Endesa ya ha iniciado los trámites para construir en Málaga una central que genere electricidad a partir del gas natural y que estaría ubicada en la finca El Contador, junto a la estación depuradora del Guadalhorce. Estos primeros pasos aspiran a despejar el polémico horizonte de la que sería la segunda planta de estas características en la ciudad, tras la que está construyendo Gas Natural en Campanillas y que entrará en servicio a finales de este año.
El Ministerio de Industria ha abierto el plazo para presentar alegaciones a la declaración de utilidad pública y de impacto ambiental a este proyecto, que supondrá una inversión de 181 millones de euros y que reforzará el autoabastecimiento de la provincia de energía eléctrica con una producción estimada en 492 megavatios al año y que se unirán a los 400 megavatios que producirá la planta de Gas Natural en Campanillas.
Fuentes de Industria recordaron que la Costa del Sol es muy deficitaria y en verano se encuentra muy cerca del colapso en el suministro eléctrico. Así, reconocen que esta situación se paliará con la central de ciclo combinado que se está terminando en Campanillas y que la nueva infraestructura planteada por Endesa permitirá cubrir la demanda actual y servir energía a toda la costa, hasta Almería.
Esta planta utiliza como combustible el gas natural, uno de los menos contaminantes, al ser inexistente la emisión a la atmósfera de partículas, así como la reducción del CO2 y la práctica desaparición del SO2 (este último componente es el responsable de la lluvia ácida).
Además, el diseño de la central eléctrica le permite aprovechar la energía producida por la combustión del gas natural para mover una turbina de vapor, lo que amplía la capacidad de generación eléctrica. Así, mientras que con el gas natural se obtienen 322 megavatios, con la turbina de vapor se consiguen otros 170 megavatios.
La cercanía con la estación depuradora del Guadalhorce es uno de los aspectos estratégicos destacados por Endesa en su proyecto, ya que utilizará agua depurada en estas instalaciones para alimentar el sistema de refrigeración. Además, devolverá este líquido en mejores condiciones al tener su propia planta para mejorar el tratamiento del agua.
La central necesita de 672 metros cúbicos de líquido a la hora, que suministrará la depuradora del Guadalhorce procedente de los residuales tratados. En caso de que haya algún problema, aprovechará el agua de la presa de Pilones.
Críticas. Esta segunda central fue cuestionada por IU en 2008, ya que presentó una moción a finales de julio para que el Ayuntamiento se negase a su construcción. En ese momento, el equipo de gobierno consideró "innecesaria" esta planta, aunque rechazó la moción.
Sin embargo, en el PGOU que está en trámite la parcela dejó de estar considerada como terreno industrial a ser ´sistema técnico´, que permite estas instalaciones. Un portavoz de Endesa reconoció que ahora han comenzado los trámites, pero que la decisión sobre su construcción se tomará más adelante.