Medio Ambiente anuncia para 2009 los primeros caudales del Júcar-Vinalopó
Mar, 28/10/2008
El presidente de la Confederación Hidrográfica del Júcar, Juan José Moragues, anunció ayer en Novelda que la sociedad estatal Acuamed tiene previsto iniciar en los próximos meses las pruebas del trasvase Júcar-Vinalopó para que la canalización pueda ser una realidad a lo largo de 2009 y puedan llegar los 80 hm3 prometidos hasta Villena. Moragues reiteró que, hoy por hoy, sigue siendo imposible plantear la construcción de una segunda toma en el Azud de Antella, tal como reclama la Junta Central de Usuarios y ni siquiera se refirió a la opción de la potabilizadora en el Azud de la Marquesa, infraestructura a la que no se oponen los regantes y que, incluso, está pactada entre el Consell y el Ministerio de Medo Ambiente. Moragues acompañó a la directora general del Agua, Marta Morén, a la inauguración del embalse "Luis Alted", intentando por todos los medios que nadie pudiera "importunarla" con preguntas directas sobre el polémico proyecto en el que el Gobierno central invierte 300 millones de euros pero sigue sin concretarse con los futuros usuarios.
Morén habló poco pero lo suficiente para asegurar en sus palabras a los agricultores que "el Vinalopó tendrá agua en cantidad y calidad" para luego, en un breve contacto con la Junta Central, subrayar la intención del nuevo equipo del Ministerio de trabajar codo a codo con los agricultores por este objetivo.
El presidente de la CHJ, Juan José Moragues, manifestó en la presentación de las obras del nuevo embalse regulador de Novelda que las obras del trasvase Júcar-Vinalopó "progresan adecuadamente, con un 58% ejecutado a fecha del pasado 30 de septiembre", según sus palabras. De esta manera, el presidente del organismo de cuenca avanzó que "en el año 2009 habrá agua trasvasada del Júcar al Vinalopó", aunque matizó que estas primeras derivaciones corresponden a la "fase de pruebas" de la infraestructura hídrica que los agricultores del Vinalopó llevan esperando casi 600 años.
En relación a la demanda de las comunidades regantes de la comarca, que solicitaban una segunda toma de agua complementaria a la proyectada en el Azud de la Marquesa, el presidente de la CHJ manifestó que "no existe ninguna toma de agua proyectada al margen de la anteriormente citada" y matizó que los regantes "posiblemente no conozcan con detalle el proyecto del trasvase, razón por la que se nombró una comisión para explicárselo".
Por otra parte, en relación al porcentaje de las obras de trasvase que corresponden al Gobierno autonómico, Moragues estimó que "quizá hubo un tiempo en que la Conselleria de Medio Ambiente suponía que no íbamos a hacer el trasvase, y eso quizá posibilitó que no invirtieran a tiempo".
Moragues informó además de que el proyecto de trasvase "va a absorber las ayudas europeas", cuya solicitud se priorizará para que las obras puedan optar a estos fondos comunitarios antes de que caduque el plazo de petición el próximo 31 de diciembre.
Por su parte, la directora general del Agua, Marta Morén, se pronunció únicamente sobre el embalse regulador y derivó las preguntas sobre el trasvase Júcar Vinalopó al presidente de la CHJ. A preguntas de este medio nos comentó que la petición de una segunda toma no era nada oficial y que por tanto sólo existe la del Azud de la Marquesa.
No obstante, Morén trabaja desde el pasado septiembre con la Junta Central en la búsqueda de una solución al conflicto que mantienen los regantes con el Gobierno por la ejecución del trasvase de aguas del Júcar a la provincia. Las defenestraciones de la ministra Cristina Narbona y del consejero-delegado de Aguas del Júcar, José María Marugán, tras la llegada de Ángeles Espinosa al nuevo Ministerio de Medio Ambiente, abrieron la vía del diálogo y éste se concretó en septiembre durante la reunión celebrada en Madrid con Marta Morén, persona a la que los regantes del Vinalopó tuvieron ocasión de dar a conocer su proyecto en Bruselas en julio de 2003 cuando la hoy directora general del Agua era técnico en la capital de la UE.
Los regantes aceptan, incluso, la toma del agua desde el Azud de la Marquesa (Cullera) siempre que se les garantice la calidad del agua y un precio competitivo. Fuentes presentes en la reunión apuntaron ayer que cobra fuerza la posibilidad de que se construya un macrodepuradora en el azud que trate los caudales antes de impulsarlos hacia la provincia.
