Expo 2008 .- Zaragoza acoge el III Congreso ICITEMA, bajo el lema 'Agua, Biodiversidad e Ingeniería'
Vie, 20/10/2006
La capital aragonesa acogerá desde el próximo 25 de octubre el III Congreso de Ingeniería Civil, Territorio y Medio Ambiente (ICITEMA), bajo el lema 'Agua, Biodiversidad e Ingeniería', donde participarán más de 500 profesionales, que analizarán durante tres días la influencia del medio hídrico en las propuestas y prácticas de la ingeniería civil.
Zaragoza ha sido la sede escogida para la celebración de este congreso como una forma de fijar la vista en la Exposición Internacional que acogerá la ciudad en 2008. Ambos eventos comparten el eje central de su contenido, el agua y el desarrollo sostenible. La ciudad se posicionará en 2008 como capital mundial del agua reuniendo en torno al Ebro cientos de experiencias e iniciativas sostenibles.
Así, la presentación del III Congreso de Ingeniería Civil, Territorio y Medio Ambiente fue conducida hoy por el presidente del Comité Organizador del Congreso y presidente de Expoagua, Roque Gistau, acompañado por el decano de la Demarcación de Aragón del Colegio de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos, José Ocejo; el secretario general del Congreso, José Rubió; y el presidente del Colegio de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos, Edelmiro Rúa.
Todos ellos coincidieron en la necesidad de los profesionales del sector de respetar criterios medioambientales a la hora de abordar sus proyectos. La ingeniería, sobre todo la civil, tan ligada al territorio, se enfrenta a un futuro marcado por la necesidad de aguzar el ingenio, aplicar sus conocimientos y buscar las soluciones más eficientes y las infraestructuras que mejor servicio ofrecen con menores costes ambientales, sociales y económicos. Es decir, a buscar el desarrollo sostenible.
El presidente del Colegio de Ingenieros de Caminos, Edelmiro Rúa, destacó que la labor de los ingenieros de caminos también consiste en tener en cuenta el impacto medioambiental y, por ello, el Colegio cuenta con una comisión de Medio Ambiente. "A pesar de lo que se pueda pensar de los ingenieros de caminos, como depredadores del medio ambiente, ellos tienen en cuenta el impacto que producen en el territorio y en la sociedad", indicó.
Por su parte, el decano de la Demarcación de Aragón, José Ocejo, señaló que el Congreso es para Zaragoza "otro granito más sobre la cuestión del agua y la biodiversidad".
Roque Gistau insistió en la importancia de la combinación de los ingenieros y los arquitectos en los trabajos del recinto de meandro de Ranillas, "un terreno complicado" por ser un terreno "reciente, permeable e inundable".
Asimismo, el presidente de Expoagua hizo hincapié en la decisión de "haber hecho compatible la integración de la tierra y el agua" en el recinto de la Muestra, ya que "podríamos haber construido un muro de contención" para que los terrenos no se inundaran por las aguas del río Ebro.
Por último, el secretario general del Congreso, José Rubió, apuntó que la Exposición de Zaragoza 2008 "es un evento puntual" y, por ello, "hay que realizar una valoración social" de la misma y ver cuál es la calidad que recibirá la ciudad gracias a la Muestra, como "la mejora de todo el tramo urbano". Por otro lado, Edelmiro Rúa señaló que tanto el Congreso como la Expo deben realizar "una gestión integral del agua y la energía" para llegar a un futuro mejor.
EL CONGRESO
Este III Congreso analizará, del 25 al 27 de octubre, las fórmulas óptimas que contribuyan a que las actuaciones de los ingenieros de caminos alcancen las soluciones más eficientes para el servicio de la sociedad siguiendo parámetros sostenibles.
Frente a la generalidad de los contenidos de los congresos celebrados anteriormente en febrero de 2002 en Madrid, y en septiembre de 2004 en Santiago de Compostela, este III Congreso utiliza como referencia el medio fluvial y costero, en línea con la Directiva Marco del Agua y con las nuevas sensibilidades hasta el litoral, para abarcar también la transversalidad de las redes de transporte y el medio hídrico, los bordes fluviales y litorales de las ciudades, y las respuestas de la ingeniería a las nuevas demandas de la sociedad.
Con alrededor de 200 comunicaciones y más de 500 profesionales inscritos, el Congreso, organizado por el Colegio de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos y la Asociación de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos, se convierte en marco inigualable para poner de manifiesto la trascendencia ambiental y territorial que tienen las obras de ingeniería civil.
