Feragua valora el decreto antisequía aprobado hoy por el Gobierno aunque rechaza controlar los vertidos
Sáb, 11/03/2006
La Federación de Comunidades de Regantes de Andalucía (Feragua) mostró su valoración del decreto antisequía o 'plan de choque' aprobado hoy por el Consejo de Ministros, que pretende agilizar la tramitación de numerosas obras de modernización de regadíos con el objetivo de ahorrar agua para hacer frente a la escasez de lluvias.
En una nota remitida a Europa Press, el presidente de Feragua, José Fernández de Heredia, precisó que "se trata de una medida oportuna y necesaria, ya que la falta de garantía de agua puede desalentar las inversiones en modernización por parte del regadío, y este decreto puede ayudar a contrarrestar esta situación".
A pesar de la aceptación general del nuevo decreto, Feragua discrepó del papel que éste asigna a las comunidades de regantes en el control y seguimiento ambiental de los vertidos y la contaminación difusa.
Fernández de Heredia consideró que las comunidades "no están en condiciones de asumir esta función sin que la administración hídrica y medioambiental les proporcione los medios económicos adecuados para ello", aunque sí ofreció su colaboración para la promoción del código de buenas prácticas medioambientales que ayude a reducir los niveles de fitosanitarios y fertilizantes empleados, y para la formación y sensibilización de los usuarios en las técnicas de ahorro de agua.
En otro orden de cosas, Feragua valoró que con este decreto se pretende "aprovechar al máximo los fondos europeos destinados a mejorar los regadíos, cuyas obras tendrán que estar acabadas antes del 31 de diciembre de 2008". "Existe un riesgo importante de pérdidas de fondos europeos, que el decreto puede ayudar a disminuir, acelerando los trámites medioambientales y la ejecución de las obras", afirmó.
Así, y aunque el decreto se refiere a actuaciones que en su mayoría ya estaban previstas en el Plan Nacional de Regadíos y el Plan Hidrológico Nacional y por tanto apenas añade nuevos compromisos económicos, los regantes consideraron que "tiene la bondad de agilizar los trámites medioambientales de las obras de modernización", lo que "permitirá realizarlas con mayor celeridad y beneficiarse antes del ahorro de agua que éstas permitirán".
La inversión total para Andalucía contemplada por el decreto aprobado hoy se eleva a 582 millones, una parte de esta inversión la aportan los propios usuarios, "los cuales están haciendo un esfuerzo enorme para modernizarse y ahorrar agua, esfuerzo que sí está siendo correspondido por el Gobierno en materia de incentivos a la modernización, pero que no ha sido correspondido en obras hidráulicas de regulación y en el control a los nuevos regadío", afirmó Fernández de Heredia.
A su juicio, los regantes "han puesto más" que las administraciones en las resolución del déficit hídrico, "pues están invirtiendo en modernización sin tener garantizadas las dotaciones de recursos hídricos, que les permitan rentabilizar dichas inversiones, mientras que los gobiernos no han cumplido sus compromisos en la ejecución de embalses y por el incremento incontrolado de la superficie regada".
En una nota remitida a Europa Press, el presidente de Feragua, José Fernández de Heredia, precisó que "se trata de una medida oportuna y necesaria, ya que la falta de garantía de agua puede desalentar las inversiones en modernización por parte del regadío, y este decreto puede ayudar a contrarrestar esta situación".
A pesar de la aceptación general del nuevo decreto, Feragua discrepó del papel que éste asigna a las comunidades de regantes en el control y seguimiento ambiental de los vertidos y la contaminación difusa.
Fernández de Heredia consideró que las comunidades "no están en condiciones de asumir esta función sin que la administración hídrica y medioambiental les proporcione los medios económicos adecuados para ello", aunque sí ofreció su colaboración para la promoción del código de buenas prácticas medioambientales que ayude a reducir los niveles de fitosanitarios y fertilizantes empleados, y para la formación y sensibilización de los usuarios en las técnicas de ahorro de agua.
En otro orden de cosas, Feragua valoró que con este decreto se pretende "aprovechar al máximo los fondos europeos destinados a mejorar los regadíos, cuyas obras tendrán que estar acabadas antes del 31 de diciembre de 2008". "Existe un riesgo importante de pérdidas de fondos europeos, que el decreto puede ayudar a disminuir, acelerando los trámites medioambientales y la ejecución de las obras", afirmó.
Así, y aunque el decreto se refiere a actuaciones que en su mayoría ya estaban previstas en el Plan Nacional de Regadíos y el Plan Hidrológico Nacional y por tanto apenas añade nuevos compromisos económicos, los regantes consideraron que "tiene la bondad de agilizar los trámites medioambientales de las obras de modernización", lo que "permitirá realizarlas con mayor celeridad y beneficiarse antes del ahorro de agua que éstas permitirán".
La inversión total para Andalucía contemplada por el decreto aprobado hoy se eleva a 582 millones, una parte de esta inversión la aportan los propios usuarios, "los cuales están haciendo un esfuerzo enorme para modernizarse y ahorrar agua, esfuerzo que sí está siendo correspondido por el Gobierno en materia de incentivos a la modernización, pero que no ha sido correspondido en obras hidráulicas de regulación y en el control a los nuevos regadío", afirmó Fernández de Heredia.
A su juicio, los regantes "han puesto más" que las administraciones en las resolución del déficit hídrico, "pues están invirtiendo en modernización sin tener garantizadas las dotaciones de recursos hídricos, que les permitan rentabilizar dichas inversiones, mientras que los gobiernos no han cumplido sus compromisos en la ejecución de embalses y por el incremento incontrolado de la superficie regada".