La CHD asegura que la campaña de riego 2008 finalizó con normalidad gracias a las lluvias registradas en primavera
Mié, 08/10/2008
El presidente de la Confederación Hidrográfica del Duero (CHD), Antonio Gato, aseguró hoy que las lluvias registradas en primavera y los acuerdos alcanzados con los regantes en las Juntas de Explotación han sido "determinantes" para finalizar con "normalidad" la campaña de riego de este año.
Según explicó Antonio Gato hoy durante la presentación del balance de la campaña de riego 2008, a través de estos factores gran parte de los embalses de la cuenca han terminado la campaña con unas reservas de agua superiores a la media de los últimos años.
A lo largo de este periodo, que comenzó oficialmente el 1 de abril y terminó el pasado 30 de septiembre, se han desembalsado 1.479 hectómetros cúbicos de agua para atender las necesidades de las cerca de 250.000 hectáreas que se abastecen de los embalses gestionados por la CHD, de las cerca de 500.000 hectáreas que se riegan en Castilla y León.
Tal y como manifestó el presidente del Organismo de la cuenca del Duero, a comienzos del año hidrológico con unas reservas de agua de 1.272 metros cúbicos "nada hacía presagiar" que al inicio de la campaña de riego las reservas de agua acumuladas en los embalses (1.406 hectómetros cúbicos) fueran un 30 por ciento inferiores a las habituales, como consecuencia de uno de los otoños e inviernos "más secos de los registrados en las últimas décadas".
Por ello, el 27 de marzo, "dada la situación de excepcionalidad", la Comisión de Desembalse llegó a proponer al presidente de la CHD la aprobación de un Real Decreto que recogiera "medidas excepcionales" para corregir los efectos de la sequía en la cuenca.
Además, se acordó en los sistemas "más críticos" reducir las reservas mínimas de agua con las que deberían contar los embalses una vez que finaliza la campaña de riego.
Tras estos convenios, la situación "dio un giro" en primavera por las lluvias caídas en abril y mayo, que permitieron "recuperar gran parte de las reservas almacenadas" e hicieron posible "retrasar los desembalses para el riego hasta el mes de junio en la mayoría de los sistemas".
Tal y como subrayó Antonio gato, en la mayor parte del territorio de la cuenca se batieron en estos meses "récords históricos de precipitaciones", como las lluvias registradas en el mes de mayo en Soria, que alcanzaron "el nivel más elevado de los últimos cien años".
Por otro lado, los acuerdos alcanzados con los regantes en las Juntas de Explotación permitieron terminar la campaña con unas reservas de agua similares a las de 2007. A fecha de 30 de septiembre los embalses almacenaban 1.182 hectómetros cúbicos de agua frente a los 1.254 de 2007, un año considerado "bueno".
DATOS POR EMBALSES
En concreto, terminaron la campaña con unas reservas de agua superiores a los últimos años y, por tanto, con buenas perspectivas para el 2009 todos los embalses de la provincia de palencia, de los que se abastecen los sistemas del Carrión y Pisuerga-Bajo Duero, así como los de Burgos, de los que toma agua el sistema Arlanza.
Con más agua almacenada que la media de los últimos años terminaron también la campaña los embalses de Linares del Arroyo (Segovia), Santa Teresa (Salamanca), La Cuerda del Pozo (Soria), Águeda (Salamanca), Las Cogotas (Ávila) y Pontón Alto (Segovia).
Por el contrario, todos los embalses de la provincia de León acabaron la campaña con unas reservas inferiores a las de otros años, aunque se ha conseguido que, "incluso en el caso de Villameca", se haya terminado la campaña acumulando reservas de agua por encima de los niveles mínimos acordados por la Comisión de Desembalse celebrara el 27 de marzo.
MODERNIZACIÓN DE REGADÍOS
Por otra parte, el presidente de la CHD explicó que en los últimos años, gracias a la puesta en marcha por parte del Gobierno y a la implicación de los regantes, la tendencia de regar "a manta" está "empezando a cambiar", puesto que en 2004 el 60 por ciento de los terrenos de regadío utilizaban esta técnica, mientras que en 2007 estas cifras se reducían hasta el 55 por ciento.
