Con casi 90 años de historia a sus espaldas, la presa del Conde del Guadalhorce no está preparada para absorber el tráfico de coches, autobuses y turistas que soporta hoy en día. Es lo que viene a decir un informe de la Agencia Andaluza del Agua, que recomienda la puesta en marcha de una circunvalación para que los vehículos rodeen la estructura y no tengan que pasar por encima, tal y como sucede ahora.
«Ni el ancho del camino de coronación, ni su trazado en planta, ni la disposición de las edificaciones que rodean la presa admiten un tráfico de cierta intensidad sin correr graves riesgos de deterioro e interferencias negativas en su explotación», señala el informe. Construida en 1971, la presa del Conde del Guadalhorce no fue diseñada para soportar la circulación que soporta, entre otras razones porque el conjunto de embalses de Ardales se ha convertido en uno de los mayores atractivos turísticos de la comarca. Además, la creación de los pantanos de Guadalhorce y Guadalteba un poco más al norte trajo consigo la construcción de nuevos caminos y conexiones que se han transformado en una vía de comunicación más entre la zona y partidos rurales de Antequera y Campillos.

Concurso público

Por esta razón, la Agencia Andaluza del Agua (organismo dependiente de la Consejería de Medio Ambiente) ha sacado a concurso la redacción del proyecto de la carretera de circunvalación, que cuenta con un presupuesto de 90.000 euros y un plazo de ejecución de 12 meses una vez se firme el contrato. En la memoria del pliego de condiciones del concurso se reconoce que en 1994 se redactó un proyecto similar que no se llegó a tramitar, cuando entonces los embalses eran competencia del Ministerio de Obras Públicas y Medio Ambiente.
Los ingenieros de la agencia señalan que la circunvalación debería partir del túnel del camino antiguo de coronación de la presa, discurrir por la margen derecha del río Turón, cruzar el embalse de Gaitanejo con un puente y ascender hasta la presa Guadalhorce-Guadalteba.