'Normalidad vigilante' es la expresión que utilizan los responsables de los tres consorcios de agua existentes en Gipuzkoa, ante la escasez de agua que presentan los embalses del territorio. Por el momento, y a la espera del temporal que podría llegar este fin de semana, descartan intervenciones generalizadas como las que se han llevado a cabo en Bizkaia, donde se ha prohibido regar parques y jardines. Las conexiones entre las reservas de superficie, así como los recursos subterráneos, están sirviendo para minimizar las carencias. La situación más crítica es la que se vive en Goierri, donde el embalse de Arriaran ofrece estas últimas semanas una imagen desoladora a los paseantes que se acercan hasta allí. No en vano, la presa se encuentra por debajo de una cuarta parte de su capacidad, en un 24,1%. Sin embargo, la 'preocupante' situación se ha paliado echando mano de otros recursos hidrográficos de la zona, según informa Josetxo Saizar, director de Explotación del Consorcio de Aguas de Gipuzkoa. Las conexiones entre diferentes embalses de la geografía guipuzcoana, así como la existencia de reservas secundarias de agua, está sirviendo para solventar las carencias del momento. En Arriaran, en concreto, los responsables del consorcio decidieron activar el enlace existente con Lareo para abastecer a los 36.000 habitantes que cubre la presa de Beasain. Además, las aguas subterráneas de Makinetxe, en el barrio beasaindarra de Salbatore, también se están llevando a la planta depuradora de Arriaran. Sin embargo, el Ayuntamiento de Beasain ya ha comenzado a tomar cartas en el asunto. El miércoles hizo un llamamiento a los ciudadanos para que procuren reducir el consumo de agua, a la vez que limitaba los días de riego para la limpieza de las calles del municipio. 'la clave es la lluvia' Los embalses de Barrendiola, en Legazpi, y el de Ibaieder, en Azkoitia, también están intercambiando agua, gracias a la tubería existente entre ambos. El primero se encuentra al 52,5% de su capacidad, mientras que el segundo, al 33,1%. En el futuro, se prevé que Barrendiola también pueda abastecer a Ormaiztegi, gracias a un nuevo canal subterráneo, en caso de que Arriaran -su surtidor habitual- se halle bajo mínimos. Saizar explica que estas redes hidrográficas permiten equilibrar un panorama que no ha llegado a ser grave. 'Todavía no hemos planteado medidas restrictivas. Esto puede cambiar de un día para otro, porque la clave es la lluvia. Estamos vigilantes', añade el experto. En las localidades del consorcio Añarbeko Urak y Txingudi, la situación es un poco mejor que en el resto. 'Normalidad vigilante', pero en ningún caso 'crítica'. Así definen los responsables de ambas zonas hidrográficas, Enrique Noain y Miguel Ángel Muñagorri, respectivamente. El embalse de Añarbe, que presenta un llenado menor al 68% de su capacidad, se encuentra seis puntos por debajo de la situación que presentaba hace un año (74%) por estas fechas. Noain advierte de que 'el panorama no es bueno', ya que el pasado mes dejó un 57% menos de precipitaciones que un diciembre medio. En junio de 2006, los responsables de Servicio de Txingudi ya comenzaron a tomar medidas, al ver que el año pasado era 'inusualmente seco'. Las aguas subterráneas de Jaizkibel han evitado abrir demasiado el grifo del embalse de Txingudi, por lo que se encuentra en un aceptable nivel del 86%. Ante este baile de datos, los guipuzcoanos miran al cielo en busca de consuelo. Según informó el director de la Agencia Vasca de Meteorología, Adolfo Morais, se espera un cambio de tiempo este fin de semana, con la entrada de un frente que dejará precipitaciones. Con la 'cautela' que supone realizar un pronóstico más a largo plazo, durante la semana que viene la lluvia y la nieve podrían visitar el territorio en cantidades 'importantes'. 'El cambio parece seguro, aunque las precipitaciones pueden variar', matizó Morais.
Los meteorólogos anuncian un cambio de tiempo que traerá lluvia y que podría servir para que la situación mejore
Los reponsables de la gestión del agua descartan por el momento tomar medidas restrictivas
'Optimización y prudencia' La amenaza de sequía no pasó desapercibida en la visita de la ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, a las obras del embalse de Ibiur. Incluso un canal autonómico de Castilla-La Mancha se desplazó hasta Baliarrain para realizar las pertinentes preguntas a la titular de Medio Ambiente. Según anunció Narbona, la Confederación Hidrográfica del Norte y la del Ebro ha planteado a la CAV los planes de gestión de sequías y los parámetros necesarios para el seguimiento de los embalses y el establecimiento de medidas excepcionales. 'En este caso, se ha autorizado la posibilidad de utilizar aguas subterráneas', indicó. La ministra insistió en la necesidad de 'optimizar' las infraestructuras existentes y de llevar a cabo una gestión 'prudente' de los recursos, y defendió las restricciones 'en los usos no esenciales del agua'. 'Con estas medidas podemos seguir garantizando el abastecimiento. Otra cosa sería si no hubiera lluvias en la próxima primavera. Estaríamos en una situación más difícil, pero no podemos olvidar que en el País Vasco existen unos acuíferos muy importantes. Si se hace una gestión prudente podemos estar tranquilos', reiteró. >j.i.
Al detalle l Ibiur. El futuro embalse estará situado en el municipio de Baliarrain. Abastecerá a una población cercana a 60.000 habitantes en Tolosaldea. l Material. Para contruirlo, se están utilizando 200.000 metros cúbicos de hormigón y siete kilómetros de tuberías. l Capacidad. El embalse tendrá una longitud en su parte alta de 220 metros y una altura sobre el cauce de 63 metros, regulará un caudal de 250 litros por segundo. la cifra 37 l Campos de fútbol. Es la superficie que ocupará el embalse de Ibiur cuando se complete su llenado. l Localidades beneficiadas. Son doce en total: Ikaztegieta, Alegi, Altzo, Tolosa, Ibarra, Anoeta, Irura, Villabona, Asteasu, Zizurkil, Aduna y Andoain. situación de presas Aixola 67,15% Barrendiola 52,5% Urkulu 54,65% Lareo 82,8% Ibaieder 33,1% Arriaran 24,1% Txingudi 67,59% Añarbe 86%