El Ministerio de Medio Ambiente, y Medio Rural y Marino licita los servicios para la elaboración de proyectos de implantación de los planes de emergencia de presas
Mié, 09/09/2009
El Ministerio de Medio Ambiente, y Medio Rural y Marino ha licitado los servicios para la elaboración de proyectos de implantación de planes de emergencia de presas, en su primera fase. El presupuesto destinado a esta actuación es de 1.883.362 euros.
Tras la entrada en vigor del Reglamento Técnico sobre Seguridad de Presas y Embalses se han llevando a la práctica todas y cada una de las obligaciones incluidas en su articulado, poniéndose de manifiesto la entidad de algunas de ellas, como, por ejemplo, la elaboración y posterior implantación de los Planes de Emergencia de Presas, ante la ausencia de experiencia previa en la materia.
Ello ha exigido el desarrollo de criterios adecuados consensuados entre la Dirección General del Agua y la Dirección General de Protección Civil y Emergencias. La colaboración continua entre ambos organismos ha sido clave para agilizar el proceso de aprobación, encontrándose actualmente aprobados un total de 178 Planes de Emergencia de Presas.
Una vez aprobados los planes de Emergencia es obligatoria su implantación. Esta actividad incluye la elaboración previa de un Proyecto en el que se incluyan las características y presupuesto de la sala de emergencia, de los equipos de comunicación desde la presa con las autoridades implicadas en la gestión de la emergencia y de los sistemas de aviso a la población en la zona afectada en la primera media hora por una posible rotura.
Además de esto hay que desarrollar el Plan de comunicación a la población afectada, lo que exige coordinar actividades con protección civil autonómica y autoridades locales.
Actualmente el Ministerio de Medio Ambiente, y Medio Rural y Marino tiene finalizados los planes de emergencia de todas las presas cuya titularidad ostenta.
La Dirección General del Agua, con la licitación del Contrato de Servicios que anuncia hoy ha decidido impulsar el proceso de implantación de los Planes de Emergencia de Presas en paquetes, en cada cuenca hidrográfica, a medida que se vayan aprobando aquellos. Eso garantizará, además de la existencia de unos criterios uniformes de implantación a nivel nacional y en el ámbito geográfico de cada una de las Confederaciones Hidrográficas, la generación de una importante economía de escala.
Tras la entrada en vigor del Reglamento Técnico sobre Seguridad de Presas y Embalses se han llevando a la práctica todas y cada una de las obligaciones incluidas en su articulado, poniéndose de manifiesto la entidad de algunas de ellas, como, por ejemplo, la elaboración y posterior implantación de los Planes de Emergencia de Presas, ante la ausencia de experiencia previa en la materia.
Ello ha exigido el desarrollo de criterios adecuados consensuados entre la Dirección General del Agua y la Dirección General de Protección Civil y Emergencias. La colaboración continua entre ambos organismos ha sido clave para agilizar el proceso de aprobación, encontrándose actualmente aprobados un total de 178 Planes de Emergencia de Presas.
Una vez aprobados los planes de Emergencia es obligatoria su implantación. Esta actividad incluye la elaboración previa de un Proyecto en el que se incluyan las características y presupuesto de la sala de emergencia, de los equipos de comunicación desde la presa con las autoridades implicadas en la gestión de la emergencia y de los sistemas de aviso a la población en la zona afectada en la primera media hora por una posible rotura.
Además de esto hay que desarrollar el Plan de comunicación a la población afectada, lo que exige coordinar actividades con protección civil autonómica y autoridades locales.
Actualmente el Ministerio de Medio Ambiente, y Medio Rural y Marino tiene finalizados los planes de emergencia de todas las presas cuya titularidad ostenta.
La Dirección General del Agua, con la licitación del Contrato de Servicios que anuncia hoy ha decidido impulsar el proceso de implantación de los Planes de Emergencia de Presas en paquetes, en cada cuenca hidrográfica, a medida que se vayan aprobando aquellos. Eso garantizará, además de la existencia de unos criterios uniformes de implantación a nivel nacional y en el ámbito geográfico de cada una de las Confederaciones Hidrográficas, la generación de una importante economía de escala.