La evaporación es una pérdida copiosa y constante del agua
Lun, 04/06/2007
De todas las constantes del tiempo meteorológico, las de lluvia y temperaturas son las únicas de las que informan los medios, por ser las que más interesan al público en general. Sin embargo, existen componentes (evaporación, presión atmosférica, humedad, niebla, rocío...etc.) que son igualmente importantes para nuestro bienestar y salud. En esta ocasión me referiré a la evaporación, de la voluminosa y constante pérdida de agua a nivel diario. De otros componentes del tiempo meteorológico me ocuparé más adelante.La evaporación es la conversión molecular de un líquido al estado gaseoso. Es el inicio del eterno ciclo del agua en al Tierra: evaporación, condensación en forma de nube y precipitación (como lluvia, nieve, granizo o rocío), con el poderosísimo 'motor' del Sol actuando en el inmenso 'vehículo distribuidor' de la Atmósfera.En primer lugar, debe tenerse presente que la evaporación es un fenómeno constante, incluso en días de lluvia, Se produce (y registra en aparatos meteorológicos al efecto), aunque sean unas décimas de litro por metro cuadrado de superficie referencial.El grado de evaporación depende de dos factores: temperatura y viento: es más elevado cuando éstos actúan conjuntamente. En nuestra comarca se aprecia muy bien la intensidad de la evaporación en la ropa tendida a secar, que con viento de levante y en invierno, tarda en secarse más de un día, mientras que con poniente y en verano, se seca en un santiamén.Para apreciar la importancia que tiene la evaporación comparemos más adelante su volumen con el agua que aportan las precipitaciones.En Algeciras, la media estadística anual de evaporación diaria es de 3,1 litros por metro cuadrado (1.123 litros en 365 días) mientras que la media diaria de lluvia es de 2,5 litros (921 litros en 365 días). Resulta evidente el déficit hidrológico en años normales que no sean de acusada pluviometría o de intensa sequía. El récord absoluto de evaporación en Algeciras en un día es de 18,6 litros por metro cuadrado; ocurrió el 5 de julio de 1994. Fue equivalente a 186.000 litros de agua sobre el terreno de un campo de fútbol.Como ejemplo del predominio de la evaporación sobre las precipitaciones, considérese que en el año meteorológico 2005/2006 que finalizó el 30 de septiembre, el total de la lluvia acumulada en Algeciras fue de 810 litros por metro cuadrado, y el de evaporación de 1.246 litros, es decir, la evaporación tuvo un superávit del 54 por ciento sobre lo que llovió. Como se puede apreciar, la evaporación, aunque inapreciable e invisible, es muy voluminosa y decisiva para el equilibrio hídrológico local y mundial.La evaporación -a la que me gusta llamar 'lluvia inversa', porque realmente lo es-, en la mayoría de los países del mundo también supera cada año al volumen de agua caída como lluvia, nieve o granizo. Se trata de un fenómeno meteorológico constante. Tanto es así que muchas veces, si la lluvia de un día ha sido poco considerable, los charcos se secan al día siguiente. Naturalmente, donde no haya agua la evaporación es sólo potencial, pero no así en en el mar, embalses, ríos, lagunas y piscinas.Tanto las medidas de la lluvia como los de la evaporación son relativas a un metro cuadrado referencial del lugar donde se realizan. Para la lluvia, el aparato de medición no tiene que ser un receptáculo de un metro cuadrado; ni un gran depósito lleno de agua para al evaporación; el receptáculo de la lluvia, o el depósito para la evaporación (ver foto), son pequeños y proporcionados al equivalente de un metro cuadrado.