AGUA, DIVERSIDAD E INGENIERÍA
La atención al medio hídrico para la conservación de los recursos naturales y culturales se apunta como uno de los objetivos fundamentales del III Congreso de Ingeniería Civil, Territorio y Medio Ambiente. El agua, como patrimonio común, como bien público, obliga a tener en cuenta para su gestión la consideración de bien e carácter social y económico ligado a su escasez.
Durante el siglo XX, el patrimonio de obras hidráulicas creció en España de forma espectacular contribuyendo en buena medida al desarrollo del país: obras para el suministro de agua, para el riego, para el aprovechamiento energético y para la protección de personas y bienes frente a las inundaciones. Así, gran parte del territorio ha conseguido condiciones de habitabilidad y confortabilidad, que hay que mantener y ampliar, ya que en episodios de sequía o escaseces es cuando se pone de manifiesto su fragilidad.
Los nuevos valores y convicciones relativos al agua que emergieron con fuerza en la sociedad a finales del siglo XX, la conservación de los recursos hídricos, la protección de la diversidad biológica, y una mayor sensibilidad de la administración hidráulica hacia los temas ambientales marcan las propuestas y prácticas a las que tiene que hacer frente la ingeniería civil actual.
La ingeniería, sobre todo la civil, no se entiende separada de su soporte físico, el territorio. La permanente y necesaria convivencia entre las infraestructuras, la población y el territorio hace que, en la ejecución de los proyectos y obras, se tengan muy en cuenta la inclusión de parámetros ambientales. Esto obliga a los ingenieros a aguzar el ingenio y buscar el desarrollo sostenible en sus trabajos.
Este III Congreso ICITEMA intenta destacar tanto las nuevas como las tradicionales aproximaciones al agua que deben desarrollarse apoyándose en los instrumentos propios de la ingeniería de este tiempo: estudios, planes, proyectos, obras y gestión.
Se abordarán, además, los problemas, oportunidades y logros de las comunidades humanas de todas partes del mundo en materia de agua poniendo de manifiesto cómo el agua, vida, materia prima, energía, es un camino de unión entre pueblos y regiones, un símbolo de universalidad.
Esta cita de los profesionales de la ingeniería, protagonistas en la transformación que la ciudad experimenta de cara a la Muestra Internacional de 2008, será el foro idóneo para que, a través de conferencias, ponencias, comunicaciones y debates, las actuaciones de los ingenieros alcancen las soluciones más eficientes.
Zaragoza ha sido la sede escogida para la celebración de este congreso como una forma de fijar la vista en la Exposición Internacional que acogerá la ciudad en 2008. Ambos eventos comparten el eje central de su contenido, el agua y el desarrollo sostenible. La ciudad se posicionará en 2008 como capital mundial del agua reuniendo en torno al Ebro cientos de experiencias e iniciativas sostenibles.
Así, la presentación del III Congreso de Ingeniería Civil, Territorio y Medio Ambiente fue conducida hoy por el presidente del Comité Organizador del Congreso y presidente de Expoagua, Roque Gistau, acompañado por el decano de la Demarcación de Aragón del Colegio de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos, José Ocejo; el secretario general del Congreso, José Rubió; y el presidente del Colegio de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos, Edelmiro Rúa.
Todos ellos coincidieron en la necesidad de los profesionales del sector de respetar criterios medioambientales a la hora de abordar sus proyectos. La ingeniería, sobre todo la civil, tan ligada al territorio, se enfrenta a un futuro marcado por la necesidad de aguzar el ingenio, aplicar sus conocimientos y buscar las soluciones más eficientes y las infraestructuras que mejor servicio ofrecen con menores costes ambientales, sociales y económicos. Es decir, a buscar el desarrollo sostenible.
El presidente del Colegio de Ingenieros de Caminos, Edelmiro Rúa, destacó que la labor de los ingenieros de caminos también consiste en tener en cuenta el impacto medioambiental y, por ello, el Colegio cuenta con una comisión de Medio Ambiente. "A pesar de lo que se pueda pensar de los ingenieros de caminos, como depredadores del medio ambiente, ellos tienen en cuenta el impacto que producen en el territorio y en la sociedad", indicó.
Por su parte, el decano de la Demarcación de Aragón, José Ocejo, señaló que el Congreso es para Zaragoza "otro granito más sobre la cuestión del agua y la biodiversidad".
