Ecologistas en Acción exigió ayer a la Junta de Andalucía que comunique las medidas que se van a adoptar para evitar la propagación del mejillón cebra, tras detectarse un ejemplar adulto en el embalse de Los Bermejales (Granada) y tomarse medidas preventivas en los pantanos de Iznájar, Cordobilla y Malpasillo. La organización indicó que las poblaciones que conviven junto a los pantanos andaluces deben conocer la gravedad de una posible expansión de esta especie exótica. Por ello, los ecologistas consideran que la Junta debe liderar la lucha contra el mejillón cebra, establecer mecanismos de participación pública y darle a este problema la máxima prioridad, "dadas las nefastas consecuencias ambientales y económicas que puede suponer la invasión de este molusco". Los ecologistas indican que esta especie produce una gran deposición de materia orgánica, lo que favorece el crecimiento de algas y bacterias nocivas y, a la vez, perjudica la concentración de fitoplancton, del que depende la cadena trófica de los ríos. Además, según explican, su alta tasa de reproducción hace que sus poblaciones causen grandes problemas en las infraestructuras hidráulicas. Eso es lo que ocasiona problemas en todo tipo de turbinas, desagües, depósitos, plantas potabilizadoras de agua, presas, acequias, canales, etcétera, causando graves pérdidas económicas. Por último, considera prioritario la prohibición de las actividades acuático-deportivas en Iznájar e intensificar las labores de vigilancia y control de todas las cuencas de la provincia.

Ecologistas en Acción exigió ayer a la Junta de Andalucía que comunique las medidas que se van a adoptar para evitar la propagación del mejillón cebra, tras detectarse un ejemplar adulto en el embalse de Los Bermejales (Granada) y tomarse medidas preventivas en los pantanos de Iznájar, Cordobilla y Malpasillo. La organización indicó que las poblaciones que conviven junto a los pantanos andaluces deben conocer la gravedad de una posible expansión de esta especie exótica.

Por ello, los ecologistas consideran que la Junta debe liderar la lucha contra el mejillón cebra, establecer mecanismos de participación pública y darle a este problema la máxima prioridad, "dadas las nefastas consecuencias ambientales y económicas que puede suponer la invasión de este molusco".

Los ecologistas indican que esta especie produce una gran deposición de materia orgánica, lo que favorece el crecimiento de algas y bacterias nocivas y, a la vez, perjudica la concentración de fitoplancton, del que depende la cadena trófica de los ríos. Además, según explican, su alta tasa de reproducción hace que sus poblaciones causen grandes problemas en las infraestructuras hidráulicas. Eso es lo que ocasiona problemas en todo tipo de turbinas, desagües, depósitos, plantas potabilizadoras de agua, presas, acequias, canales, etcétera, causando graves pérdidas económicas.

Por último, considera prioritario la prohibición de las actividades acuático-deportivas en Iznájar e intensificar las labores de vigilancia y control de todas las cuencas de la provincia.