Baleares invertirá 450 millones en obras de saneamiento de aguas hasta 2015
Jue, 05/03/2009
El Gobierno balear y el Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino (MARM) firmaron hoy un protocolo de colaboración por el que ambas administraciones invertirán en las islas más de 450 millones de euros en más de 200 obras de saneamiento y depuración de aguas hasta el año 2015.
En el acto de firma del acuerdo, que se encuadra en el Plan Nacional de Calidad de Aguas, participaron la ministra del ramo, Elena Espinosa, el presidente del ejecutivo balear, Francesc Antich, y el conseller balear de Medio Ambiente, Miquel Ángel Grimalt.
De los 450 millones de euros, de los que el Gobierno balear aportará un sesenta por ciento y el cuarenta restante el Ministerio, 350 millones se destinarán a obras en depuradoras y los otros 100 a actuaciones de saneamiento de aguas.
Espinosa anunció que está previsto que Baleares reciba en 2009 la primera partida de esta inversión -cincuenta millones de euros- que se destinarán a actuaciones en cuatro depuradoras de las islas.
En concreto, se trata de las de Santa Eulalia (Ibiza), Addaia (Menorca), Can Picafort y Palma (Mallorca).
La ministra destacó que Baleares tiene un "elevadísimo" porcentaje en el cumplimiento de las directivas europeas sobre calidad de aguas, que supera el 95 por ciento de las mismas.
Espinosa añadió que "ninguna otra comunidad -refiriéndose a la balear- tiene tan claro como ésta la indisoluble relación entre desarrollo y sostenibilidad".
En buena parte debido a la importancia del turismo en las islas, "que demanda un entorno y un paisaje gestionado con parámetros de calidad ambiental cada vez más exigentes", precisó.
Grimalt resaltó que, gracias a estas actuaciones, Baleares conseguirá cumplir los objetivos medioambientales de la directiva Marco del Agua de la Unión Europea, que tiene como fecha límite para su ejecución el año 2015.
Antich recalcó la importancia de estas medidas medioambientales, ya que "las islas son frágiles y necesitan una especial atención en todo lo relacionado con los recursos naturales".
Asimismo, dijo que la principal actividad del archipiélago es el turismo de "calidad" que "demanda una apuesta por la sostenibilidad"
En el acto de firma del acuerdo, que se encuadra en el Plan Nacional de Calidad de Aguas, participaron la ministra del ramo, Elena Espinosa, el presidente del ejecutivo balear, Francesc Antich, y el conseller balear de Medio Ambiente, Miquel Ángel Grimalt.
De los 450 millones de euros, de los que el Gobierno balear aportará un sesenta por ciento y el cuarenta restante el Ministerio, 350 millones se destinarán a obras en depuradoras y los otros 100 a actuaciones de saneamiento de aguas.
Espinosa anunció que está previsto que Baleares reciba en 2009 la primera partida de esta inversión -cincuenta millones de euros- que se destinarán a actuaciones en cuatro depuradoras de las islas.
En concreto, se trata de las de Santa Eulalia (Ibiza), Addaia (Menorca), Can Picafort y Palma (Mallorca).
La ministra destacó que Baleares tiene un "elevadísimo" porcentaje en el cumplimiento de las directivas europeas sobre calidad de aguas, que supera el 95 por ciento de las mismas.
Espinosa añadió que "ninguna otra comunidad -refiriéndose a la balear- tiene tan claro como ésta la indisoluble relación entre desarrollo y sostenibilidad".
En buena parte debido a la importancia del turismo en las islas, "que demanda un entorno y un paisaje gestionado con parámetros de calidad ambiental cada vez más exigentes", precisó.
Grimalt resaltó que, gracias a estas actuaciones, Baleares conseguirá cumplir los objetivos medioambientales de la directiva Marco del Agua de la Unión Europea, que tiene como fecha límite para su ejecución el año 2015.
Antich recalcó la importancia de estas medidas medioambientales, ya que "las islas son frágiles y necesitan una especial atención en todo lo relacionado con los recursos naturales".
Asimismo, dijo que la principal actividad del archipiélago es el turismo de "calidad" que "demanda una apuesta por la sostenibilidad"