La compañía Emalsa, suministradora del agua de abasto en Las Palmas de Gran Canaria y Santa Brígida, ha detectado la existencia de falsos agentes comerciales que intentan hacer negocio a costa de la compañía. Se presentan en los domicilios particulares como representantes de la empresa para hacer análisis del agua, y luego ofrecen productos con los que prometen mejorar la calidad.

Emalsa recuerda que el "estricto protocolo de control de calidad del agua" de la compañía "se realiza de forma permanente, recogiendo muestras diariamente y analizando depósitos, redes de transporte y de distribución". Además, la empresa explica que el "intenso programa de muestreo, que se realiza en la red pública de distribución sin necesidad de acceder a las viviendas de los clientes, garantiza que la calidad del agua que se suministra se ajusta a los exigentes parámetros establecidos por la normativa sanitaria, estando claramente definidos y garantizados por las autoridades los mecanismos que garantizan la puntual información a la opinión pública de cualquier desviación de estos valores".

Desde la compañía se recuerda que colabora con el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria en la realización de los controles que la corporación ha definido en el protocolo municipal de control sanitario del agua en el grifo de los consumidores.

Por otra parte, Emalsa recuerda a sus clientes que es necesaria la realización del mantenimiento periódico de las instalaciones interiores (depósitos, canalizaciones, entre otros) y disponer de depósito con capacidad suficiente para garantizar el consumo de agua para un mínimo de 48 horas, "quedándose al margen de la información y asesoramiento que estos agentes comerciales ofrecen, ni del resultado del agua producto que de cualquier aparato o filtro se obtenga".