El aguacero que barrió la capital en la madrugada de ayer, con hasta 25 litros por metro cuadrado en El Atabal, parece ser un anticipo de lo que se avecina. Los expertos pronostican un año hidrológico húmedo, con precipitaciones por encima de la media, que permitirá incluso duplicar las reservas en algunos de los principales embalses. Así se desprende de los informes del comité de gestión de los recursos hídricos de Málaga, la Axarquía y la Costa del Sol, realizados por la Agencia Andaluza del Agua, a los que tuvo acceso este periódico.
El encuentro, que se celebró ayer en el Palacio de la Tinta de la capital, puso de relieve además el buen estado de las reservas, que permitirían mantener el abastecimiento aunque no se produjeran lluvias en todo el año en la provincia. Aunque hay diferencias: mientras la capital y la Axarquía gozan de una situación óptima, en la Costa del Sol las reservas se encuentran por debajo de las del año anterior, aunque esa zona cuenta con el apoyo de la desaladora.

Estado óptimo

Así, se prevé que la presa del Guadalteba cierre el actual año hidrológico con casi 121 hectómetros cúbicos; habrá 90,7 en la del Guadalhorce y 49 en la del Conde. Estas tres suponen el seguro de vida de la capital y los regadíos del Valle durante la época estival. Pero del informe también se desprende que la presa de Casasola podría alcanzar casi su nivel máximo de llenado, por encima de los 21 hectómetros, tras concluir la fase de pruebas de carga en la que ha estado inmersa desde su puesta en marcha.
Las tormentas también favorecerán el uso de los recursos fluyentes (ríos) y subterráneos (acuíferos), de los que se nutre la capital durante buena parte del año. Tanto es así que, según pone de relieve el organismo dependiente de la Consejería de Medio Ambiente, en la actualidad está prácticamente igualado el abastecimiento procedente de embalses (32,4 hectómetros) y de otros recursos (31,8). En el caso de la capital, el azud (presa pequeña) de Aljaima, que capta el agua de los ríos Grande y Guadalhorce, aportará 23,3 hectómetros. Los acuíferos de la capital han permanecido intactos este año para permitir su recuperación.
En la Axarquía, el estudio prevé que el régimen de precipitaciones sea igual o superior al del pasado año, con lo que el hiperembalse de La Viñuela recibirá un aporte estimado de 69 hectómetros. La Agencia Andaluza del Agua afirma que con el volumen actual sería suficiente para garantizar la demanda anual. El estudio prevé unas necesidades de 18 hectómetros para riego y de casi 17 para consumo humano, y descarta destinar recursos para abastecer a la capital.

Costa del Sol

La peor situación se producirá en la Costa del Sol, aunque no hay riesgo de que se tenga que activar el Decreto de Sequía. El informe pone de relieve la escasa capacidad del pantano de La Concepción, pues se da la paradoja de que deberá abrir sus exclusas y desaguar en al menos dos ocasiones, para mantener el nivel máximo, pese a lo cual llegará a septiembre por debajo del año anterior, con unos 28,7 hectómetros. Frente a la visión optimista de otros territorios, para la zona occidental se parte de una hipótesis conservadora, con unas precipitaciones un 30% inferiores a las del pasado año.
No obstante, la Agencia reconoce la capacidad correctora de la desaladora de Marbella, a la que concede un suministro de 6,5 hectómetros. Otros 3,8 partirán de los pozos de los ríos Fuengirola y Guadiaro.
El comité de gestión también sirvió para poner de manifiesto carencias en la explotación de los recursos, como en el caso de la presa de El Limonero, donde, «a pesar de la insistencia a Emasa para que utilice la conducción hasta el Atabal a su máxima capacidad, no se ha extraído ni la mitad de lo que estaba previsto», cita textualmente.

Mejoras en la gestión

Esto se debe, según este documento, a diversas averías en la conducción y bombeo de La Florida y a dificultades en el tratamiento del agua en El Atabal. La Agencia insistió en que se debe dar prioridad al consumo de este recurso, por tratarse de una presa destinada a laminar (frenar) las posibles riadas.
La delegada de Medio Ambiente de la Junta en Málaga, Remedios Martel, consideró que los datos son buenos, y aseguró que el recurso está garantizado. «Tenemos agua aunque las lluvias sean cero, pero además la previsión apunta a precipitaciones iguales a las del año pasado», indica Martel. Respecto a la situación en la Costa, reconoce que ha bajado aunque no hay riesgo de sequía, y agrega que las estimaciones de gasto permitirán atender a todas las necesidades. «Esperamos lluvias, las previsiones están ajustadas y cerraremos bien el año», sentenció.