Roque Gistau insistió en la importancia de la combinación de los ingenieros y los arquitectos en los trabajos del recinto de meandro de Ranillas, "un terreno complicado" por ser un terreno "reciente, permeable e inundable".
Asimismo, el presidente de Expoagua hizo hincapié en la decisión de "haber hecho compatible la integración de la tierra y el agua" en el recinto de la Muestra, ya que "podríamos haber construido un muro de contención" para que los terrenos no se inundaran por las aguas del río Ebro.
Por último, el secretario general del Congreso, José Rubió, apuntó que la Exposición de Zaragoza 2008 "es un evento puntual" y, por ello, "hay que realizar una valoración social" de la misma y ver cuál es la calidad que recibirá la ciudad gracias a la Muestra, como "la mejora de todo el tramo urbano". Por otro lado, Edelmiro Rúa señaló que tanto el Congreso como la Expo deben realizar "una gestión integral del agua y la energía" para llegar a un futuro mejor.
EL CONGRESO
Este III Congreso analizará, del 25 al 27 de octubre, las fórmulas óptimas que contribuyan a que las actuaciones de los ingenieros de caminos alcancen las soluciones más eficientes para el servicio de la sociedad siguiendo parámetros sostenibles.
Frente a la generalidad de los contenidos de los congresos celebrados anteriormente en febrero de 2002 en Madrid, y en septiembre de 2004 en Santiago de Compostela, este III Congreso utiliza como referencia el medio fluvial y costero, en línea con la Directiva Marco del Agua y con las nuevas sensibilidades hasta el litoral, para abarcar también la transversalidad de las redes de transporte y el medio hídrico, los bordes fluviales y litorales de las ciudades, y las respuestas de la ingeniería a las nuevas demandas de la sociedad.
Con alrededor de 200 comunicaciones y más de 500 profesionales inscritos, el Congreso, organizado por el Colegio de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos y la Asociación de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos, se convierte en marco inigualable para poner de manifiesto la trascendencia ambiental y territorial que tienen las obras de ingeniería civil.
AGUA, DIVERSIDAD E INGENIERÍA
La atención al medio hídrico para la conservación de los recursos naturales y culturales se apunta como uno de los objetivos fundamentales del III Congreso de Ingeniería Civil, Territorio y Medio Ambiente. El agua, como patrimonio común, como bien público, obliga a tener en cuenta para su gestión la consideración de bien e carácter social y económico ligado a su escasez.
Durante el siglo XX, el patrimonio de obras hidráulicas creció en España de forma espectacular contribuyendo en buena medida al desarrollo del país: obras para el suministro de agua, para el riego, para el aprovechamiento energético y para la protección de personas y bienes frente a las inundaciones. Así, gran parte del territorio ha conseguido condiciones de habitabilidad y confortabilidad, que hay que mantener y ampliar, ya que en episodios de sequía o escaseces es cuando se pone de manifiesto su fragilidad.
Los nuevos valores y convicciones relativos al agua que emergieron con fuerza en la sociedad a finales del siglo XX, la conservación de los recursos hídricos, la protección de la diversidad biológica, y una mayor sensibilidad de la administración hidráulica hacia los temas ambientales marcan las propuestas y prácticas a las que tiene que hacer frente la ingeniería civil actual.
La ingeniería, sobre todo la civil, no se entiende separada de su soporte físico, el territorio. La permanente y necesaria convivencia entre las infraestructuras, la población y el territorio hace que, en la ejecución de los proyectos y obras, se tengan muy en cuenta la inclusión de parámetros ambientales. Esto obliga a los ingenieros a aguzar el ingenio y buscar el desarrollo sostenible en sus trabajos.
Este III Congreso ICITEMA intenta destacar tanto las nuevas como las tradicionales aproximaciones al agua que deben desarrollarse apoyándose en los instrumentos propios de la ingeniería de este tiempo: estudios, planes, proyectos, obras y gestión.
Se abordarán, además, los problemas, oportunidades y logros de las comunidades humanas de todas partes del mundo en materia de agua poniendo de manifiesto cómo el agua, vida, materia prima, energía, es un camino de unión entre pueblos y regiones, un símbolo de universalidad.
Esta cita de los profesionales de la ingeniería, protagonistas en la transformación que la ciudad experimenta de cara a la Muestra Internacional de 2008, será el foro idóneo para que, a través de conferencias, ponencias, comunicaciones y debates, las actuaciones de los ingenieros alcancen las soluciones más eficientes.