El Ministerio de Medio Ambiente colocó la primera piedra del nuevo trazado del Júcar-Vinalopó el 19 de julio de 2007 y espera que las obras culminen en el segundo semestre de 2009 para enviar a la provincia hasta 80 hm3 de agua al año. En principio sólo sirve para el regadío pero desde ayer los usuarios confían en que pueda llegar a ser prepotable. Por su parte, la Conselleria de Medio Ambiente ha adjudicado ya a la unión de empresas Romymar-Saico por 34 millones de euros la construcción de la red de canalizaciones por la que se distribuirá el agua del trasvase Júcar-Vinalopó.
Morén habló poco pero lo suficiente para asegurar en sus palabras a los agricultores que "el Vinalopó tendrá agua en cantidad y calidad" para luego, en un breve contacto con la Junta Central, subrayar la intención del nuevo equipo del Ministerio de trabajar codo a codo con los agricultores por este objetivo.
El presidente de la CHJ, Juan José Moragues, manifestó en la presentación de las obras del nuevo embalse regulador de Novelda que las obras del trasvase Júcar-Vinalopó "progresan adecuadamente, con un 58% ejecutado a fecha del pasado 30 de septiembre", según sus palabras. De esta manera, el presidente del organismo de cuenca avanzó que "en el año 2009 habrá agua trasvasada del Júcar al Vinalopó", aunque matizó que estas primeras derivaciones corresponden a la "fase de pruebas" de la infraestructura hídrica que los agricultores del Vinalopó llevan esperando casi 600 años.
En relación a la demanda de las comunidades regantes de la comarca, que solicitaban una segunda toma de agua complementaria a la proyectada en el Azud de la Marquesa, el presidente de la CHJ manifestó que "no existe ninguna toma de agua proyectada al margen de la anteriormente citada" y matizó que los regantes "posiblemente no conozcan con detalle el proyecto del trasvase, razón por la que se nombró una comisión para explicárselo".
Por otra parte, en relación al porcentaje de las obras de trasvase que corresponden al Gobierno autonómico, Moragues estimó que "quizá hubo un tiempo en que la Conselleria de Medio Ambiente suponía que no íbamos a hacer el trasvase, y eso quizá posibilitó que no invirtieran a tiempo".
Moragues informó además de que el proyecto de trasvase "va a absorber las ayudas europeas", cuya solicitud se priorizará para que las obras puedan optar a estos fondos comunitarios antes de que caduque el plazo de petición el próximo 31 de diciembre.
Por su parte, la directora general del Agua, Marta Morén, se pronunció únicamente sobre el embalse regulador y derivó las preguntas sobre el trasvase Júcar Vinalopó al presidente de la CHJ. A preguntas de este medio nos comentó que la petición de una segunda toma no era nada oficial y que por tanto sólo existe la del Azud de la Marquesa.
No obstante, Morén trabaja desde el pasado septiembre con la Junta Central en la búsqueda de una solución al conflicto que mantienen los regantes con el Gobierno por la ejecución del trasvase de aguas del Júcar a la provincia. Las defenestraciones de la ministra Cristina Narbona y del consejero-delegado de Aguas del Júcar, José María Marugán, tras la llegada de Ángeles Espinosa al nuevo Ministerio de Medio Ambiente, abrieron la vía del diálogo y éste se concretó en septiembre durante la reunión celebrada en Madrid con Marta Morén, persona a la que los regantes del Vinalopó tuvieron ocasión de dar a conocer su proyecto en Bruselas en julio de 2003 cuando la hoy directora general del Agua era técnico en la capital de la UE.
Los regantes aceptan, incluso, la toma del agua desde el Azud de la Marquesa (Cullera) siempre que se les garantice la calidad del agua y un precio competitivo. Fuentes presentes en la reunión apuntaron ayer que cobra fuerza la posibilidad de que se construya un macrodepuradora en el azud que trate los caudales antes de impulsarlos hacia la provincia.
El Ministerio de Medio Ambiente colocó la primera piedra del nuevo trazado del Júcar-Vinalopó el 19 de julio de 2007 y espera que las obras culminen en el segundo semestre de 2009 para enviar a la provincia hasta 80 hm3 de agua al año. En principio sólo sirve para el regadío pero desde ayer los usuarios confían en que pueda llegar a ser prepotable. Por su parte, la Conselleria de Medio Ambiente ha adjudicado ya a la unión de empresas Romymar-Saico por 34 millones de euros la construcción de la red de canalizaciones por la que se distribuirá el agua del trasvase Júcar-Vinalopó.