benalmádena. La provincia de Málaga padece una de las mayores sequías de todos los tiempos. Debido a ello, los municipios turísticos empiezan a temer que su imagen se vea perjudicada por la pérdida de jardines y grandes zonas verdes.

Ante esta situación, el Ayuntamiento de Benalmádena ha decidido implantar una nueva técnica, denominada xerojardinería, con el objetivo de racionalizar el agua de riego en las zonas verdes que evita, en todo momento, el despilfarro.

Este sistema se está aplicando de momento en los 4.500 metros cuadrados de los alrededores de la nave de la empresa municipal de aguas Emabesa. El concejal de Medio Ambiente, Enrique Moya (GIB), explicó que la xerojardinería es una innovadora forma de crear jardines con bajo consumo de agua gracias a la eliminación del césped sobre el cual se instala una tela especial que deja pasar el agua para alimentar a los árboles pero, sin dejar crecer la hierba, y que se ornamenta con otros materiales como cortezas de pino, bolas de río de color blanco, grava de diferentes colores, así como albero y teja roja.

El edil del área señaló que aún no se ha terminado de aplicar esta técnica en toda la superficie de la zona debido a que parte del material que se necesitaba no había llegado a causa de la huelga de las canteras aunque anunció que se reiniciarán los trabajos esta misma semana y se espera que estén listos para principios del mes de febrero. La empresa que realiza estos trabajos innovadores es Progisa Servicios de Jardinería y el presupuesto de los mismos asciende a 30.000 euros.

El responsable del área de Medio Ambiente de Benalmádena señaló que la aplicación de la xerojardinería está teniendo mucho éxito pues, con ella, se ahorra el cien por cien del agua de riego en caso de que llueva y el 90 por ciento si hay sequía, "ya que estos árboles requieren de poca agua para su mantenimiento".

Debido a este éxito, el equipo de gobierno benalmadense está barajando la posibilidad de emplearla en otros parques y jardines del municipio. Benalmádena dispone de un total de 800.000 metros cuadrados de zonas verdes municipales, 8.000 árboles lineales en las calles y, con la próxima incorporación del parque Al Baytar, superará el millón de metros cuadrados. Actualmente, el mantenimiento de estos lugares cuesta alrededor de dos millones de euros al año. Sin embargo, con la aplicación de este tipo de técnicas esperan ahorrar dinero y concienciar a los ciudadanos sobre la importancia de no malgastar agua.

"Con la aplicación de técnicas como éstas esperamos ahorrar dinero en mantenimiento de zonas verdes municipales, concienciar a los ciudadanos de la utilización racional del agua, y servir de ejemplo, para que el resto de los municipios instalen técnicas de similares características", concluyó Moya.