Los regantes advierten de que la depuradora podría dejarles sin agua
Vie, 27/04/2007
script src="http://www.mynewsonline.com/cgi-bin/webnews.exe?order=ABE200704271054&from=C220A017&key=jOYrVMjp9wCWcqwrnMAV3U4giYEM"> Tres comunidades de regantes egabrenses podrían quedarse sin agua una vez que entre en funcionamiento la nueva depuradora, y, por este motivo, han presentado por escrito una serie
FELIPE OSUNA
CABRA. Tres comunidades de regantes egabrenses podrían quedarse sin agua una vez que entre en funcionamiento la nueva depuradora, y, por este motivo, han presentado por escrito una serie de quejas al Ayuntamiento.
Ante la confusión generada, José Luis Granados, presidente de la comunidad de «Las Islas», manifestó que el Consistorio, a día de hoy, no les ha comunicado nada concreto sobre el futuro de sus regadíos.
Hasta ahora, todas las aguas residuales se vierten al río Cabra. En el momento que la depuradora comience su actividad, las aguas serán reconducidas hasta las instalaciones. Por este motivo, la acequia de los regantes sólo se abastecerá del agua residual que mane de los distintos arroyos o fuentes que vierten al río Cabra, «algo que es totalmente insuficiente para abastecer alrededor de 200 hectáreas de huerta de las que dependen económicamente unas 150 familias».
Los regantes también denunciaron el problema del colector de aguas pluviales del polígono Mantón de Manila, que vierte sus aguas fuera de un cauce fluvial, provocando importantes a daños un olivar. En caso de lluvia torrencial, esa falta de encauzamiento podría provocar la inundación de las huertas aledañas al desagüe.
FELIPE OSUNA
CABRA. Tres comunidades de regantes egabrenses podrían quedarse sin agua una vez que entre en funcionamiento la nueva depuradora, y, por este motivo, han presentado por escrito una serie de quejas al Ayuntamiento.
Ante la confusión generada, José Luis Granados, presidente de la comunidad de «Las Islas», manifestó que el Consistorio, a día de hoy, no les ha comunicado nada concreto sobre el futuro de sus regadíos.
Hasta ahora, todas las aguas residuales se vierten al río Cabra. En el momento que la depuradora comience su actividad, las aguas serán reconducidas hasta las instalaciones. Por este motivo, la acequia de los regantes sólo se abastecerá del agua residual que mane de los distintos arroyos o fuentes que vierten al río Cabra, «algo que es totalmente insuficiente para abastecer alrededor de 200 hectáreas de huerta de las que dependen económicamente unas 150 familias».
Los regantes también denunciaron el problema del colector de aguas pluviales del polígono Mantón de Manila, que vierte sus aguas fuera de un cauce fluvial, provocando importantes a daños un olivar. En caso de lluvia torrencial, esa falta de encauzamiento podría provocar la inundación de las huertas aledañas al desagüe.