El Ayuntamiento destina 2,5 millones anuales a la conservación del Manzanares
Vie, 09/06/2006
La Junta de Gobierno del Ayuntamiento de Madrid autorizó hoy la contratación del mantenimiento, conservación y explotación del río Manzanares por un importe anual de 2.489.964,23 euros, informó en rueda de prensa el alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón.
El regidor recordó que de los 82 kilómetros de longitud que tiene el río Manzanares a su paso por la Comunidad de Madrid, aproximadamente 30 corresponden al término municipal de Madrid, y que el Ayuntamiento tiene encomendada desde 1986 la labor de su mantenimiento, conservación y explotación.
Con el presupuesto mencionado se realizarán las labores de limpieza del cauce y de las riberas; el accionamiento de las compuertas según el caudal; el mantenimiento y seguimiento de la fauna avícola y piscícola, y los controles analíticos de la calidad de las aguas.
En esta partida se incluirán además el control visual del río mediante circuito cerrado de TV; la explotación del laboratorio del Centro de Investigación y Control Ecológico, con la elaboración de informes diarios y periódicos de la calidad del agua y de su evolución; y la atención de las visitas técnicas y didácticas.
Todas estas labores están encuadradas dentro del convenio firmado entre el Ayuntamiento de Madrid y la Confederación Hidrográfica del Tajo para cuidar y mantener las aguas y las orillas del río en su recorrido por el término municipal, que convirtió al consistorio en ente gestor del tramo del cauce comprendido entre la Presa de El Pardo y el límite con término municipal de Getafe.
Ruiz-Gallardón explicó que la gran demanda de agua potable y el clima, con largos periodos de sequía, obliga a establecer en la Presa de El Pardo un caudal mínimo ecológico de 0,2 metros cúbicos por segundo para mantener el curso aguas abajo en los periodos más secos, de manera que éste es el caudal de llegada del Río Manzanares a la ciudad de Madrid.
Sin embargo, agregó, a su paso por el núcleo urbano, las aguas detraídas para usos de abastecimiento vuelven a su cauce regeneradas en las depuradoras municipales situadas en su cuenca vertiente, de modo que, en periodo de sequías, el agua procedente de esas instalaciones llega a ser hasta 70 u 80 veces mayor que la aportada de forma natural por el río.
La primera estación que vierte las aguas ya depuradas es la Estación de Viveros, a la que se suman después las de La China y Butarque -3,6 y 3,5 m3/s respectivamente- y la Depuradora Sur -6 m3/s-, lo que en conjunto hace del Manzanares un río con un caudal superior a los 14 metros cúbicos por segundo.
Recordó además el alcalde que el Ayuntamiento lleva a cabo una serie de obras que impedirán el vertido al Manzanares de grandes caudales de aguas de escorrentía urbana contaminadas y sin tratar al cauce del río.
Estas obras, indicó, supondrán la construcción de más de 33 kilómetros de nuevos colectores de grandes dimensiones y de 28 nuevos estanques de tormentas que contarán con una capacidad de almacenamiento de más de 1,1 millones de metros cúbicos de agua.
El regidor recordó que de los 82 kilómetros de longitud que tiene el río Manzanares a su paso por la Comunidad de Madrid, aproximadamente 30 corresponden al término municipal de Madrid, y que el Ayuntamiento tiene encomendada desde 1986 la labor de su mantenimiento, conservación y explotación.
Con el presupuesto mencionado se realizarán las labores de limpieza del cauce y de las riberas; el accionamiento de las compuertas según el caudal; el mantenimiento y seguimiento de la fauna avícola y piscícola, y los controles analíticos de la calidad de las aguas.
En esta partida se incluirán además el control visual del río mediante circuito cerrado de TV; la explotación del laboratorio del Centro de Investigación y Control Ecológico, con la elaboración de informes diarios y periódicos de la calidad del agua y de su evolución; y la atención de las visitas técnicas y didácticas.
Todas estas labores están encuadradas dentro del convenio firmado entre el Ayuntamiento de Madrid y la Confederación Hidrográfica del Tajo para cuidar y mantener las aguas y las orillas del río en su recorrido por el término municipal, que convirtió al consistorio en ente gestor del tramo del cauce comprendido entre la Presa de El Pardo y el límite con término municipal de Getafe.
Ruiz-Gallardón explicó que la gran demanda de agua potable y el clima, con largos periodos de sequía, obliga a establecer en la Presa de El Pardo un caudal mínimo ecológico de 0,2 metros cúbicos por segundo para mantener el curso aguas abajo en los periodos más secos, de manera que éste es el caudal de llegada del Río Manzanares a la ciudad de Madrid.
Sin embargo, agregó, a su paso por el núcleo urbano, las aguas detraídas para usos de abastecimiento vuelven a su cauce regeneradas en las depuradoras municipales situadas en su cuenca vertiente, de modo que, en periodo de sequías, el agua procedente de esas instalaciones llega a ser hasta 70 u 80 veces mayor que la aportada de forma natural por el río.
La primera estación que vierte las aguas ya depuradas es la Estación de Viveros, a la que se suman después las de La China y Butarque -3,6 y 3,5 m3/s respectivamente- y la Depuradora Sur -6 m3/s-, lo que en conjunto hace del Manzanares un río con un caudal superior a los 14 metros cúbicos por segundo.
Recordó además el alcalde que el Ayuntamiento lleva a cabo una serie de obras que impedirán el vertido al Manzanares de grandes caudales de aguas de escorrentía urbana contaminadas y sin tratar al cauce del río.
Estas obras, indicó, supondrán la construcción de más de 33 kilómetros de nuevos colectores de grandes dimensiones y de 28 nuevos estanques de tormentas que contarán con una capacidad de almacenamiento de más de 1,1 millones de metros cúbicos de agua.