Por este motivo, a su juicio "todo apunta" a que en los próximos años, con la puesta en marcha de los programas de modernización de regadíos, se asistirá a una reducción "progresiva e imparable de este sistema tradicional de riego" y se llegará a la media nacional de uso de esta técnica, del 45 por ciento.
Según explicó Antonio Gato hoy durante la presentación del balance de la campaña de riego 2008, a través de estos factores gran parte de los embalses de la cuenca han terminado la campaña con unas reservas de agua superiores a la media de los últimos años.
A lo largo de este periodo, que comenzó oficialmente el 1 de abril y terminó el pasado 30 de septiembre, se han desembalsado 1.479 hectómetros cúbicos de agua para atender las necesidades de las cerca de 250.000 hectáreas que se abastecen de los embalses gestionados por la CHD, de las cerca de 500.000 hectáreas que se riegan en Castilla y León.
Tal y como manifestó el presidente del Organismo de la cuenca del Duero, a comienzos del año hidrológico con unas reservas de agua de 1.272 metros cúbicos "nada hacía presagiar" que al inicio de la campaña de riego las reservas de agua acumuladas en los embalses (1.406 hectómetros cúbicos) fueran un 30 por ciento inferiores a las habituales, como consecuencia de uno de los otoños e inviernos "más secos de los registrados en las últimas décadas".
Por ello, el 27 de marzo, "dada la situación de excepcionalidad", la Comisión de Desembalse llegó a proponer al presidente de la CHD la aprobación de un Real Decreto que recogiera "medidas excepcionales" para corregir los efectos de la sequía en la cuenca.
Además, se acordó en los sistemas "más críticos" reducir las reservas mínimas de agua con las que deberían contar los embalses una vez que finaliza la campaña de riego.
Tras estos convenios, la situación "dio un giro" en primavera por las lluvias caídas en abril y mayo, que permitieron "recuperar gran parte de las reservas almacenadas" e hicieron posible "retrasar los desembalses para el riego hasta el mes de junio en la mayoría de los sistemas".
Tal y como subrayó Antonio gato, en la mayor parte del territorio de la cuenca se batieron en estos meses "récords históricos de precipitaciones", como las lluvias registradas en el mes de mayo en Soria, que alcanzaron "el nivel más elevado de los últimos cien años".
Por otro lado, los acuerdos alcanzados con los regantes en las Juntas de Explotación permitieron terminar la campaña con unas reservas de agua similares a las de 2007. A fecha de 30 de septiembre los embalses almacenaban 1.182 hectómetros cúbicos de agua frente a los 1.254 de 2007, un año considerado "bueno".
DATOS POR EMBALSES
En concreto, terminaron la campaña con unas reservas de agua superiores a los últimos años y, por tanto, con buenas perspectivas para el 2009 todos los embalses de la provincia de palencia, de los que se abastecen los sistemas del Carrión y Pisuerga-Bajo Duero, así como los de Burgos, de los que toma agua el sistema Arlanza.
Con más agua almacenada que la media de los últimos años terminaron también la campaña los embalses de Linares del Arroyo (Segovia), Santa Teresa (Salamanca), La Cuerda del Pozo (Soria), Águeda (Salamanca), Las Cogotas (Ávila) y Pontón Alto (Segovia).
Por el contrario, todos los embalses de la provincia de León acabaron la campaña con unas reservas inferiores a las de otros años, aunque se ha conseguido que, "incluso en el caso de Villameca", se haya terminado la campaña acumulando reservas de agua por encima de los niveles mínimos acordados por la Comisión de Desembalse celebrara el 27 de marzo.
MODERNIZACIÓN DE REGADÍOS
Por otra parte, el presidente de la CHD explicó que en los últimos años, gracias a la puesta en marcha por parte del Gobierno y a la implicación de los regantes, la tendencia de regar "a manta" está "empezando a cambiar", puesto que en 2004 el 60 por ciento de los terrenos de regadío utilizaban esta técnica, mientras que en 2007 estas cifras se reducían hasta el 55 por ciento.
Por este motivo, a su juicio "todo apunta" a que en los próximos años, con la puesta en marcha de los programas de modernización de regadíos, se asistirá a una reducción "progresiva e imparable de este sistema tradicional de riego" y se llegará a la media nacional de uso de esta técnica, del 45 por ciento.