La Generalitat Valenciana ha ultimado la modernización del regadío de 700 hectáreas, distribuidas en 1.450 parcelas, en la zona de Puertas de Murcia (Orihuela) con una inversión superior a los seis millones y medio de euros. La principal infraestructura de estas obras es un espectacular embalse con capacidad para 110.000 metros cúbicos de agua captada de pozos, del Azarbe Merancho y la Acequia de Murcia, que después es filtrada para su uso en riego por goteo.
El conseller de Medio Ambiente, Urbanismo y Agua, José Ramón García Antón (fallecido ayer, ver páginas 2 a 7) visitó por la mañana estas obras modernización, las más importantes de la Vega Baja destinadas a la transformación del regadío por inundación al riego localizado con aguas del Segura. Sobre la una de la tarde, García Antón realizó un recorrido por el embalse de 110.000 metros cúbicos que se está concluyendo ahora, en compañía del concejal de Urbanismo de Orihuela, Antonio Rodríguez Barberá y el juez privativo de Aguas de Orihuela, Jesús Abadía, además de regantes de la zona. Los agricultores de esta zona limítrofe con Murcia ya han comenzado a transformar sus parcelas y hacen uso de un embalse menor de 20.000 metros cúbicos, en unas infraestructuras también sufragadas por el Ministerio de Agricultura. García Antón, que ya había visitado el desarrollo de este proyecto en varias ocasiones, insistió en el discurso de la Generalitat de recuperar el trasvase del Ebro y en señalar los esfuerzos de su departamento a la hora de reutilizar los recursos hídricos con las instalaciones de depuradoras mejoradas. Además recordó que el sector agrícola es el que mejor está soportando la crisis económica.

Suministro eléctrico

En este sentido, García Antón calificó ayer como "increíble" que "un Gobierno (central) con el peso que tiene decida ubicar una desaladora en un punto determinado y decida la potencia que necesita y que no tenga previsión de donde se tiene que abastecer energéticamente".
El conseller hizo estas declaraciones al hilo de una información publicada por INFORMACION en la que se indicaba que la desaladora de Torrevieja, la más grande de Europa, no tendrá garantizado el abastecimiento eléctrico hasta dentro de dos años. García Antón, matizó que la desalinizadora contará con un suministro inicial insuficiente "el que llega ahora a Torrevieja" y que ni tan siquiera tendrá capacidad para generar el 50% del agua prevista. Y lo que es más grave para el conseller "no saben" de dónde va a venir la que falta.
El conseller que ha mantenido, como representante de la Generalitat, una postura muy crítica con la construcción de la desalinizadora del Gobierno explicó a los periodistas que esa instalación debe generar 80 hectómetros anuales de agua. "Se está estudiando a ver si desde Torremendo llega una línea hasta Torrevieja. Línea que tiene problemas medioambientales (atraviesa la umbría de Sierra Escalona) y que estamos todos intentando solventar", explicó.
Para Antón este hecho es "el paradigma de los despropósitos. No saben si van a tener energía ni si van a tener usuarios". Porque la desaladora de Torrevieja tampoco tiene usuarios, dijo. "El Gobierno ha hecho una trampa. Decían que el trasvase del Ebro tenía problemas porque no había convenio con los usuarios, los regantes y están haciendo desaladoras sin ese convenio". A lo "mejor no sería una trampa", dijo, "si lo plantearan directamente.que las obras hidráulicas no tuvieran que amortizarlas los usuarios. Los viajeros pagarían 600 euros por billete si tuvieran que amortizar el coste real del AVE. Las obras hidráulicas estratégicas las debería financiar el propio Estado", concluyó.