La temperatura del mar Mediterráneo subió ocho grados en el mes de julio
Sáb, 05/08/2006
> La ESA dedica este viernes su «imagen de la semana» de la Tierra desde el espacio, tomada por el satélite Envisat, a las islas Baleares y a la costa catalana y valenciana y añade dos «mapas de calor», procesadas por el sistema Medspiration. La Agencia Espacial Europea recuerda que en julio, la costa española estuvo inundada por medusas, «forzando a los turistas a permanecer fuera del agua» y precisa que aunque no se conoce la causa última de la proliferación de esos animales, se cree que el factor más importante es la temperatura del agua. El proyecto Medspiration de la ESA, que obtiene las temperaturas de la superficie del mar Mediterráneo en un área de 2.965.500 kilómetros cuadrados, ha detectado el incremento del calor en toda esa área, que ha sido drástico entre el 8 y el 26 de julio. El 8 de julio, en las islas Baleares, la temperatura del agua más cálida correspondía a la costa de la capital, Palma de Mallorca, donde estaba a unos 26 grados. El 26 de julio, el agua de todas las Baleares superaba los 30 grados, pero en puntos de la costa de Tarragona y Gerona, donde dos semanas antes estaban a unos 22 grados, ese día también rozaban los 30. Tormenta en Baleares Al menos tres barcos de recreo se hundieron este viernes en Baleares debido a una fuerte tormenta que se registró de madrugada en el archipiélago que dejó, también, una docena de incidentes en el mar. A pesar de la espectacularidad del suceso, no ha habido que lamentar víctimas. Los seis ocupantes del Spiritu Libero fueron rescatados ilesos en la madrugada del jueves, tras naufragar este yate en aguas próximas a la Cala Sant Vicenç (Ibiza) debido a una vía de agua que lo empujó hacia unos escollos y provocó, finalmente, su hundimiento. El tripulante de otra embarcación tuvo que ser atendido al recibir un golpe en la cabeza a consecuencia del oleaje intenso que se desató en el canal entre Ibiza y Formentera. Entre la medianoche del jueves y las seis de la mañana del viernes se registró en Baleares una fuerte tormenta con aparato eléctrico que se saldó con la caída de hasta 1.500 rayos en un radio de 90 kilómetros. El viento y la lluvia acompañaron el temporal en algunas áreas del litoral, donde se registró más de una docena de incidencias, en su mayoría a embarcaciones.