El presidente de CiU, Artur Mas, ha exigido hoy al presidente de la Generalitat, José Montilla, y al conseller de Medio Ambiente, Francesc Baltasar, que desmientan "oficialmente" que la Generalitat tenga todo dispuesto para trasvasar agua desde el río Segre hasta el área metropolitana de Barcelona.
Mas ha asegurado que fuentes de "fiabilidad contratada" han confirmado a CiU que después de las elecciones comenzará a tenderse una tubería que captará agua del río Segre a su paso por la Cerdanya y la llevará hasta el sistema Ter-Llobregat, pasando antes por la vía de servicio del túnel del Cadí. El departamento de Medio Ambiente, por su parte, ha desmentido que exista ese proyecto.
El líder convergente exige el desmentido porque así "estará claro que la Generalitat da marcha atrás al proyecto, que, según hemos sabido, está listo para empezar a ejecutarse después del día 9".
A su juicio, si el desmentido llega será "una buena noticia porque implicará que se olvidan de la idea de hacer ese trasvase al menos por un tiempo".
Mas ha recordado que el gobierno se comprometió "hace mucho tiempo" a "no tocar ni una gota de agua de la cuenca del Ebro".
El Segre, ha recordado Mas, "es parte de esa cuenca y, por tanto, si el trasvase se ejecuta estaríamos ante un compromiso incumplido".
Para CiU, la alternativa a ese supuesto trasvase que denuncian es "traer agua de la cuenca francesa del Ródano, que tiene excedentes y está a 300 kilómetros"