballero precisó que la Junta tendrá que realizar la evaluación ambiental pertinente y que el Gobierno ya está preparando su proyecto de restauración.
En concreto, el embalse tendrá una altitud máxima sobre el nivel del mar de 1.046 metros, con un desagüe en defensa contra inundaciones, que marcará el nivel normal del agua, a la cota de 1.032 metros. A este nivel la capacidad de la presa será de 44,13 hectómetros cúbicos.
El objetivo básico de esta infraestructura será el de prevenir las inundaciones, sobre todo en las poblaciones de la cuenca baja del Arlanza. Por eso, el aliviadero proyectado en la cota 1.032 metros tendrá limitado su caudal a 30 metros cúbicos por segundo, el límite de agua que debe llevar el río para evitar inundaciones en Salas de los Infantes.
Para crecidas superiores, la presa contará con un aliviadero de superficie en la cota 1.042, que permitirá controlar en un 75 por ciento la crecida de diseño del embalse.
La presidenta de la Confederación Hidrográfica del Duero, Helena Caballero, aseguró que el proyecto definitivo que hoy se presentó es la solución "óptima" para combatir inundaciones consiguiendo garantizar todos los usos que estaban previstos, con el mínimo impacto ambiental, y dentro de las directrices del Programa Agua del Ministerio de Medio Ambiente.
Según detalló, además de mejorar la defensa contra inundaciones, se garantiza el abastecimiento para 30.000 personas, como media de población, se garantiza el regadío para 6.010 hectáreas, y un caudal ambiental durante todos los meses del año, que se mejora "ostensiblemente" en el mes de noviembre, dada la "importancia truchera" del río.
Las poblaciones beneficiadas con el abastecimiento previsto son las situadas en el tramo de la cuenca del río Arlanza comprendido entre Terrazas y Palenzuela, de las provincias de Burgos y Palencia. Se trata de Castrovido, Salas de los Infantes, La Revilla, Barbadillo del Mercado, Cascajares de la Sierra, Hortigüela, Retuerta, Covarrubias, Puentedura, Tordueles, Quintanilla del Agua, Santillán, Santa Inés, Lerma, Puyales del Agua, Santa Cecilia, Tordomar, Torrepadre, Villahoz, Retortillo, Hontoria y Torquemada.
REGADÍO
Por lo que respecta al regadío, la presa tendrá una dotación de 5.000 metros cúbicos por hectárea y año, frente al máximo de 6.700 metros cúbicos por hectárea y año que fijaba el Plan Hidrológico de cuencas.
La directora técnica de la Confederación Hidrográfica del Duero, Liliana Ardiles, explicó que la reducción a 5.000 metros cúbicos se ha decidido en función de las conclusiones de dos estudios, uno procedente de la Consejería de Agricultura de la Junta, y el otro del Centro de Estudios y Experimentación de Obras Públicas.
Aseguró que ambos estudios parten de los mismos cultivos y, aunque aplican metodologías diferentes, coinciden en estimar una dotación del orden de los 5.000 metros cúbicos.
Ardiles consideró que la presa hoy presentada garantiza la satisfacción de las demandas de los habitantes de la zona y otorga una mayor seguridad a los residentes en la cuenca baja.
En cuanto a la posibilidad de que los regantes recurran la dotación que se incluye en el modificado, tal y como anunció el portavoz de la Comisión de Seguimiento de Castrovido, Dositeo Martín, la semana pasada, el director general del Agua, Jaime Palop, apuntó que el Ministerio de Medio Ambiente está acatando la legislación vigente.
"Nuestra obligación es hacer un proyecto definitivo que de respuesta y solución a los problemas que tiene planteada una Comunidad Autónoma y una cuenca. Otros tendrán que asumir la responsabilidad de las consecuencias que se deriven de recurrir un acto administrativo", declaró Palop, al tiempo que afirmó que las infraestructuras del proyecto anterior y las del modificado son "absolutamente similares", salvo algunas diferencias estructurales.
Palop recordó que la presa que inicialmente estaba prevista no llevaba un aliviadero intermedio, pero sí una "limitación legal" por regla de explotación, ya que a partir de la cota 1.37 metros no podía embalsar "ni un mililitro más" para regular agua. "Aquí parece que uno tenga un aliviadero intermedio y el otro tenga posibilidad o permiso de llegar hasta el cielo", recalcó.
Reiteró que el aliviadero que se contempla para la cota de 1.032 metros, "por motivos de seguridad", no puede tener unas compuertas. Explicó que también se resuelven así el resto de cuencas del país, como todo el plan de avenida del Segura, o la cuenca del Júcar.
Palop incidió en que sería "un sinsentido" dotarle de compuertas en un futuro a este aliviadero, y defendió esta infraestructura porque garantiza el abastecimiento de las poblaciones, de regadío y respeta el Medio Ambiente, además de proteger frente a inundaciones.
El presupuesto total de las obras de ejecución de la presa y las actuaciones complementarias para regular el caudal del Arlanza asciende a 104 millones de euros, de los que 70 irán destinados al embalse.
Las obras se iniciarán en febrero, aunque la fecha de conclusión de los trabajos aún está sin definir, a falta de la definición del plan de obra.
Por lo que respecta a la cantera, en la cola de la presa, y que ya no quedará inundada, tal y como se contemplaba en el proyecto anterior, Caballero precisó que la Junta tendrá que realizar la evaluación ambiental pertinente y que el Gobierno ya está preparando su proyecto de restauración.