El mayor lago del mundo está amenazado por el cambio climático
Mar, 05/05/2009
El Lago Baikal, en Siberia, considerado el mayor lago del mundo, afronta la posibilidad de un severo deterioro ecológico como resultado del cambio climático.
El lago está considerado un tesoro oculto para los biólogos y ha recibido la declaración de Lugar Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, debido a la alta densidad de su rica fauna y flora, no presentes en ningún otro lugar.
Quizás la amenaza inminente más alarmante sea la dependencia de la cadena alimentaria de unas algas micoscópicas conocidas como diatomas, y que puede resultar muy vulnerable a la esperada disminución del tiempo en que el lago permanece helado cada invierno.
El artículo ha sido escrito por Marianne V. Moore, del Wellesley College en Massachusetts, y otros cinco coautores, incluidos cuatro de la Universidad Estatal de Irkutsk en Rusia. Moore y sus colegas advierten de que el clima del Lago Baikal se ha ido templando de forma medible en las últimas décadas, y se espera un incremento en la precipitación media anual. El grosor del hielo invernal en el Lago ha ido reduciéndose en las últimas décadas, y el periodo libre de hielo ha ido a más. Los cambios en la composición de la cadena alimenticia han sido ya documentados.
Una reducción futura en la duración de la capa de hielo se espera que restrinja la producción de las diatomas endémicas del lago, porque a diferencia de otras especies similares, crecen bajo el hielo en primavera y son altamente dependientes de la cobertura de hielo para su reproducción y crecimiento.
Estas algas constituyen la dieta principal para los pequeños crustáceos que abundan en el lago y que, a su vez, sirven de base alimenticia para el pescado. Además, los crutáceos podrían ser afectados por cambios en la transparencia del hielo, como resultado de los cambios en el régimen de precipitación y en la dinámica del viento.
Periodos más cortos de cobertura de hielo y alteraciones en la transparencia del hielo pueden también dañar a la foca del Baikal, el mayor predador del lago y la única en su especie cuyo hábitat es el agua dulce. Como las focas dan a luz a sus crías sobre el hielo, una fusión prematura puede forzarlas a echarse al agua antes de mudar su pelo, lo que provocaría un descenso en su fertilidad. La contaminación industrial sólo resultaría un problema añadido para el futuro biológico de la que es mayor reserva de agua dulce en estado líquido del mundo.
El lago está considerado un tesoro oculto para los biólogos y ha recibido la declaración de Lugar Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, debido a la alta densidad de su rica fauna y flora, no presentes en ningún otro lugar.
Quizás la amenaza inminente más alarmante sea la dependencia de la cadena alimentaria de unas algas micoscópicas conocidas como diatomas, y que puede resultar muy vulnerable a la esperada disminución del tiempo en que el lago permanece helado cada invierno.
El artículo ha sido escrito por Marianne V. Moore, del Wellesley College en Massachusetts, y otros cinco coautores, incluidos cuatro de la Universidad Estatal de Irkutsk en Rusia. Moore y sus colegas advierten de que el clima del Lago Baikal se ha ido templando de forma medible en las últimas décadas, y se espera un incremento en la precipitación media anual. El grosor del hielo invernal en el Lago ha ido reduciéndose en las últimas décadas, y el periodo libre de hielo ha ido a más. Los cambios en la composición de la cadena alimenticia han sido ya documentados.
Una reducción futura en la duración de la capa de hielo se espera que restrinja la producción de las diatomas endémicas del lago, porque a diferencia de otras especies similares, crecen bajo el hielo en primavera y son altamente dependientes de la cobertura de hielo para su reproducción y crecimiento.
Estas algas constituyen la dieta principal para los pequeños crustáceos que abundan en el lago y que, a su vez, sirven de base alimenticia para el pescado. Además, los crutáceos podrían ser afectados por cambios en la transparencia del hielo, como resultado de los cambios en el régimen de precipitación y en la dinámica del viento.
Periodos más cortos de cobertura de hielo y alteraciones en la transparencia del hielo pueden también dañar a la foca del Baikal, el mayor predador del lago y la única en su especie cuyo hábitat es el agua dulce. Como las focas dan a luz a sus crías sobre el hielo, una fusión prematura puede forzarlas a echarse al agua antes de mudar su pelo, lo que provocaría un descenso en su fertilidad. La contaminación industrial sólo resultaría un problema añadido para el futuro biológico de la que es mayor reserva de agua dulce en estado líquido del mundo.