Paralizan las obras del embalse de Lechago para exigir compensaciones
Mié, 22/08/2007
Medio millar de personas, según los organizadores, paralizaron en la mañana de ayer las obras del embalse de Lechago, en la comarca turolense de Calamocha, para exigir a la Administración que invierta en obras de mejora de la zona los 14 millones de euros "prometidos" como compensación por la construcción de la presa.
El pantano no inunda la localidad, pero anega toda su huerta y entraña un continuo trasiego de maquinaria pesada que deteriora continuamente el casco urbano y las condiciones de vida de sus habitantes y residentes temporales. La situación se ve agravada por las obras de construcción de la A-23 (autovía Mudéjar) y las de acondicionamiento de la línea férrea entre Zaragoza y Teruel, dos infraestructuras que discurren cerca del núcleo.
Los manifestantes, vecinos y veraneantes de los pueblos de Lechago, Luco de Jiloca y Navarrete del Río, interrumpieron los trabajos por espacio de media hora, tras protagonizar escenas de tensión con los guardias civiles que vigilaban los accesos al pantano.
PLAN DE RESTITUCIÓN "Estamos hartos", manifestó ayer Juan Antonio Planas, de la asociación Amigos de Lechago, que convocó la concentración para protestar por el hecho de que, cuatro años después de iniciarse las obras del embalse en el cauce del río Pancrudo, "todavía no se ha llevado a cabo el plan de restitución" acordado por la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE). Los manifestantes, que llevaban una gran pancarta con el lema Restituciones ¡ya! , dirigieron asimismo sus críticas al Ministerio de Medio Ambiente y al Gobierno de Aragón, al que acusan de "pasividad" ante los "incumplimientos" de las instituciones.
Las mejoras exigidas por los vecinos de la zona incluyen la renovación de la red de abastecimiento de agua, la pavimentación de calles y accesos y la instalación de un nuevo alumbrado público.
Sin embargo, el presidente de Amigos de Lechago, Pedro Roche, leyó a los concentrados una carta, enviada el pasado 8 de agosto a la ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, en la que se denunciaba que no se ha llevado a cabo ninguna de las restituciones previstas a cambio de las expropiaciones y los perjuicios ecológicos y económicos causados por el embalse. Roche subrayó además que ninguna de las actuaciones está presupuestada, informa Efe .
Por otro lado, Amigos de Lechago se niega a reconocer como compensación los 200.000 euros aprobados recientemente por el Congreso, a iniciativa del diputado de Chunta Aragonesista José Antonio Labordeta. "Ese dinero va destinado a paliar los daños causados por el pantano, no a obras de mejora en los tres pueblos afectados", señaló Juan Antonio Planas.
Tras paralizar los trabajos en la presa, los manifestantes se dirigieron a Calamocha, cuyo alcalde se hallaba en la protesta, y depositaron una denuncia por las molestias y daños causados por los camiones de las obras, que se ven obligados a atravesar a diario el casco urbano de Lechago.
ASAMBLEA Por la tarde, los afectados se reunieron en asamblea y acordaron manifestarse en Zaragoza el 29 de septiembre y aprovechar la inauguración del tramo de autovía Romanos-Calamocha, previsto para febrero del 2008, para volver a movilizarse. Asimismo, aprobaron dirigirse a la Comisión de Derechos Humanos de las Cortes de Aragón para exponer su caso y enviar sendas cartas a los responsables de las instituciones concernidas para que los 14 millones del plan de restitución se incluyan cuanto antes en los presupuestos del Estado.
Lechago mantiene una larga lucha contra el embalse que se construye en su término, una infraestructura hidráulica planificada en 1913 para mejorar los regadíos del río Jiloca a su paso por la cercana comarca de Calatayud.
El pantano no inunda la localidad, pero anega toda su huerta y entraña un continuo trasiego de maquinaria pesada que deteriora continuamente el casco urbano y las condiciones de vida de sus habitantes y residentes temporales. La situación se ve agravada por las obras de construcción de la A-23 (autovía Mudéjar) y las de acondicionamiento de la línea férrea entre Zaragoza y Teruel, dos infraestructuras que discurren cerca del núcleo.
Los manifestantes, vecinos y veraneantes de los pueblos de Lechago, Luco de Jiloca y Navarrete del Río, interrumpieron los trabajos por espacio de media hora, tras protagonizar escenas de tensión con los guardias civiles que vigilaban los accesos al pantano.
PLAN DE RESTITUCIÓN "Estamos hartos", manifestó ayer Juan Antonio Planas, de la asociación Amigos de Lechago, que convocó la concentración para protestar por el hecho de que, cuatro años después de iniciarse las obras del embalse en el cauce del río Pancrudo, "todavía no se ha llevado a cabo el plan de restitución" acordado por la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE). Los manifestantes, que llevaban una gran pancarta con el lema Restituciones ¡ya! , dirigieron asimismo sus críticas al Ministerio de Medio Ambiente y al Gobierno de Aragón, al que acusan de "pasividad" ante los "incumplimientos" de las instituciones.
Las mejoras exigidas por los vecinos de la zona incluyen la renovación de la red de abastecimiento de agua, la pavimentación de calles y accesos y la instalación de un nuevo alumbrado público.
Sin embargo, el presidente de Amigos de Lechago, Pedro Roche, leyó a los concentrados una carta, enviada el pasado 8 de agosto a la ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, en la que se denunciaba que no se ha llevado a cabo ninguna de las restituciones previstas a cambio de las expropiaciones y los perjuicios ecológicos y económicos causados por el embalse. Roche subrayó además que ninguna de las actuaciones está presupuestada, informa Efe .
Por otro lado, Amigos de Lechago se niega a reconocer como compensación los 200.000 euros aprobados recientemente por el Congreso, a iniciativa del diputado de Chunta Aragonesista José Antonio Labordeta. "Ese dinero va destinado a paliar los daños causados por el pantano, no a obras de mejora en los tres pueblos afectados", señaló Juan Antonio Planas.
Tras paralizar los trabajos en la presa, los manifestantes se dirigieron a Calamocha, cuyo alcalde se hallaba en la protesta, y depositaron una denuncia por las molestias y daños causados por los camiones de las obras, que se ven obligados a atravesar a diario el casco urbano de Lechago.
ASAMBLEA Por la tarde, los afectados se reunieron en asamblea y acordaron manifestarse en Zaragoza el 29 de septiembre y aprovechar la inauguración del tramo de autovía Romanos-Calamocha, previsto para febrero del 2008, para volver a movilizarse. Asimismo, aprobaron dirigirse a la Comisión de Derechos Humanos de las Cortes de Aragón para exponer su caso y enviar sendas cartas a los responsables de las instituciones concernidas para que los 14 millones del plan de restitución se incluyan cuanto antes en los presupuestos del Estado.
Lechago mantiene una larga lucha contra el embalse que se construye en su término, una infraestructura hidráulica planificada en 1913 para mejorar los regadíos del río Jiloca a su paso por la cercana comarca de Calatayud.