Paralizadas las obras para trasvasar el agua del río Huerva
Jue, 20/11/2008
Las obras de la tubería que llevará agua desde el río Huerva a la comarca del Campo de Belchite y a la cuenca del río Aguasvivas para recrecer el embalse de Las Torcas se paralizaron la semana pasada como consecuencia "de las denuncias interpuestas por los agentes forestales al considerar que el trazado que se estaba siguiendo no era el marcado y entraba en una zona protegida, para la que no tienen autorización del Inaga", según explicó ayer el alcalde de Tosos, José Luis Ansón.
Las máquinas ya han concluido el 90% del recorrido proyectado en un primer momento, y tan solo falta que entren en el término municipal de Tosos, contrario a la realización de la obra pero donde está la toma de agua. Aunque su alcalde aseguró ayer que donde están trabajando y se han paralizado es, de por sí "y según el Instituto Geológico", término de Tosos.
De forma paralela a esta denuncia, la organización Huerva Vivo, que focalizan sus esfuerzos en contra de lo que consideran un trasvase sinsentido del Huerva al Aguas Vivas, ha anunciado que iniciará acciones legales contra este proyecto y que las presentarán durante la marcha-concentración que este sábado han organizado en Tosos. Y sobre la que ya han confirmado su presencia desde políticos de CHA y sindicatos como CCOO, a figuras como Pedro Arrojo y alcaldes y concejales de la zona.
"Lo que no se ha hecho con el Ebro que no se haga en el Huerva", afirma José Luis Ansón. Y este es el mensaje que durante meses están lanzado en los distintos municipios afectados a través de mesas informativas y reuniones con los vecinos de los pueblos.
Para Huerva Vivo este trasvase supone la concesión de unos 630 millones de litros de agua a localidades con planes de expansión urbanística como Valmadrid, La puebla de Albortón, Aguilón, Fuendetodos y Villanueva. De hecho, la obra está promovida por la Mancomunidad de Agua de Las Torcas, de la que forman parte estos municipios.
Las críticas que lanzan tanto vecinos como conservacionistas es el fin del agua a trasvasar. "No es para consumo de boca, sino para meros intereses especulativos", insisten. Y por eso han organizado ya varias marchas de protesta y concentraciones como las llevadas a cabo a las puertas de la Expo de Zaragoza.
La Confederación Hidrográfica del Ebro, según Huerva Vivo, ya les ha hecho una primera concesión de agua de 104 millones de litros anuales (3,32 litros por segundo). Una concesión que, entienden, "jamás se tenía que haberse comenzado a tramitar, porque se falseó el lugar de captación; se ocultó al Ayuntamiento de Tosos desde dónde se iba a hacer la captación, y nunca justificaron la necesidad del agua. Además, alegan que la directiva europea del Agua rechaza trasvases intercuencas como en este caso".
Las máquinas ya han concluido el 90% del recorrido proyectado en un primer momento, y tan solo falta que entren en el término municipal de Tosos, contrario a la realización de la obra pero donde está la toma de agua. Aunque su alcalde aseguró ayer que donde están trabajando y se han paralizado es, de por sí "y según el Instituto Geológico", término de Tosos.
De forma paralela a esta denuncia, la organización Huerva Vivo, que focalizan sus esfuerzos en contra de lo que consideran un trasvase sinsentido del Huerva al Aguas Vivas, ha anunciado que iniciará acciones legales contra este proyecto y que las presentarán durante la marcha-concentración que este sábado han organizado en Tosos. Y sobre la que ya han confirmado su presencia desde políticos de CHA y sindicatos como CCOO, a figuras como Pedro Arrojo y alcaldes y concejales de la zona.
"Lo que no se ha hecho con el Ebro que no se haga en el Huerva", afirma José Luis Ansón. Y este es el mensaje que durante meses están lanzado en los distintos municipios afectados a través de mesas informativas y reuniones con los vecinos de los pueblos.
Para Huerva Vivo este trasvase supone la concesión de unos 630 millones de litros de agua a localidades con planes de expansión urbanística como Valmadrid, La puebla de Albortón, Aguilón, Fuendetodos y Villanueva. De hecho, la obra está promovida por la Mancomunidad de Agua de Las Torcas, de la que forman parte estos municipios.
Las críticas que lanzan tanto vecinos como conservacionistas es el fin del agua a trasvasar. "No es para consumo de boca, sino para meros intereses especulativos", insisten. Y por eso han organizado ya varias marchas de protesta y concentraciones como las llevadas a cabo a las puertas de la Expo de Zaragoza.
La Confederación Hidrográfica del Ebro, según Huerva Vivo, ya les ha hecho una primera concesión de agua de 104 millones de litros anuales (3,32 litros por segundo). Una concesión que, entienden, "jamás se tenía que haberse comenzado a tramitar, porque se falseó el lugar de captación; se ocultó al Ayuntamiento de Tosos desde dónde se iba a hacer la captación, y nunca justificaron la necesidad del agua. Además, alegan que la directiva europea del Agua rechaza trasvases intercuencas como en este caso".